Máximo Huerta, de ministro de Cultura a librero: "Esto no es una puerta giratoria"
El periodista y escritor valenciano abre su nuevo negocio, una librería en su pueblo: "Es a lo Whitman, pero en mi Buñol".
11 enero, 2023 02:02"En la vida, lo que a veces parece un final, es realmente un nuevo comienzo". Esta cita de Una tienda en París es una de las más subrayadas por los lectores de Máximo Huerta (Utiel, 1971) y la que mejor representa los últimos años del periodista y escritor valenciano.
El exministro de Cultura sacrificado por Pedro Sánchez siete días después de ser nombrado ha abierto este martes su primera librería y lo hace en Buñol, su pueblo. La librería de Doña Leo es un lugar de encuentro, un proyecto con el que cumple un sueño tras resurgir profesionalmente después de un breve paso por la política que a veces pesa demasiado.
"El otro día leí uno de los tweets más acertados. Era de un gran profesional de Televisión Española que decía 'que un exministro de Cultura abra una librería no es una puerta giratoria y merece un aplauso'. Realmente no lo es. Me pareció, después de todo lo que se ha dicho, el mejor piropo respecto a esa etapa de mi vida".
Casi todas las novelas del comunicador están ambientadas en París y su librería, también. "Es a lo Whitman, pero en mi Buñol", la primera que abre al público en su pueblo.
"Siempre quise tener una librería y, además, en mi pueblo porque no había. Cuando viajo me encanta mirar las librerías y este verano me dije 'sí, adelante, vamos a montarla' y ha sido un trayecto complicado, pero divertido. Espero que sea como una de esas novelas largas y maravillosas que se disfrutan mucho".
La apertura marca una nueva etapa en la vida del valenciano y EL ESPAÑOL acompaña al autor las horas previas a la inauguración.
Escritor e hijo
Buñol es el pueblo de la Tomatina y ahora también el de la librería de Máximo Huerta. El local era un antiguo horno situado en la calle Cid, frente al ayuntamiento y en medio del recorrido de una de las fiestas más populares de España.
Máximo y su pareja son los libreros y atienden personalmente a los clientes. "Por las mañanas estaré escribiendo, también he grabado un programa de televisión que sigue adelante y por la tarde vendré a la librería a ejercer de farmacéutico de libros".
Desde primera hora de la mañana la calle esta llena de curiosos. La apertura ha generado una gran expectación y Máximo es un vecino querido y apreciado. Un centenar de personas acuden a arroparlo, entre ellos el presidente de la Diputación de Valencia, Toni Gaspar; o altos cargos del Gobierno de Ximo Puig.
"Es nuestro mejor embajador. España se perdió un ministro, pero nosotros hemos ganado", cuenta una vecina. Su repentina marcha de la política parecía el final, pero el tiempo ha demostrado que escondía un nuevo comienzo, como en Una tienda en París. "Soy el ejemplo vivo de que la vida da muchas vueltas y aquí estoy muy bien".
Poco antes de la apertura oficial recibe la visita más especial, la de Clara Hernández, su madre. El comunicador ha sido muchas cosas en esta vida, pero señala que su faceta favorita es la de hijo.
Ambos están muy unidos y en 2022 fue intervenida en el hospital La Fe de Valencia del tumor que le diagnosticaron dos años antes. Máximo ha estado al pie de la cama, cuidando de su madre, de forma incondicional todo este tiempo. "Es una mujer que ha leído mucho y que trajo la lectura a mi vida, y que ahora no puede leer por el tumor que ha tenido".
"Para mí es la mayor satisfacción, y por encima de escritor, de periodista y de todo lo que he sido o seré, soy hijo".
Refugio de autores
La librería lleva el nombre de su perra. "La recogí en la calle y es mi editora. Ella me acompaña siempre, sabe cuándo escribo y cuándo paro. Si tengo dudas, leo en voz alta y si ella no dice nada sigo adelante. Me parece que es también un homenaje al cariño que hay entre perros y compañeros".
El local es pequeño, muy coqueto, y te conduce a un mundo mágico con cientos de aventuras. "Hay muchas fotos de mi trayectoria literaria y vital y el de hoy es un gran recuerdo". Entre ellas, el comunicador destaca la fotografía que comparte con la escritora Ana María Matute y que está colocada en un lugar destacado.
"Todos los elementos que veis tienen un significado y compartir la vida está muy bien", explica Huerta mientras atiende a los primeros clientes, recibe ramos de flores de sus lectores o responde a cientos de mensajes.
"Era José Bono -exministro y expresidente de Castilla-La Mancha-, que quiere pasarse por la librería". A continuación, llega una representante del Ministerio de Cultura que toma unas fotos para enviárselas al ministro Miquel Iceta.
- ¿Echa en falta algún mensaje?
- "No. Los mensajes y las flores que he recibido son para bien y no echo de menos ni soy rencoroso".
- ¿Cómo se ve España desde Buñol?
- "Desde los pueblos se ve todo distinto, porque hay otra temperatura y otra velocidad, y no nos importa tanto Ayuso, que sale mucho en la prensa y no sé por qué. Más allá de Madrid hay mucho país".
La librería de Doña Leo también se va a convertir en un punto de encuentro para escritores valencianos y de toda España. Las primeras en acudir a Buñol serán Dolores Redondo y Luz Gabás. Pero la lista proseguirá con otras destacadas firmas del panorama literario, como Elvira Lindo. "Y yo encantado de que vengan", apunta.
"Una librería en un pueblo es vital para comentar libros, para recomendarlos... Si te pilla en el momento oportuno, un libro te salva".
- ¿Es feliz ahora?
- "Hoy estoy contento y el resto de días estoy tranquilo. Es que estar feliz es jodido".