Los polémicos vídeos de la fiesta en la discoteca Maná: un empleado 'resucita' el Covid en Lorca

Desde hace dos décadas la Discoteca Maná-San Javier es el referente de las noches de fiesta en el litoral murciano. Por su pista de baile han pasado el torero Pepín Liria, la modelo María José Besora o el televisivo Kiko Matamoros. La sala veraniega se ha convertido en el primer local de copas de la Región de Murcia cuyo cierre ha sido dictaminado directamente por la Policía Local antes de que resuelva el expediente sancionador la Consejería de Salud. Los agentes lo han precintado por haber cometido una supuesta infracción grave de las restricciones que el Gobierno autonómico ha impuesto al sector del ocio nocturno, con el objetivo de frenar el repunte de positivos por COVID-19.

“El sector de la noche está siendo el cabeza de turco de los rebrotes”, critica la gerencia de la Discoteca Maná-San Javier tras conocer que el expediente sancionador que la Policía Local ha enviado a la Consejería de Salud les podría acarrear una fuerte multa económica: la horquilla oscila de 60.001 hasta la friolera de 600.000 euros. “Esa sanción es nuestra ruina porque es una estocada a una temporada en la que estábamos trabajando al 25% de nuestra capacidad”. No exageran los propietarios del local porque en mayo no pudieron dar el tradicional pistoletazo de salida a las sesiones de house, trap y reguetón al abrigo de su fastuoso garden con piscina y camas balinesas.

El pasado domingo en la discoteca del municipio sanjaviereño se estaba celebrando una fiesta con la asistencia del tronista Yulen, del programa Mujeres y hombres y viceversa que emite Tele 5. Todo iba sobre ruedas hasta que llegó un invitado sorpresa, un subinspector de la Policía Local de San Javier, a bordo de un coche camuflado que estacionó junto a la sala pasados 30 minutos de la medianoche. El mando policial se adentró en el establecimiento y levantó un acta a la que ha tenido acceso EL ESPAÑOL: “Se realiza visita a la Discoteca Maná con el fin de controlar el aforo y que se cumplan las medidas establecidas por el decreto 8/2020 de la Comunidad Autónoma”.

Fachada de la Discoteca Maná-San Javier cerrada por la Policía Local tras veinte años de actividad por vulnerar la normativa sanitaria. E.E.

El citado decreto al que alude el mando policial establece una serie de restricciones a los locales de ocio nocturno, como por ejemplo, la prohibición de consumir en la barra y utilizar la pista de baile, así como la obligación de mantener una separación de 1,5 metros entre los clientes los cuales tendrán que estar sentados. Tales medidas se vulneraron según la citada acta: “Una vez en el interior, se observa que frente al escenario, donde estaban pinchando música, había al menos unas 200 personas, todas de pie, bebiendo, codo con codo, sin ninguna distancia de seguridad, sin mascarillas, y muchos hombres con el torso al descubierto, cantando y sobre el escenario también había algunos bailando”.

El subinspector se dirigió al jefe de seguridad de la sala y le informó de que levantaría acta por presunto incumplimiento de la prevención de medidas de higiene, “con riesgo muy grave a la salud de la población”. Hasta ahora la Consejería de Salud era la que había emitido las órdenes de cierre de pubs y discotecas que se habían convertido en focos de contagios de coronavirus, como ocurrió con el rebrote de la zona de ocio de Atalayas (82 positivos) donde bajó la persiana de cuatro locales. Pero la Discoteca Maná-San Javier ha sido la primera cerrada por la Policía Local antes de que la Consejería emita una orden y se pronuncie sobre el expediente sancionador propuesto por el mando policial.

Cierre directo sin precedentes

“Es la primera vez en la Región que directamente se adopta un cierre cautelar a una discoteca”, tal y como subrayan a este diario desde el departamento policial de San Javier. “Al tratarse de una infracción muy grave, por superar las 100 personas, el decreto 8/2020 de la Comunidad Autónoma, faculta a la Policía Local, pese a no ser el órgano instructor del expediente, a cerrar cautelarmente el establecimiento hasta que se pronuncie la Consejería de Salud”. A partir de ahora Salud dispondrá de 15 días para decidir sobre la clausura de la mítica sala de fiesta y del importe final de la sanción.

