La historia de Carla Pulpón, la actriz dentro de la polémica y querida Mapi: coplera, cantante...
Habitual en las obras infantiles, fue la elegida en el casting para ser el personaje 'japonés' que acompaña a Jandro en el concurso de TVE.
20 agosto, 2022 02:30En los años 80, Espinete cautivó a miles de niños con su presencia en ‘Barrio Sésamo’ en Televisión Española, pero muy pocos sabían que dentro de ese gran erizo rosa estaba la actriz Chelo Vivares dándole vida. Tres décadas después, la historia se repite, pero esta vez es Carla Pulpón la encargada de darle vida a una niña animada, Mapi, la protagonista del concurso de RTVE.
Carla Pulpón, intérprete, cuenta con una gran experiencia en obras infantiles de teatro y en programas para niños en televisión, y no dudó en aceptar el reto de meterse dentro de Mapi para que los espectadores disfrutaran con sus ocurrencias junto a Jandro, el presentador.
Sentada en su casa tomando un café tranquilamente, Pulpón atiende a EL ESPAÑOL para recordar sus inicios en la profesión, su pasión por la música -que le viene desde muy pequeña- o como se reía una y otra vez con las películas de Lina Morgan, de la que es fan confesa.
El casting
Carla Pulpón nunca pensó dedicarse al mundo de la interpretación, ella prefería bailar y bailar todo el día. En el colegio era muy buena estudiante, pero luego, en el instituto las cosas cambiaron porque lo que le gustaba era el baile y no los libros de texto. Salía de clase, se iba a su casa a cambiarse y se pasaba toda la tarde bailando. Incluso llegó a dar clases de flamenco, pero nunca se hacía el clásico moño. “Yo prefería llevar dos coletas o peinados estrambóticos. La profesora me decía que iba a acabar de payasa, y así ha sido (risas)”, afirma la madrileña.
Tanto le gustaba que terminó estudiando Danza y un día, decidió presentarse a un casting para una obra infantil, La calabaza de Pipa, para ser bailarina porque ni siquiera se preparó para hacer un personaje. Tanto le gustó al equipo de la representación que terminó siendo la protagonista. “Sin haber estudiado interpretación salí al escenario para representar a mi personaje y aquella vez me sentí más libre que nunca haciendo, básicamente, de Lina Morgan, de la que siempre he sido una gran fan. De hecho, cada vez que hacía la función le enviaba invitaciones a su casa para que viniera a verme, pero nunca lo hizo. Lo intenté por todos los medios”, recuerda Pulpón. A partir de ese momento, se apuntó a una escuela de interpretación y su vida cambió.
- ¿De dónde le viene esa afición a Lina Morgan?
- Recuerdo que de pequeña veía actuaciones de Lina Morgan y me moría de risa. De hecho, la primera vez que mis padres me compraron un ordenador, lo primero que hice fue poner Youtube y ver ‘El último tranvía’ para luego ver toda su obra. Me encanta, me hace feliz ver a Lina Morgan, me parece una clown increíble.
- Sóprendame, que ha puesto alto el listón. ¿Qué más gustos o referentes tiene?
- Desde la infancia me gusta mucho la copla. Recuerdo especialmente un día viendo ‘Lluvia de estrellas’ con mis padres en casa que salió una chica imitando a Isabel Pantoja, de repente sentí que el pecho me latía muy fuerte y no entendía el motivo. Hasta que descubrí que cuando ponían copla en cualquier lugar y cerraba los ojos, me emocionaba. Tendría 6 o 7 años.
- Lo sentía dentro. Me encanta la música, también compongo, toco el piano, la guitarra… De hecho, algunas canciones del circo Price con Cometa el año pasado las compuse yo, posteriormente con un productor musical las pusimos muchísimo más bonitas y las utilizamos en la obra. Me gusta todo lo artístico, puedo estar horas y horas sentada delante del piano. Hubo un día que me senté a las 11 de la mañana y a las 19 horas seguí ahí y ni me había dado cuenta. También me grabo en casa con mi micro y el equipo de grabación, monto los vídeos de lo que he grabado, etc. Bailar, actuar, escribir guiones… me sumerjo en un mundo que se me va el espacio-tiempo y cuando me quiero dar cuenta han pasado muchas horas.
