Corpulento y de gran estatura, el carácter de Koldo era, en contraste, "muy educado", "afable" y "cercano". Sobre todo, siempre tuvo una "predisposición" para hacer cualquier cosa que le mandaran, según dice una fuente que trató con él en su etapa de concejal socialista de Huarte (Pamplona), y que prefiere guardar el anonimato. 

Koldo venía de una familia humilde, donde era el mayor de seis hermanos. Desde pequeño, sintió el peso de la responsabilidad y de abrir camino a los que venían detrás. Por ello, "siempre estuvo buscándose la vida como mejor sabía", como dice esta fuente. Cuando se le presentaron las oportunidades, no las desaprovechó.

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Pero ni esta fuente ni otros que le conocen pensaron que, en esta incansable búsqueda por progresar, el hombre para todo del aparato de Organización del PSOE de Pedro Sánchez terminaría tentado con meter la mano en la caja y dejando en una posición comprometida a sus principales padrinos: Santos Cerdán, José Luis Ábalos y el propio Pedro Sánchez.

"Echado para adelante", según la fuente, fue desde portero de un puticlub en Pamplona hasta escolta de varios políticos del PSN y UPN en Navarra. Luego conoció al actual secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, de quien no se despegaría: fue concejal durante cuatro años y, cuando éste le llamó para devolver a Pedro Sánchez a la Secretaría General del partido, se convirtió en su recadero y en una pieza clave "en la estructura" de la campaña del candidato a las primarias socialistas de 2017.

Su carrera tuvo luces y sombras: fue condenado por una paliza en 1991 y luego estuvo en el punto de mira por otra agresión en 2011 a un joven 'abertzale'. Pero "no es un tipo violento", dice la fuente: también renunció a su sueldo como concejal y estuvo disponible para todo aquel que lo necesitara, desde su familia hasta sus valedores políticos.

A través de tareas en apariencia menores, sobre todo logísticas, Koldo terminó siendo el hombre que estaría presente en todos los asuntos de especial relevancia de la oficina política de José Luis Ábalos en Madrid.

Koldo y Santos Cerdán en un acto del PSOE.

Luego haría lo propio cuando el valenciano se encargó del Ministerio de Fomento, posteriormente llamado Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), desde donde presuntamente dirigió su entramado corrupto.

A la luz de lo ocurrido esta semana, EL ESPAÑOL ha contactado con seis fuentes distintas del pasado de Koldo García, el hombre que quería ser guardia civil, se ganó la vida como portero de puticlub y escolta, y acabó relacionándose con las más altas instancias del Estado. Ninguno llegó nunca a imaginar la trayectoria posterior del 'aizkolari'. "Como lo imaginas, es como es: un personaje de Mortadelo y Filemón", dicen de él.

El clan

La historia de Koldo comienza hace algo más de medio siglo –tiene 54 años– en el barrio de Zabala de Bilbao, hogar de mineros y trabajadores, donde todavía destacan los edificios de viviendas sin pretensiones destinados a operarios ferroviarios. Fue el hijo mayor de Mariano García Leiva, empleado de El Corte Inglés de Bilbao, y de Amaia Izaguirre Unanue.

Más tarde, sus padres tuvieron, en este orden, a Joseba –también investigado en la trama–, Amaia, Mariano, Andoni y Edorta. Los dos últimos son gemelos. En el clan de los García Izaguirre, Koldo era el mayor, y el único, junto a Amaia, que hizo su vida fuera del País Vasco. Ella se fue a vivir a Canarias, y él, a la vecina Navarra, por amor. Volveremos sobre este asunto más adelante.

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Entre los hermanos, Joseba siempre fue en quien Koldo más confió. Ambos estaban muy unidos: compartían la afición por las motos grandes y se encargaban de los asuntos de la familia. Al igual que Koldo, Joseba fue sindicalista de la UGT; en concreto, como secretario sectorial de seguridad del sindicato en el País Vasco.

Sobre los vínculos posteriores, desde el partido recuerdan cómo el lazo sindical fue clave en el ascenso de Koldo. "Se le vendió muy bien; vino recomendado por UGT", recuerdan, "porque estaba muy implicado en la lucha antidesahucios que se llevaba en esos años".