Las cosas se están poniendo muy serias para el ocio nocturno en la Región de Murcia después de que Totana haya retrocedido a la Fase 1, por segunda vez desde el incicio de la pandemia de COVID-19, a causa de un rebrote vinculado al Pub Dubai que ya suma 108 contagios. A un escenario similar se enfrenta Lorca: en las próximas 72 horas las autoridades sanitarias decidirán si también confinan la ciudad tras el positivo por coronavirus de un empleado de un pub que ha contribuido a resucitar al ‘bicho’ entre la población. De momento, el Ayuntamiento lorquino para que la cifra de afectados se plante en 16 casos ha ordenado cerrar parques, locales sociales, pistas deportivas...

La terraza de verano de la Discoteca Maná-San Javier tiene piscina y camas balinesas. E.E.

Los vídeos de la polémica

“La gente no cumple las medidas de seguridad a rajatabla porque en los supermercados y los trenes están apiñados y en las playas es donde más desmadre hay con aglomeraciones sin mascarilla y por esa regla habría que cerrarlo todo”, reflexionan indignados desde la gerencia de la Discoteca Maná-San Javier al tiempo que insisten en considerar a los locales de copas “los cabezas de turco” de la curva ascedente que presenta el coronavirus y el resto del país desde hace semanas. “¿Qué pasa con el COVID que no se transmite durante el día y solo lo hace por la noche?”, se preguntan.

La dirección de la sala ha aportado a este diario grabaciones de sus cámaras de vigilancia para demostrar el trabajo que desarrolla la seguridad privada para velar por el cumplimiento de las restricciones que establece el decreto autonómico y que solo permite abrir al público la terraza de la discoteca. “El personal de seguridad se esmera en que se cumplan las medidas higiénico-sanitarias y acompaña a los clientes a la mesa y a su reservado. También vigila que se cumpla la distancia social”.

A juicio de la gerencia del local no se vulneró la normativa como para verse inmersos en un expediente sancionador por una infracción muy grave. “En las imágenes se ve a muchos clientes con mascarilla y la pista de baile estaba ocupada por mesas bajas, que son reservados en los que se sientan en primera fila cerca del escenario donde está la cabina del DJ, junto a otras mesas altas, donde los clientes están de pie. La gente no estaba bailando en la pista, sino junto a sus mesas”.

En la resolución del expediente por parte de la Consejería de Salud podrían jugar un papel clave los vídeos. Al margen de las imágenes de las cámaras de seguridad de la discoteca también hay grabaciones difundidas por Instagram a las que ha accedido la Policía Local y donde se aprecia a gente bailando sin mascarilla, frente al ‘altar’ del DJ, que publicaron con comentarios del tipo: “De mananeo”. Todo ello generó críticas en la mencionda red social: “¿Es que no piensan cerrarlo?”, se preguntaba uno de los usuarios.

Una patrulla de la Policía Local de San Javier supervisando una zona de playa de la localidad.

“Se arriesgan a 600.000 euros de multa”, tal y como apuntaba otro seguidor de Instagram mientras que su apreciación obtenía una respuesta irónica: “Se ve que les sobra”.

La Consejería de Salud será la que tenga la última palabra no solo sobre el futuro de la Discoteca Maná-San Javier, sino de otros locales de copas veraniegos de la Región como el que se ubica en la vecina localidad de San Pedro del Pinatar. La concejal de Seguridad Ciudadana, Ángela Gaona, confirma a EL ESPAÑOL que la Policía Local ha levantado acta contra un establecimiento situado en el puerto pinatarense por el presunto incumplimiento del decreto de ocio nocturno de la Comunidad Autónoma. La edil detalla que la clientela supuestamente ha vulnerado la distancia social y no ha utilizado mascarilla.