Gabriel Rufián e Irene Montero son dos de los políticos que más ataques reciben desde las redes sociales. A la primera parece que le baste con el mero hecho de existir para recibir odio a raudales y al segundo, a sabiendas de que cuenta con la antipatía de los conservadores, le gusta agitar el avispero puntualmente para recoger las habituales lluvias de zascas de las que damos cuenta puntualmente en La Jungla. Por esto, la defensa del portavoz de ERC a la ministra ha multiplicado las críticas en Twitter.
A estas alturas, el viaje oficial de Irene Montero a Estados Unidos con parte de su equipo del Ministerio de Igualdad está en boca de todos. La osadía de esas cuatro mujeres para subirse en Falcon y cruzar el Atlántico es imperdonable para los sectores más reaccionarios, incapaces de admitir siquiera la existencia de la agenda de la ministra en Washington y Nueva York. Reuniones con organismos como la ONU Mujeres y referentes feministas como Gloria Steinem han sido calificadas por el Partido Popular como unas "vacaciones".
El cuestionamiento público al viaje de Montero y su equipo ha llegado a extremos delirantes en Twitter, donde los sectores más conservadores dominan el arte de la manipulación que dirigen a través de cuentas creadas únicamente con ese fin. Así, en mitad del ruido, han surgido voces en defensa de la ministra de Igualdad y su derecho, como el del resto de miembros del Gobierno, de hacer desplazamientos oficiales y usar para ello uno de los aviones presidenciales.
"Expertas en políticas de género"
Esas voces, con mucho tino, han señalado que en las críticas a Montero existe un componente machista. Primero, contra la propia cartera ministerial, que sigue cuestionada y ninguneada por parte de la sociedad y por formaciones como Vox. Segundo, porque la comitiva estaba formada por cuatro mujeres jóvenes y feministas que, siguiendo el argumentario de algunos, no podrían por ello ser profesionales en su ámbito. Así, teniendo esto en cuenta, Rufián ha querido manifestar que las críticas y mofas a "expertas en políticas de género" no existirían si "llevaran corbata y mearan de pie", algo que vendría a justificar "más que nunca las políticas y el Ministerio de Igualdad que representan":
Como decíamos, poner a la vez a dos pesos pesados en la diana de las críticas ha provocado que "expertas" haya escalado hasta la lista de tendencias de Twitter gracias a las respuestas machistas al tuit de Rufián, a los zascas de sus habituales y también a los comentarios del sector transexcluyente del feminismo que aprovecha cualquier oportunidad para cargar contra la ministra:
Rufián, en este caso, sí ha recuperado la vieja constumbre de retuitear los zascas que más le han gustado:
Una forma de asimilar las críticas con elegancia.