La tortilla de patatas forma parte del ADN gastronómico de España. Es uno de esos platos que donde va, triunfa. De hecho, los españoles más viajeros seguramente hayan tenido que cocinarla en otros lugares para que los consumidores de otros países puedan disfrutar de esta elaboración. Casera, hecha con huevos, patatas, aceite de oliva, sal –y cebolla, según los gustos–, la tortilla española también es un plato que preparan miles de familias para sus comidas y cenas, pero el encarecimiento de la cesta de la compra ha provocado que a los consumidores les salga 53 céntimos más cara prepararla ahora que hace seis meses.
Así se desprende de un estudio que ha realizado EL ESPAÑOL en el que ha calculado el incremento del precio del plato, del 16%, en el último medio año. Pero vayamos poco a poco. Primero, había que esclarecer las cantidades y los ingredientes con los que se iba a hacer el análisis. Este diario, en consecuencia, ha decidido usar como objeto de estudio una tortilla de patatas para cuatro personas. Para hacerla, se emplean seis huevos, medio kilo de patatas, un buen chorro de aceite de oliva para freírlas, sal y media cebolla.
Sí, como leen, este periódico ha apostado por incluir la polémica cebolla en la tortilla porque, según varias encuestas publicadas en medios, entre el 66 y el 73 % de los españoles prefieren añadir la hortaliza a la tortilla española. Los sincebollistas tienen menor fuerza, por lo que incorporar media cebolla en nuestra receta no estaba de más. Pero volviendo a lo que nos atañe, a los precios de los productos y de la propia tortilla, la primera conclusión que se saca es que en noviembre de 2021 preparar la citada tortilla para cuatro personas valía 3,37 euros. Ahora, gastaríamos 3,90 euros. O lo que es lo mismo, 53 céntimos más.
Gran parte de la culpa de esta subida de la tortilla de patatas casera la tienen dos de sus productos: los huevos y el aceite de oliva. Por ejemplo, en noviembre de 2021, último mes con datos consolidados y recogidos por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, el precio medio de cada huevo en supermercados o grandes almacenes era de 0,14 euros. Ahora, en junio de 2022, el precio medio de un huevo sale a 0,19 céntimos. EL ESPAÑOL ha calculado estos datos haciendo la media de coste de los huevos en cinco de los principales supermercados en España. Lo mismo ha hecho con el resto de productos.
Cebolla y aceite, al alza
En el caso del aceite de oliva, según el Ministerio encabezado por Luis Planas, la botella de litro en supermercados y grandes almacenes costaba el pasado noviembre 3,60 euros. Ahora, la cifra promedio en las cadenas asciende a 4,04 euros. 44 céntimos más. Pero como para preparar una tortilla de patatas no se necesita el litro completo, este medio ha decidido hacer el estudio con medio litro, cantidad necesaria para cubrir las patatas y la cebolla para freírlas bien. Así pues, se puede afirmar que para elaborar el plato, el consumidor paga 22 céntimos más en aceite ahora que hace medio año.
Otro producto fresco que ha incrementado su valor para el consumidor es la cebolla. El kilo, en noviembre de 2021, era de 1,30 euros en los supermercados. En mayo/junio, el precio medio se sitúa en 1,50 euros el kilo. Es decir, gastamos 20 céntimos más en cebollas. Para una tortilla de patatas para cuatro personas, concretamente, los cocineros sólo necesitarían media cebolla. Por tanto, gastaremos 19 céntimos por los 16 que pagábamos hace seis meses. El porcentaje del incremento, en todo caso, es del 18%. Otro ingrediente que, por supuesto, encarece la tortilla.
Lo único que se mantiene sin apenas incremento en el precio y, por tanto, que no hace que nuestra tortilla de patatas sea 53 céntimos más cara es la patata. El medio kilo costaba hace medio año 0,52 euros. Ahora, el precio prácticamente sigue siendo el mismo. Por ello, por lo menos uno de los ingredientes esenciales para preparar una tortilla española se ha salvado de la subida de precios generalizada.
Un creciente IPC
Toda esta situación de subida de precios generalizada se ha vuelto a observar en el Índice de Precios al Consumo (IPC) del mes de mayo. De esta manera, los precios han subido un 8,7%, como ha informado este diario, por el encarecimiento de las gasolinas y de los alimentos, como la tortilla de patatas. Es una de las conclusiones del Instituto Nacional de Estadística (INE) en su análisis mensual de este indicador.
Este dato, de hecho, supone un aumento de ocho décimas en mayo en relación con el mes anterior, y un incremento de su tasa interanual de cuatro décimas. Y como ha contado este medio, la inflación retoma en este mes los ascensos después de que en abril se moderara 1,5 puntos de golpe, hasta situarse en el 8,3%. Ahora bien, el dato de mayo deberá ser confirmado por Estadística y, de ser así, estaremos ante el segundo dato más elevado desde 1985.
Este incremento viene motivado por el endurecimiento de la guerra en Ucrania, que ha devuelto la inestabilidad al mercado de las gasolinas, el gas y de los alimentos ante la posibilidad de que se produzca una crisis de materias primas agrícolas y alimentarias. Por ello, la tortilla de patatas, propia del ADN gastronómico de España, también se ha visto afectada en la subida de precios, dado que todos sus ingredientes, salvo las patatas, se han encarecido.