La relación con Joseba

En la trama que investiga ahora la Audiencia Nacional, Koldo se sirvió de Joseba para ejecutar movimientos empresariales que ocultaran las mordidas que presuntamente se llevó al adjudicar los contratos de las mascarillas. Es decir, como el hermano de mayor confianza, Joseba ayudó a Koldo a blanquear los sobornos.

Este hermano también se compró un chalet unifamiliar en diciembre de 2020 en Polop (Alicante), el mismo municipio en el que Koldo se hizo con unos terrenos después de las adjudicaciones. En abril de 2021, Joseba adquirió otra vivienda, un apartamento ubicado en el mismo edificio de Benidorm donde también su hermano Koldo compró una de sus siete propiedades en la provincia tras el negociado.

La relación de los García Izaguirre con Benidorm no es casual: al igual que muchas familias de Bilbao, buscaban el calor de la costa levantina

Para rizar más el rizo, Joseba aparece dado de alta como autónomo en la misma dirección de Benidorm donde la mujer de Koldo, Patricia Úriz, compró otro apartamento en diciembre de 2020: se trata de un piso en el edificio Copacabana, de 110 metros cuadrados, terraza y vistas al mar.

La relación de los García Izaguirre con Benidorm no es casual: al igual que muchas familias trabajadoras de la zona de Bilbao, en los veranos buscaban el calor de la costa levantina. Su padre, Mariano, pasó sus últimos años en la ciudad alicantina, donde era un activo miembro de una peña del Athletic Club de Bilbao, y donde falleció en marzo de 2022. Esos lazos fueron, en parte, los que empujaron a Koldo y a su hermano a ampliar el imperio de la familia en la provincia de Alicante.

La estrecha relación de Koldo y Joseba no termina ahí. Éste último trabajó, desde 2019, en la empresa pública Ineco, dedicada a labores de ingeniería y consultoría, y dependiente del Ministerio que entonces dirigía Ábalos, para quien trabajaba su hermano Koldo. Ese año, Koldo fue nombrado miembro del consejo de Renfe Mercancías, igualmente dependiente de la misma cartera ministerial.

El 1 de marzo de 2022, Joseba fichó por Emfesa, otra sociedad pública. Sus siglas responden al nombre de Enajenación De Materiales Ferroviarios SA, y también está adscrita a Transporte. Pese a que su hermano Koldo ya no tenía una relación con el Ministerio, la Fiscalía Anticorrupción de la Audiencia Nacional señala que la incorporación de Joseba "no puede desvincularse de la posición que su hermano ha tenido en el Ministerio (...)".

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Hermanos en listas

Mientras Koldo se abría paso en la trastienda del PSOE, primero en Navarra, y luego en Madrid, el resto de los hermanos, a excepción de Amaia, tuvieron una existencia corriente en el País Vasco. 

Joseba siempre estuvo vinculado al movimiento sindical vasco. Mariano tiene una empresa vinculada al sector de la administración de fincas en Vizcaya, y es muy aficionado a la montaña. Edorta y Andoni, los gemelos se dedican a sus grandes pasiones: la cocina y el rugby. El último, Andoni, también trabajó como empleado de ambulancias de Vizcaya.

Al igual que Koldo, Joseba y los dos gemelos tienen unas condiciones físicas que los hacían idóneos para jugar al rugby: los tres han competido en las filas del Club de Rugby de Getxo, uno de los más importantes de España. Siempre que podía, Koldo iba al campo a verlos, como atestiguan algunas fotos que tienen juntos.

Koldo junto a su hermano Edorta en el club de rugby de Getxo.

Más allá de los vínculos que tuvo más tarde con Joseba, Koldo siempre dejó a sus hermanos al margen de sus actividades. Pero en las elecciones a los concejos de Navarra de 2015, inscribió a todos ellos, menos a Amaia, en las listas del PSN: Edorta se presentó en Noain, Joseba en Huarte, Mariano en Cizur y Andoni en Irutzun, mientras que Koldo lo hizo en Doneztebe.