Quién es Carla Pulpón
“Soy una persona de 31 años, bajita y que me gusta estar todo el rato gastando bromas. Es que mi familia es muy bromista y he vivido toda mi vida así. Me encanta el teatro, actuar, hacer personajes y disfrazarme”, explica la actriz. Uno de sus principales personajes es Cometa, la protagonista del espectáculo del circo Price de Madrid en Navidad, un papel que reconoce que ama y que ya está preparando para la obra de estas Navidades. “Estoy deseando subirme al escenario y, como cada vez que hago a Cometa cada año, pintarme un diente de negro”, señala.
- ¿Cuál ha sido su trayectoria profesional hasta llegar a ‘Mapi’?
- Sobre todo he hecho muchas obras infantiles, he estado cantando en un show en un hotel de cinco estrellas de Tenerife, precioso y que creo que es el primero de Europa en tener un teatro dentro. También he trabajado en eventos cantando, bailando o actuando; tenía un programa en el Canal Panda, ‘Panda y la Nave de Cartón’, con Íñigo, mi compañero del circo. Lo último antes de ‘Mapi’ ha sido ‘Cometa soy yo’. Es que ese personaje siempre está conmigo.
- Siempre está rodeada de niños. ¿Le gustarán, al menos?
- Realmente me encanta el público familiar, me gusta muchísimo meter chistes en las obras para adultos, pero que entiendan los niños.
- ¿Cómo ha sido el salto a la televisión nacional para su familia y para usted?
- Mis padres guardan cualquier cosa en lo que salga yo, así que para ellos ha sido increíble, y para mí también. Estoy aprendiendo mucho. Mi familia y mis amigos me apoyan, me dieron la enhorabuena… todo felicidad, la verdad.
Ser Mapi
La llamada para ser la niña animada del concurso de TVE1 le llegó comiéndose un trozo de tarta en su sofá: “Me dijeron que estaban buscando a una persona que fuera bajita, y como yo mido uno 1,52, tamaño de bolsillo (risas)… era una de las condiciones para ser Mapi, tener altura reducida”, explica.
Cree que desde la productora, Mediacrest, llegaron a ella a través de la compañía Yllana, con los que había hecho un curso de clown, y se presentó en el casting “un poco nerviosa porque me había preparado una improvisación de 15 minutos, pero al final, allí solo duró un minuto y me dieron un guion para interpretarlo. Entonces conocí a Diego Serrano, que es el coach, al que le estoy muy agradecida”, recuera la madrileña.
- ¿Cómo es estar dentro de Mapi?
- La mochila pesa mucho, unos siete kilos, y la cabeza otros dos kilos y medio. Tengo que estar muy concentrada cuando me lo ponen, pero cuando la llevo un rato, ni me doy cuenta porque me meto en el papel, estoy en el programa y empezamos. Al principio me costó acostumbrarme porque estaba en un cuerpo que no era el mío, bastante limitada de movimientos y, como yo soy una persona que se expresa mucho con el cuerpo, al principio me costó adaptarme, pero todo ha sido muy gradual y positivo.
- ¿Se imaginaba en un muñeco como hizo, por ejemplo, Chelo Vivares con Espinete?
- Jamás, pero es que nunca he hecho de persona ‘normal’. He hecho de galleta, de cabra… me faltaba el metaverso en un currículum, así que no me lo imaginaba, pero iba encaminada (risas).
- ¿Qué es lo que más le gusta de ser Mapi y lo más complicado de darle vida?
- Lo más difícil es el peso que tengo que llevar en la espalda y el movimiento, que al principio me sentía muy limitada porque yo, como Carla, cuando hablo, bailo, pero me acostumbré. Lo bueno, que me gusta todo de ella, me lo paso muy bien, es otra forma de trabajar, otra cosa nueva a la que adaptarme y estoy aprendiendo muchísimo. El primer día que me pusieron toda la equipación pensé: “Vamos Carla, que tú puedes”.
