Ana Milán ha sido muchas cosas: periodista, modelo, actriz, humorista, 'influencer'... todos oficios tan populares como propensos a colocarla en el disparadero de las críticas. Y de eso, Ana Milán, sabe bastante. Su última polémica en redes sociales ha tenido que ver con un tuit donde mostraba su indignación con la publicidad en Youtube. Un tema que, a priori, parecería poner a todos de acuerdo... pero que se le ha vuelto en contra.
Además, el de los 'haters' es un tema sobre el que Ana Milán ya se ha pronunciado en más de una ocasión y frente al que se muestra tajante: "Me da mucha pena quién sufre ese acoso, tanta pena como quién es capaz de escribir y acosar en redes", dijo tras el suicidio de Verónica Forqué. Y añadió algo bastante lógico: "No hace falta el insulto".
Aunque ella afirma tener "pocos haters" y, por otro lado, "le da igual". Su actitud seguramente sea la más correcta, sobre todo si se tienen en cuenta situaciones como la que ha vivido a raíz de su último tuit: "Empresas que os anunciáis en YouTube interrumpiendo el vídeo que estamos viendo: os odiamos".
Una amplia parte de Twitter se ha puesto a su favor. Al fin y al cabo, ¿a quién le agradan esos anuncios incómodos que interrumpen cada dos por tres los videos de Youtube? "Lo de anuncios con vídeos de 5 a 30 minutos de duración o en vídeos que ni están monetizados es inexcusable", ha dicho un usuario, poniéndose del lado de Milán.
Sin embargo, sus 'haters', sean pocos o no, han aparecido rápidamente para señalar la contradicción entre su reclamo de eliminar los anuncios y que ella misma ha aparecido en publicidad en los videos de Youtube.