En las mismas elecciones de 2019, sólo fueron inscritos en las listas él, en Sangüesa, y Joseba en Esteribar. Los hermanos de Koldo no tenían ninguna relación con Navarra ni con el partido. Es probable que ni siquiera conocieran los concejos para los que se presentaron y ninguno fue como cabeza de lista. Pero colaboraron con Koldo para ayudarle a rellenar las listas y presentar las candidaturas.

Portero y escolta

La relación de Navarra con Koldo tiene su explicación en que su mujer, Patricia Úriz, es de Huarte, el pueblo en el que él terminó siendo concejal. En 1991, cuando Koldo agredió a un vecino del Valle de Aranguren, tenía 33 años y ya vivía en la zona. Antes de entrar en política, trabajaba en tareas de seguridad, como guardia en obras o para quien le contratase, como es el caso del puticlub Rosalex de Pamplona y otras discotecas.

Cuando agredió a aquel vecino junto a un compañero, Koldo era guardia de seguridad en una planta de tratamiento de residuos muy disputada por los 'abertzales' de la zona. Según cuenta una fuente cercana a aquel suceso, bajó de un coche junto a dos compañeros y propinó una brutal paliza a un joven contrario a la obra. Le condenaron a dos años y cuatro meses de prisión en 1995, nunca ingresó en la cárcel. En 1996, le indultó el Gobierno de José María Aznar. Sus dos amigos sí acabaron entre rejas.

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Sobre su paso por el Rosalex, un afamado club de alterne cercano al estadio de El Sadar, las fuentes recuerdan que su historia le precedía. "Todo el mundo sabía lo que se jugaba", comentan, "tanto por él como por Patxi".

¿Recuerdan la foto de Pedro Sánchez viendo a Koldo cortar troncos en una competición? El que aparece en mitad de la faena es Patxi Mindegia, un antiguo colaborador y compañero de faenas 'aizkolari' que regentaba un asador a pocos metros del puticlub. También pasó por prisión.

Koldo y Patxi haciendo una demostración ante la atenta mirada de Pedro Sánchez en 2014.

Dentro del circuito de la seguridad en Navarra y el País Vasco, en los años duros de ETA, a Koldo no le costó encontrar trabajo como escolta para políticos de UPN y el PSN. "Se movía bien en el ambiente de los 'picoletos'. Él siempre quiso ser guardia civil, pero no le dio, y entonces se dedicó a la seguridad privada. Incluso diría que colaboró con la Policía en algunos asuntos", dice una fuente del partido.

De hecho, según refirió en febrero de 2020 su posterior empleador, José Luis Ábalos, Koldo "salvó la vida de dos policías, lo que le mereció una medalla de la Policía Foral de Navarra, un reconocimiento de la Guardia Civil por participar justamente en la lucha por la paz en Euskadi. Tiene reconocimiento de la Ertzaintza, de la Policía de Pamplona…".

Fue a través de trabajar con estos políticos, sobre todo los socialistas, como Koldo acabó entrando en las listas del PSN a las municipales de 2011 y salió elegido concejal de Huarte. "Era un pueblo de los complicados, y él no tuvo problema en presentarse. Es un tío que había sido escolta y le echaba dos narices", dice otra fuente de su entorno, refiriéndose al clima favorable al nacionalismo en algunos pueblos de Navarra.

En los sanfermines de un año antes, que coincidieron con la celebración de la victoria de España en el Mundial, según refiere la misma fuente, Koldo le pegó "un mandoble" a un joven de 16 años vinculado a la izquierda 'abertzale', junto a un policía nacional. La agresión levantó un fuerte rechazo en los sectores radicales, pero en el partido "hicieron la vista gorda" con Koldo y le protegieron. Fue condenado a pagar una multa de 900 euros.

En los sanfermines de un año antes, Koldo le pegó "un mandoble" a un joven de 16 años, también vinculado a la izquierda 'abertzale'

Uno de los principales responsables fue Santos Cerdán, que ya se había fijado en Koldo como un militante comprometido y que se dejaba ver en los actos del partido. Cerdán comenzó a encargarle trabajos y Koldo se convirtió en su recadero. A partir de 2016, algunos de los diputados de UPN para los que Koldo había trabajado en los años anteriores empezaron a encontrárselo en la cafetería del Parlamento de Navarra, ya rodeado de la flor y la nata del socialismo para hacer las gestiones de Cerdán.

