A pesar de que muchos espectadores no pudieron apreciar las escenas de Aemond y Vhagar en todo su esplendor, debido a la oscuridad de la imagen del último episodio de La casa del dragón, la secuencia del príncipe Targaryen reclamando al legendario dragón consigue ser épica.

Fue un momento muy importante para el personaje, que demostró arrojo, valentía y descaro, pero también pagó un alto precio. Un precio justo, como diría él mismo. Opinión que comparte su abuelo, Otto Hightower. Y tienen razón, ya lo había dicho Rhaenyra en el primer episodio de la serie: "Todos piensan que los Targaryen estamos más cerca de los dioses que de los hombres, pero dicen eso por nuestros dragones. Sin ellos, somos cualquier otra persona".

HBO Max ha compartido un vídeo detrás de cámaras con el equipo técnico de la serie, en el que muestran cómo se rodaron estas secuencias y proporcionan algunos detalles para comprender la importancia de Vhagar, un dragón hembra, el más viejo de Poniente y el más grande que se ha visto hasta ahora en el universo de Juego de tronos.

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Los dragones nunca dejan de crecer

Vhagar tiene 130 años y mide 150 metros de longitud, por lo que es varias veces más grande que Drogon. Angus Bickerton, supervisor de efectos visuales de la serie, explica en el vídeo que parte de la mitología de los dragones es que no dejan de crecer hasta que mueren, y que con los años su cuerpo va notando los estragos de la intemperie y empiezan a tener problemas para soportar su propio peso al volar.

Sobre su personalidad, Ryan Condal, añade que Vhagar ya es demasiado grande para el mundo que la rodea y que no cabe los Pozos de dragón, por lo que se ha acostumbrado a la soledad. "Es gruñona y duerme todo el tiempo. Básicamente, es una gata vieja", afirma el coshowrunner.

Cómo se rodó la secuencia

Como en The Mandalorian, La casa del dragon también ha dejado atrás el fondo verde de los croma y trabaja con The Volumen, que básicamente es un cubo enorme en el que las paredes y el techo son paneles LED con resolución 4K (2500 pantallas), en los que se recrea el escenario virtual en sincronización con las cámaras; un híbrido entre la retroproyección y el CGI.

Para la serie se desarrolló también la "dragon riding", una plataforma de movimiento diseñada especialmente para simular la silla de jinete para el vuelo de los dragones, en la que se subió Leo Ashton, el actor que interpreta a Aemond en estos episodios.

Miguel Sapochnik, coshowrunner y director, explica que rodaron dos días en la playa, seis meses después en The Volumen, adonde volvieron siete meses después para rodar algunos planos adicionales, por lo que en total tardaron más de un año en que la escena estuviera terminada. 

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'La casa del dragón' está disponible en HBO Max.