Amadeo Anca murió hace cuatro meses en Valencia tras pasar siete horas de agonia en una clínica dental y su familia sigue sin recibir el resultado definitivo de la autopsia.
Este vecino de Benidorm (Alicante) falleció desangrado después de que le colocaran unos implantes dentales, una intervención compleja y que implica ciertos riesgos, pero que es uno de los tipos de cirugía bucodental más seguros y fiables.
Cuatro meses después de su trágica muerte, la familia de Amadeo pasa ahora por una angustiosa espera. Un juzgado de Valencia ha abierto diligencias para determinar las circunstancias en las que se produjo el fallecimiento, pero la investigación está en punto muerto a la espera de conocer las conclusiones de los forenses.
[Las siete horas de agonía de Amadeo Anca: fue a ponerse unos implantes dentales y acabó muerto]
Por el momento, la clínica guarda silencio a la espera de que el procedimiento judicial avance. Mientras, la familia de Amadeo organizó la semana pasada una concentración en la clínica dental de Valencia donde se produjeron los hechos para denunciar la supuesta negligencia médica.
La mujer de Amadeo, Liliana da Conceicao, acusa a los responsables de un supuesto caso de negligencia médica. Su abogada, Pilar Marí, pedirá que sean condenados por un homicidio imprudente y por un delito de omisión del deber de socorro.
"La autopsia es importante porque obtendremos mucha información, pero todavía no nos han explicado por qué tardaron siete horas en llamar a una ambulancia cuando mi marido estaba sangrando desde que salió de la operación", reitero este lunes Liliana en declaraciones a EL ESPAÑOL.
Una de las hipótesis que se maneja es que la clínica pudo dañar el hueso al colocar los implantes. Según apuntan fuentes conocedoras del caso, este problema pudo desencadenar la hemorragia masiva que sufrió Amadeo, aunque los informes médicos que espera el juzgado desde hace 4 meses deberán de confirmar esta posibilidad.
En la causa se ha incluido otro expediente médico del hospital La Fe de Valencia, donde fue trasladado el paciente tras siete horas de agonía, que recoge que Amadeo sufrió un golpe en la cabeza. La abogada que representa a la familia pedirá el interrogatorio de todo el equipo médico que asistió a la víctima cuando llegó al hospital La Fe.
La cirujía
La operación tuvo lugar el pasado 16 de mayo y la clínica derivó a Amadeo a otro centro de Valencia porque disponía de más recursos asistenciales para la cirugía. La hija de la pareja, una niña de 7 años, acompañó a sus padres ese día y presenció la agonía.
La cirugía arrancó a las ocho en punto de la mañana y en teoría finalizó sin ninguna complicación. Pero horas después de entrar en sala, la víctima empezó a sentir mucho dolor en el pecho y a sangrar abundantemente por la nariz y la boca. Los profesionales que le atendieron tardaron siete horas en llamar a una ambulancia, según denuncia su familia.
Amadeo acabó falleciendo a última hora de la tarde por un shock hipovolémico tras sufrir tres paradas cardiorrespiratorias en el hospital La Fe de Valencia.
"En uno de los informes clínicos de La Fe pone que mi marido sufrió un golpe en la cabeza y quiero que me expliquen qué pasó. Quiero saber de dónde salió el golpe. Es posible que se produjera si le sujetaron la cabeza para sacarle las muelas. O se pasaron con la fuerza o se cayó. Él estaba mareado y muy pálido", explica Liliana.
El equipo médico del hospital La Fe comunicó los hechos al juzgado y al día siguiente declaró Liliana. "Estaba sola en Valencia, mi marido había muerto y no sabía qué hacer. Fui a declarar al juzgado con la misma ropa y llena de sangre".
Liliana denuncia que la clínica no se ha interesado por la situación en la que ha quedado su familia ni le ha devuelto el dinero de la intervención de Amadeo. "Me han destrazado la vida y no se han preocupado de nada", lamenta.
Al parecer, los abogados del centro dental han ofrecido una indemnización inicial por el fallecimiento y así evitar el proceso judicial. Pero la familia la ha rechazaod por irrisoria.
¿Negligencia?
La investigación tendrá que determinar si la muerte de Amadeo se trata de una negligencia médica o una muerte sobrevenida por otras circunstancias.
La legislación española marca que todos los pacientes que acuden a una clínica dental deben tener un historial clínico con sus datos personales y los posibles efectos que produzca la intervención.
Sin embargo, en la mayoría de los casos, cuando una persona acude a una clínica dental firma un contrato con la empresa, pero no con los profesionales que trabajan en el centro.
Por ello, ahora el juzgado investigará si la clínica informó debidamente a Amadeo sobre los riesgos que asumía al someterse a la intervención que finalmente le costó la vida.
Tras el suceso, la clínica emitió un breve comunicado en el que aseguró que "en todo momento se ha actuado de acuerdo a los estándares de calidad que respaldan nuestra actividad desde hace 24 años".
"Tras más de 25.000 intervenciones jamás se ha sucedido incidente alguno. La única intención de esta compañía es esperar a que el proceso finalice para conocer todos los detalles del mismo", añadió la nota.
"En el comunicado que envió la clínica dicen que, como el caso está en el juzgado, van a esperar a la autopsia definitiva", expone la familia.
"Ellos no entienden lo que reclamo, a mí lo que me diga la autopsia me da exactamente igual, lo que yo denuncio es que tuvo una hemorragia grave y esperaron 7 horas a llamar a una ambulancia cuando estaba sangrando por la boca y la nariz. Esto se podría haber evitado", lamenta Liliana.
Sin emabrgo, desde la clínica reiteran que su "única intención de esta compañía es esperar a que el proceso finalice para conocer todos los detalles del mismo". El juzgado no tomará declaración a los implicados hasta recibir el informe definitivo de la autopsia.