Mucho dulce
La actriz es muy madrugadora y sobre las seis de la mañana ya está en pie. Desayuna antes de que el coche del programa la vaya a buscar para ir a Televisión Española para grabar el concurso. Eso sí, lo primero que hace cuando llega es llamar al camerino de Jandro para hacer una lectura de guion mientras se come sus M&M’s y Diego Serrano hace lo propio con el donut foundant de la actriz.
“Después de comernos todo el dulce de RTVE, nos vamos a maquillaje, pero a mí lo que me hacen es marcarme las expresiones de la cara para que la cámara coja mejor mis gestos. Luego me pongo el traje y bajo al plató. Saludamos a los invitados, me comprueban todos los gestos y el SGI de Mapi para comenzar. Es todo muy dinámico”, explica.
- ¿Qué tal es trabajar con Jandro?
- Es increíble, una persona con muchísima experiencia y no puedo estar enriqueciéndome más. Con él he encontrado el camino por el que he conseguido adaptarme a Mapi. Es fantástico, muy profesional… solo tengo agradecimiento y cosas positivas de él. Si es buen profesional, como persona, es mejor.
- ¿Le ha llegado a reconocer la voz por la calle?
- Eso no. Sí que me mandan muchos mensajes algunos amigos a los que no les había hecho nada, o gente que me había venido a ver al circo preguntándome si Mapi soy yo.
- ¿Ha dejado el teatro para dedicarse a Mapi por completo?
- No, intento hacer lo máximo posible porque disfruto muchísimo trabajando. Me gusta combinar las cosas porque siento que me enriquezco, tengo la fórmula para estar en lo máximo posible.
- ¿Qué supone para usted, profesionalmente, el reto de ‘Mapi’?
- Como Carla supone muchísimo aprendizaje y rodaje. Me estoy enriqueciendo como persona y como profesional porque el equipo del programa es una pasada.
- ¿Le modulan la voz?
- No, es la mía, pero un poco más aguda.
- ¿Cómo sería Mapi en la vida real? ¿Serían amigas?
- De carne y hueso sería como la ve la gente en la televisión, igual de cabezona. Seguro que seríamos amigas, es que me hace mucha gracia pese a que a mucha gente no se la haga, que lo entiendo, pero a mí sí.
- ¿Ha visto la versión japonesa?
- No un programa entero, pero sí cachitos y ella es más dura que Mapi. Me gustó muchísimo, pero pensé: “En qué lío me he metido…”, y me asusté porque me parecía increíble.
Continuidad
Mapi ha recibido tanto alabanzas como críticas en redes sociales, pero está claro que Televisión Española está apostando muy fuerte por ella ya que le ha llegado a proponer formar parte de Eurovisión Junior: “Como personal de RTVE te podrás presentar para dar los puntos de España. ¿Te gustaría?”, le dijeron por redes sociales, ofrecimiento que aceptó la niña animada: “Cuando y donde queráis. Ay, qué ilusión. ¡Mamá, mamaaaaaaaaa!”.
No parece tan descabellado que finalmente se lleve a cabo, porque en 2004 un personaje infantil de Clan, Lucho (de Los Lunnis) dio los puntos de España en la edición de Eurovisión Junior aquel año.
- ¿Les han dicho si continuarán después del verano?
- No sé nada, espero que sí. De momento estoy disfrutando de unos días de descanso en el metaverso de Carla Pulpón (risas).
- ¿Cree que ‘Mapi’ le abrirá las puertas de otros programas?
- No lo sé, solo puedo decir que en ‘Mapi’ he ganado muchísima experiencia y cosas positivas. Aparte de toda la polémica que se ha creado, me siento muy feliz de haber hecho este trabajo porque me ha enriquecido profesionalmente. Todo trae cosas positivas, también negativas, pero me quedo con lo bueno. Me ha encantado hacer Mapi, estoy muy orgullosa y solo puedo decir cosas buenas de mi experiencia grabando.
- ¿Es muy activa en redes sociales?
- No, no mucho, lo fui, pero últimamente no tanto y es algo que tengo que hacer, debo actualizar mi instagram y mi web con mi experiencia en Mapi, es que acabo de llegar de vacaciones (risas), además, me cuesta hacer publicaciones.