La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, no está pasando por su mejor momento político y sus intentos por atizar a los rivales tampoco están siendo los más acertados, como se puede comprobar con el último dardo que le ha querido lanzar a Juan Carlos Monedero y se ha vuelto en su contra. Ya son cuatro de los 11 concejales que tiene Ciudadanos en el Ayuntamiento madrileño los que le han dado la espalda.
Tras la salida de Aniorte y Niño la pasada semana, este lunes Madrid Total ha podido confirmar que el concejal del distrito de La Latina y Hortaleza, Alberto Serrano, se ha dado de baja del partido. Otros, como la delegada de Deportes, Sofía Miranda, han pedido públicamente el voto para el actual alcalde, José Luis Martínez-Almeida. Entremedias, la estrategia que está llevando la vicealcaldesa en redes sociales no termina de calar.
Si la pasada semana se llevaba una cascada de críticas por su comparación entre el aborto y los vientres de alquiler, a cuenta de la polémica de Ana Obregón, esta vez su chascarrillo contra Monedero también le ha devuelto un sinfín de réplicas. El cofundador de Podemos se limitó a compartir una fotografía leyendo en una terraza, apuntando que "la cultura cristiana nos crea mala conciencia cuando disfrutamos mucho".
Un zasca de vuelta
Continuó apreciando y poniendo como ejemplo que "de Madrid con poca gente, sin Ayuso (estará por ahí en un apartamento de Sarasola), con una cerveza fría y un libro mientras desalmados crucifican a Jesucristo", bromeando con llamar al Papa por ello:
No ha hecho Monedero ninguna referencia a Villacís, pero ella se apresuró a echarle en cara que estuviese en una terraza y a decirle que agradezca también "que no conseguisteis levantarlas", en referencia a las polémicas que se dieron en Madrid con la hostelería en la desescalada del Covid:
Sin embargo, lejos de recibir los aplausos que esperaba por su zasca, lo que ha tenido que leer son decenas de críticas como estas:
E incluso Juan Carlos Monedero se mostraba así de perplejo por el ataque:
Un zasca bumerán en toda regla.