
Familias de las víctimas de la dana les recuerdan con velas, música y fotografías en Picanya. Europa Press / Eduardo Manzana
Un vecino con discapacidad de Alfafar murió "aterrorizado" de madrugada tras acabar la riada con su máquina de oxígeno
Las declarantes, hermanas del fallecido, atribuyeron la muerte a la inundación por agua y rechazaron en el auto que fuera por causa "natural".
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Murió "aterrorizado" de madrugada, a las 01:20, de aquel fatídico 29 de octubre. Era vecino de Alfafar y no sobrevivió a la riada.
La víctima tenía movilidad reducida e iba en silla de ruedas. Con tan solo nueve años sufrió un accidente que le dejó tres meses en coma. Esto le provocó la discapacidad, a la que se unían epilepsia e insuficiencia pulmonar, razón por la que respiraba a través de una incisión en la tráquea (traqueotomía).
El agua de la riada acabó con la máquina de oxígeno que le permitía respirar, según consta en el sumario al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL. También con la medicación y los aerosoles que tomaba a diario y que quedaron sepultados bajo el agua.
A la hermana del fallecido le tocaba cuidar de él el día de la dana. Junto a ella se encontraban su hija y el cuidador de su hermano, que acostó a la víctima en la cama porque no creyó que el agua llegara más arriba.
Sin embargo, el agua alcanzó la altura de la rodilla y entre los tres acompañantes decidieron subirlo al piso de arriba, momento en el que los muebles y electrodomésticos ya flotaban.
El agua superó 1,80 metros de altura y, como consecuencia de la inundación, las medicinas y máquinas quedaron en el piso de abajo, ya sin luz, por lo que no pudo utilizarlas.
Los familiares le taparon con mantas al presenciar que se encontraba mojado -y aterrorizado-, pero finalmente murió.
El marido de la segunda compareciente, también hermana del difunto, llamó tres veces al 112 de Emergencias para que levantaran el cadáver, algo que no se produjo hasta dos días después.
En el registro de llamadas de su teléfono móvil consta esta cifra: dos se dieron el día 30 de octubre, a las 11:30 y a las 14:53 horas; y la tercera, el 31.
Víctima de la dana
Los declarantes, además, solicitaron una modificación de la inscripción de fallecimiento de su familiar en la que constase la hora de la muerte a las 01:20 horas del día 30. También atribuyeron la muerte a la inundación por agua y rechazaron en el auto que fuera por causa "natural".
En un informe ampliatorio fechado el pasado 17 de diciembre, una médico forense del Instituto de Medicina Legal de Valencia insistió en que no había en el cuerpo de la víctima indicios compatibles con sumersión o sofocación por obstrucción de las vías respiratorios ni violencia, por lo que la "etiología médico legal de la muerte seguía siendo natural, de origen patológico".
"Ahora bien -añadió la forense tras conocer las circunstancias del fallecimiento-, aunque la muerte no se produjo por la violencia de la catástrofe natural, sí se produjo como consecuencia de la misma, dado que con su estado basal tan patológico y la ausencia de oxígeno y medicación, no pudo sobrevivir a la situación".
En consecuencia, el Instituto de Medicina Legal finalmente consideró a este fallecido como "víctima de la catástrofe".
Tras estos cambios, la jueza ordenó el pasado 13 de enero una pieza separada a nombre de este fallecido, que pasó a ser considerada víctima de la riada.
El sumario de la dana, que investiga el Juzgado de Instrucción 3 de Catarroja, recoge la hora exacta de cada muerte para determinar si podían haberse evitado.