En aquella época sacó a relucir un nuevo trabajo, el de chófer, aunque una fuente recuerda que años atrás le habían requisado el carnet de conducir por problemas con la Justicia. Daba igual. 

La conexión con Sánchez

Cuando Pedro Sánchez conoció a Koldo, éste le cayó en gracia. Era 2014 y un entonces anónimo Sánchez comenzó a recorrer España para darse a conocer a la militancia socialista y presentar por primera vez su candidatura a liderar el PSOE. En Navarra, el aspirante a dirigir a los socialistas aterrizó de la mano de Santos Cerdán, quien a su vez le presentó a Koldo.

En la Fiesta de la Rosa de ese año en el recinto ferial de Pamplona, Koldo, quien ya era concejal, hizo una demostración de deporte rural como 'aizkolari' delante de la atenta mirada de Sánchez. También se dio a conocer como activista de la plataforma Stop Desahucios y sindicalista de UGT.

Koldo junto a Pedro Sánchez en Navarra.

La página web de la candidatura de Sánchez le dedicó un amable reportaje que el candidato compartió en su página de Facebook, en el cual se refería a él como "Koldo, un inagotable aizkolari contra las injusticias y un ejemplo para la militancia". El texto también hacía mención a que Koldo fue escolta de Nicolás Redondo, exlíder de los socialistas vascos, pero éste ha desmentido este extremo a este periódico.

Sea como fuere, desde aquel momento, igual que Sánchez quedó prendado de Koldo, Koldo lo quedó de él. A lo mejor no de forma literal, pero sí como quien podría ayudarle a colocarse y a subir el siguiente peldaño. "Él era el menos perezoso de todos y cuando había que hacer algo, lo que fuera, siempre era el primero en dar un paso al frente", explican fuentes de su entorno en la Comunidad Foral.

La "estructura"

El navarro se convirtió así en uno de los principales promotores de Sánchez en la región, tanto desde sus redes sociales y las de su mujer, también vinculada al PSN de Huarte, como desde el terreno, guiado por Santos Cerdán. Así lo muestran otras imágenes que tienen juntos en sus perfiles en redes sociales.

Cuando el Comité Federal del PSOE defenestró a Sánchez en octubre de 2016, éste volvió a las andadas para preparar su regreso, copiando la campaña de José Luis Rodríguez Zapatero, puerta por puerta. Santos Cerdán y Koldo se activaron otra vez para llevar a buen puerto la candidatura de Sánchez en las primarias de 2017 y prepararon el terreno.

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El compromiso de Koldo con un Sánchez entonces aspirante a liderar el PSOE no se limitó a la Comunidad Foral: junto a Santos Cerdán, llevó al candidato a recabar el apoyo de las agrupaciones socialistas de toda España e incluso llegó a custodiar sus avales durmiendo en la sede de campaña, un bajo de la calle Marqués de Riscal de Madrid, la noche antes de que Cerdán las presentase en Ferraz para formalizar la candidatura.

"En Navarra le dejaron el principal cometido a Ramón Alzórriz, quien luego fue premiado como portavoz parlamentario. Ellos [Santos Cerdán y Koldo] ayudaron en lo que pudieron, pero donde se implicaron a fondo fue en la campaña nacional. Koldo se perfiló desde ese momento como ese alguien que sabes que no te va a fallar, y que se encarga de lo que sea", dicen las fuentes cercanas a García Izaguirre.

"Su implicación fue total, no sólo en Navarra, sino en toda España. Cuando Sánchez dice que se volverá a presentar, Santos Cerdán decide que tiene que llevarle a recorrer España agrupación por agrupación. Para ello, necesitan una estructura. Y no iban solos", prosiguen, refiriéndose a que Koldo también les acompañaba con el propósito de resolver cualquier contingencia. "Quizás se limitaba a conducir o a buscar un lugar para una conferencia, pero, de hecho, estaba en el meollo", añaden.

Recaudación de fondos

Como parte de su trabajo en la campaña, Cerdán y Koldo tuvieron también un importante papel en que Sánchez recaudara los 79.630 euros que le sirvieron para regresar a la dirección del partido en 2017.

