¿Cómo puedo conocer las reformas legislativas? Las claves de una experta

Ante la proliferación de normas, inclusión de muy diferentes materias dentro de una misma norma, continuas modificaciones, correcciones, derogación total o parcial de una norma sustituyéndola por otra posterior, etc., nos podemos preguntar ¿dónde debemos acudir para saber con certeza cuáles son las normas vigentes y cuáles son las reformas que se han producido en las mismas?

Antes de pasar a analizar cómo podemos conocer las reformas legislativas es preciso hacer una breve referencia al procedimiento de publicación de las Leyes y su entrada en vigor.

Una vez que una Ley es aprobada por las Cortes Generales, el Rey en el plazo de quince días las sanciona y ordena su inmediata publicación (artículo 91 de la Constitución Española (CE)).

Para que una Ley entre en vigor y produzca efectos jurídicos, después de ser aprobada y sancionada, debe ser publicada en el diario oficial correspondiente (artículo 131.1 de la Ley 39/2015, de 1 de octubre, del Procedimiento Administrativo Común de las Administraciones Públicas (LPAC)). La publicidad de las normas garantiza la seguridad jurídica, y hace posible que todos los ciudadanos puedan conocerlas y cumplirlas.

Una vez publicada la norma en el Boletín Oficial del Estado (BOE), procede comprobar su entrada en vigor. Habitualmente la entrada en vigor de una norma viene establecida en la propia norma, pero en el caso de que no se establezca, acudiremos al artículo 2.1 (Código Civil) en el que se dispone que, “las leyes entrarán en vigor a los veinte días de su completa publicación en el Boletín Oficial del Estado, si en ellas no se dispone otra cosa”. Al período que media entre la publicación en el BOE y la entrada en vigor se le denomina “vacatio legis”.

Durante la vigencia de las normas, estas pueden ser objeto de modificaciones, correcciones e incluso en el momento de su derogación, puede ocurrir que algunas partes de la misma continúen vigentes durante el tiempo que se establezca en su disposición derogatoria, por ello, es necesario, antes de aplicar una Ley, conocer con certeza cuáles son las normas vigentes y cuáles son las reformas que se han producido en la misma. Algunas de las fuentes que se podrán consultar son:

• El Boletín Oficial del Estado, dado que es el diario oficial nacional español dedicado a la publicación de leyes, disposiciones y actos de inserción obligatoria, es la fuente más fiable. Su acceso es gratuito a través de su sitio web oficial (https://www.boe.es/). Una vez localizada la ley o norma con rango de ley que estamos buscando, ya sea bien por la fecha de publicación, nombre de la norma… existen dos opciones para consultar, (i) la de “ver texto consolidado” (podemos ver la versión actualizada de la norma con todas las modificaciones que se han producido), o, (ii) acudir al apartado “Análisis”, donde se nos ofrece toda la información detallada de la norma (rango, la fecha de la disposición, la de publicación, la de entrada en vigor…)
• En cuanto a las normas aprobadas por los órganos legislativos de las Comunidades Autónomas, deberemos acudir al Boletín Oficial de la respectiva Comunidad Autónoma (CA), aunque no todas tienen activada la versión consolidada, o la función análisis. Actualmente, las normas de las Comunidades Autónomas con rango de Ley tienen su texto consolidado en el Boletín Oficial de Estado, aunque la modificación en el BOE se produce con posterioridad a la publicación en el Diario Oficial autonómico, por lo que a efectos de su vigencia rige la fecha de publicación en el Boletín Oficial de la respectiva CA, lo que tenemos que tener muy presente, para saber con certeza si está en vigor una determinada reforma.
• Los sitios web oficiales del Congreso (https://www.congreso.es/) y el Senado (https://www.senado.es/) para obtener información sobre proyectos de ley, debates parlamentarios y el estado de las reformas en curso.
• Bases de datos jurídicas que disponen de textos consolidados, entre las que podemos mencionar, Thomson Reuters Aranzadi, vLex, Noticias Jurídicas, etc., que pueden servir de complemento al BOE, que es el que tiene carácter oficial, aunque conviene señalar que algunas de estas bases suelen tener su acceso restringido y solo es posible acceder mediante suscripción.
• Existen revistas y publicaciones legales (tanto en línea como ejemplares físicos en bibliotecas especializadas) que analizan las reformas legislativas y ofrecen comentarios y opiniones de expertos en la materia.
• Los medios de comunicación y la prensa (periódicos, canales de televisión y sitios web), suelen informar sobre las reformas legislativas y ofrecen análisis sobre su impacto.

Podemos concluir que conocer las reformas legislativas no es una tarea fácil, ante la proliferación de las mismas y las continuas modificaciones que se producen durante la vigencia de la norma, no obstante, podemos acudir a distintas fuentes, entre ellas el BOE por ser la fuente más fiable dado su marcado carácter oficial, que nos permitirán conocer con certeza la vigencia de la norma y sus reformas.