Rincones de Galicia: Monasterio de Sobrado dos Monxes
Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, el Monasterio de Sobrado es hoy parada y fonda del Camino de Santiago y uno de los principales ejemplos de conventos medievales de Galicia.
24 febrero, 2021 06:00La fundación del actual Monasterio de Santa María de Sobrado se remonta al año 952, tal como atestiguan varios documentos oficiales, cuando nació como convento benedictino gracias a los Condes de Présaras, don Hermenegildo y doña Paterna, que escogieron como perfecto enclave para su construcción la comarca de las Terras de Melide, en la actual provincia de A Coruña.
En sus inicios se denominó Monasterio de San Salvador y una de sus características fue su división en dos secciones, una destinada a los hombres y otras a las mujeres de la familia de Présaras, aunque lo cierto es que en este período inicial sólo estuvo habitado hasta 1006.
La mejor época del monasterio comienza en el año 1142, cuando es refundado por miembros de la Orden Cisterciense, que empiezan a edificar la iglesia y el monasterio, construidos entre los años 1150 y 1220. Con posterioridad sufrió varias crisis que hicieron peligrar la continuidad del monasterio, sobre todo durante los siglos XI y XIX, en los que se mantuvo cerrado y otros momentos en que los monjes cistercienses tuvieron que abandonar las dependencias monacales.
Los monjes no regresaron hasta 1966 y comenzó entonces el auge del monasterio como hospedería vinculada al Camino de Santiago: el monasterio acoge hoy un albergue para los peregrinos jacobeos, situado en la Casa das Audiencias. En 2015 fue declarado Bien Individual del Camino de Santiago Francés, pasando a formar parte de los monumentos reconocidos como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Visitando el interior del Monasterio de Sobrado
El aspecto actual del Monasterio de Sobrado tras su reconstrucción en los s. XVII y XVIII responde a los cánones del barroco gallego. Esto se observa con claridad en su monumental fachada de 1668, obra de Pedro Monteagudo, de gran verticalidad y con dos torres en sus extremos. Su elaborada decoración formada por elementos vegetales que se mezclan con cabezas fantásticas, son otra prueba más de su barroquismo.
En el interior del recinto monástico destacan dos capillas y tres claustros. La Capilla del Rosario, en la zona norte del crucero es de 1673, obra de Monteagudo, mientras que la Capilla funeraria de San Juan Bautista es de 1230, de estilo románico cisterciense, y constituye uno de los pocos restos medievales que quedan en el convento.
El primer claustro, a la entrada del monasterio, es el llamado Claustro de Hospedería o de los Peregrinos, de estilo herreriano, donde están la biblioteca y la hospedería. El segundo claustro, de las Procesiones o Medallones, se hizo sobre los restos del antiguo claustro medieval. Está adornado con altorrelieves en forma de medallón donde aparecen representados abades, obispos e incluso papas relevantes de la época.
El ultimo, el Claustro Grande, que comenzó a construirse en el s. XVI y se terminó en el s. XVIII, alberga un gran tesoro: la sacristía renacentista de 1572 realizada por Juan de Herrera.
Alrededores del Monasterio de Sobrado
Las visitas al monasterio están suspendidas de forma temporal por causa de la actual pandemia y sólo la tienda permanece abierta, aunque podrían retomarse en cualquier momento, por lo que conviene informarse sobre esta cuestión en la web oficial del Monasterio.
Sin embargo son muchos los lugares de interés en sus proximidades, entre los que destaca la Lagoa de Sobrado, a 1 kilómetro del monasterio, una laguna artificial construida por los monjes a principios del s. XVI con aguas del Tambre para abastecer de agua corriente a las cocinas y molino del conjunto monástico.
El pequeño municipio de Sobrado dos Monxes guarda además otra sorpresa histórica al visitante: el campamento romano de la Ciudadela o Ciadella, un recinto militar brigantino del s. II. d.C. Este yacimiento de más de dos hectáreas, permanece rodeado de una muralla y además se pueden apreciar el foso y los puestos de vigilancia. ¿Qué hacía en esta zona un campamento romano? Aquí se asentaba una facción del ejército romano cuya misión era controlar la calzada que conectaba la antigua Lucus Augusti, actual ciudad de Lugo, con el puerto de A Coruña.
Emma Sexto