El Pleno de Santiago aprueba destinar más de 7 millones de remanentes a gastos corrientes

El último pleno antes del inicio oficial de la campaña para las elecciones municipales en Santiago ha visto aprobadas una batería de propuestas que buscaban ponerse al día en facturas de servicios locales, subvencionar empresas de economía social así como financiar algunas acciones urgentes. También durante esta reunión de la Corporación se ha aprobado nombrar al médico Ramón Baltar como hijo predilecto de la ciudad.

El Gobierno local ha llevado a pleno en la mañana de este miércoles más de 7 millones de euros en remanentes que han sido aprobados por el resto de grupos. 4,4 millones de ellos se destinarán a hacer frente a "gastos correntes procedentes de obrigas do ano pasado e sobre todo aos custes derivados do incremento dos prezos da luz polo proceso inflacionista" según explicó la concejala de hacienda Marta Abal, estos últimos con un presupuesto total de 2,3 millones. También en gastos corrientes se ha abonado unos 1,2 millones de euros para el transporte urbano así como para el servicio de gestión de la ORA y la grúa o el mantenimiento de la pasarela de la intermodal.

Los 2,8 millones de euros restantes se han redirigido a diferentes inversiones. Entre ellas se encuentra la compra de dos minibuses de bajas emisiones por 500.000 euros, la instalación de una rampa de acceso al Museo do Pobo Galego por 23.493 euros, así como la reurbanización de las calles de Mallou y Nogueira por casi 645.000 euros. Actuaciones de mejora para el saneamiento de o Eixo y A Sionlla han recibido un total de 342.000 euros.

Durante la sesión plenaria extraordinaria Abal también detalló el expediente de suplemento de crédito por un importe de 2.803.055,33 para hacer frente a algunas necesidades en la financiación del gasto de personal del Ayuntamiento.

El médico Ramón Baltar, al fin hijo predilecto de Santiago

En el Pleno municipal también se aprobó una declaración institucional para nombrar al doctor Ramón Baltar como hijo predilecto de la ciudad a título póstumo. En el texto aprobado por la corporación destacan su "altura técnica e científica como cirurxián, que atraía pacientes desde distintos lugares do estado", así como "a súa insistencia na defensa do carácter humanitario da Medicina".

La declaración califica a Ramón Baltar como "un exemplo de militancia cívica, comprometido coa loita pola democracia nos momentos máis difíciles e acollendo e protexendo a vítimas da ditadura" y enfatiza también su trabajo como "protector de artistas".