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A Samuel Luiz lo rodearon entre varios y lo mataron a patadas y puñetazos. Por las erosiones que presentaba en la gran totalidad de su cuerpo, los forenses corroboraron la existencia en el mismo de "múltiples golpes". Todo su cuerpo pesentaba signos de violencia, pero "ninguna -herida- en los nudillos". Samuel no pudo defenderse. "No sé si tuvo opción, pero no parece", señaló el médico al fiscal durante la sesión de este martes en la Audiencia Provincial de A Coruña.

Un médico forense del Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga) que intervino en la autopsia al cuerpo de Samuel Luiz ha ratificado que falleció "por golpes múltiples en el contexto de una agresión" y que le provocaron la muerte. "Hablamos de lesiones acumulativas", ha resumido para indicar que las que presentaba la víctima son compatibles con puñetazos y patadas.

La suma de golpes lo dejaron inconsciente en el suelo. Cuando los sanitarios llegaron al lugar del crimen se encontraron a Samuel desplomado en el suelo del paseo marítimo coruñés. Hasta "en tres ocasiones se paró su corazón durante el traslado en ambulancia al hospital", indicó el experto. Se le hizo la reanimación durante noventa minutos. Sin éxito: "Lo pelearon mucho".

Sin poder defenderse

Según relata EuropaPress, por las erosiones que presentaba el cuerpo en distintas partes, ha indicado que corroboran la existencia en el mismo de "múltiples golpes". "Ninguna en los nudillos", aclaró al descartar que hubiera alguna erosión que constate defensa por parte la víctima. 

Al analizar el cuerpo de la víctima, identificaron que presentaba dos marcas en el cuello compatible con la técnica del 'mataleón' que, según las acusaciones y las declaraciones de algunos testigos en jornadas previas, le hizo Alejandro Freire a Samuel Luiz, al que habría agarrado por el cuello por detrás, de acuerdo con los testimonios aportados.

La sesión de este martes mostró la brutalidad con la que se atacó a Samuel Luiz. Todo ello en una declaración con un relato muy detallado sobre las lesiones que presentaba el cuerpo del fallecido y con ninguna o escasas preguntas de las defensas, que en algún caso incidieron en cuestiones como si se podía deducir la intensidad de los golpes. Tampoco plantearon preguntas las acusaciones particular y popular.

Mientras, algunos de los procesados se mantuvieron cabizbajos. Como de costumbre. A su vez, alguno tomaba notas para pasárselas a su letrado.

Intercambio de llamadas

Las sesiones han continuado este martes con periciales y después de que hayan concluido las testificales. Dos agentes prestaron declaración, en línea con testificales anteriores, un policía confirmó un cambio de teléfono por parte de uno de los acusados, Alejandro Míguez tras los hechos mientras que otro ratificó un flujo "importante" de llamadas entre los acusados en la madrugada del 3 de julio de 2021 - día de la paliza mortal - y con posterioridad. Esto después del análisis de teléfonos de los mismos.

"Eran numerosas", las llamadas que recibió Katy Silva en las horas posteriores al asesinato. Ella tan solo recibe, pero no las realiza. Todo ello en una declaración en la que apuntaron también a búsquedas en periódicos "fuera de un horario habitual" el día de los hechos, en torno a las seis de la mañana.

"Tienen zonas en común", ha expuesto al ser cuestionado por la fiscalía sobre la posible ubicación de los procesados esa noche en base a los móviles, aunque, a preguntas de la defensa de Alejandro Míguez admitieron que no puede determinar el radio de acción de las antenas para poder concretar el lugar donde se encuentra la persona.