Koldo era el encargado de cobrar los donativos en efectivo a decenas de pequeños empresarios en Navarra en la campaña de Sánchez

Tanto es así que, por ejemplo, según señalaron fuentes del partido a este periódico, Koldo era el encargado de cobrar los donativos en efectivo a decenas de pequeños empresarios en Navarra que sirvieron para apuntalar la candidatura. Mientras Santos Cerdán pedía estas pequeñas aportaciones puerta a puerta, su recadero Koldo "era quien las iba a cobrar".

"Eran pequeñas cantidades, que en la mayoría de los casos no superaban los 500 euros" y que se inscribían dentro del sistema de donativos para financiar las campañas de candidatos a las primarias de los partidos políticos, explican estas fuentes. Aunque se trataba de una actividad "perfectamente legal", que García Izaguirre tuviera este cometido da buena cuenta de "la confianza que le tenía Santos Cerdán", señalan. 

Junto a la recepción de donativos a la vieja usanza, Cerdán impulsó la asociación sin ánimo de lucro Bancal de Rosas que abrieron unos militantes de Madrid y que sirvió a Sánchez para lanzar una plataforma de 'crowdfunding' que catapultó su candidatura. García Izaguirre, por su lado, ejecutaba las tareas que necesitaba Cerdán, ya fuera el cobro de donativos en mano, encargarse de la seguridad, o de la custodia en persona de las 57.369 firmas que constituyeron los avales.

En el transcurso de la campaña de 2017, Ferraz exigió que todas las donaciones fueran centralizadas en una cuenta bajo el control del partido, lo cual forzó el cierre de la asociación y de la plataforma digital de pagos de Sánchez. Cerdán protestó por ello: "No nos oponemos a su fórmula, pero sí nos resistimos, porque nuestro sistema cumple escrupulosamente la ley", dijo a El Confidencial en marzo de aquel año.

Koldo junto a su mujer, Patricia Úriz, y Santos Cerdán.

A Santos Cerdán, esta labor y su lealtad le abrieron la puerta a la cúpula del PSOE en Madrid, donde se llevó a Koldo. Cerdán pasó a trabajar para el secretario de Organización, Ábalos, y le consiguió a Koldo un trabajo como chófer y guardaespaldas de éste. Un año más tarde, cuando el político valenciano fue nombrado ministro, Koldo le siguió. Ya era su sombra.

La caída

La imputación de Koldo ha provocado que quienes confiaron en él en el pasado, ahora le den la espalda. Desde que Ábalos salió de forma abrupta del Ministerio, Koldo siguió acompañando en algunos viajes al exministro. Pero su vinculación con el departamento, que entonces ya dirigía la ministra Raquel Sánchez, terminó por lo sano. La nueva responsable, de hecho, le destituyó expresamente del consejo de Renfe Mercancías.

A partir de ese momento, ni Santos Cerdán, que ya era secretario de Organización, le rescató: Koldo se quedó sin trabajo, aunque ya se había asegurado una pequeña fortuna por su cuenta. Tras conocerse la imputación, Cerdán volvió a darle la espalda, aún más si cabe. Cerdán se limitó a decir que Koldo había colaborado con el partido en Navarra y dejó claro que "el PSOE siempre actúa contra la corrupción cortando por lo sano".

En un sentido parecido se expresó Sánchez el miércoles, de visita en Rabat: "Más allá del recorrido judicial que tenga esta noticia que acabamos de conocer, cualquier intento de enriquecimiento a través del cobro de comisiones de una tragedia como fue la pandemia, como desgraciadamente hemos visto en otras instancias y en otras autonomías, cuenta con toda mi reprobación".

Las fuentes del partido destacan el papel de Santos Cerdán y de Koldo en la candidatura para aupar a Sánchez a la dirección del PSOE, y en el aparato de Organización del partido. Pero establecen entre ellos una diferencia: "En política se puede meter la pata, pero no la mano. Es imposible que Santos Cerdán meta la mano. El otro, ya no sé…". La "predisposición" llevó a Koldo a que la cúpula del PSOE confiara en él entre bambalinas, pero terminó cayendo al tratar de asegurarse una posición.