18 febrero, 2024 01:52

Admirada por unos, lacerada por otros. Censurada por el Consejo de Informativos de RTVE, refrendada por el presidente del Gobierno. En Inés Hernand se ha encarnado esta semana la polarización que atraviesa España después de su papel como presentadora de los Premios Goya en Valladolid, que hizo arder las redes y puso a un país entero a opinar, a favor y en contra.

Mucho antes de que terminase sobre la alfombra roja y en boca de todos, Hernand no era Hernand, sino Hernández: una chica que estudió Derecho en la Universidad Complutense de Madrid, donde cursó también el Máster en Abogacía.

Aunque esos comienzos puedan contrastar con su faceta mediática actual, lo cierto es que Inés ya debutó ante las cámaras durante esos años: en el canal de YouTube Inés responde comenzó a subir vídeos cortos, apenas pildoritas, en los que diseccionaba los más diversos temas legales con un tono divulgativo y coloquial que le granjeó numerosos seguidores.

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"Bienvenidos un lunes más a mi canal de información jurídica útil y cotidiana", comenzaba diciendo a modo de cortinilla. "Como la primavera, la sangre altera, en este vídeo van cinco consejos legales para parejas. Consejo número uno: hablad claramente de dinero. Si la cosa va en serio os conviene hablar pronto, y con honestidad. Cierto es que no sólo de pan vive el hombre, pero el amor sin pan es como el turrón sin azúcar: acaba amargando".

Los chascarrillos que acompañan la información eran ya una de sus señas de identidad, aunque su aspecto físico y su vestimenta eran mucho más sobrios.

Durante los años de carrera, Inés compaginó su formación con los más diversos trabajos, desde jardinera a camarera en restaurantes de comida rápida. De hecho, durante una entrevista con María Casado para el programa Las tres puertas de RTVE, Hernand dejaba claro que había sido "mucho más tiempo camarera que comunicadora o abogada".

Ruptura con sus padres

Hernand tuvo que ponerse a trabajar pronto para pagarse sus estudios, ya que no tiene relación alguna con sus padres, por voluntad propia, desde hace siete años. Según ha comentado en distintas ocasiones, sus progenitores no la atendieron debidamente durante la infancia, dejándola sola durante las vacaciones y otras fechas señaladas.

Inés Hernand en su primer canal de YouTube en el que daba consejos legales.

Inés Hernand en su primer canal de YouTube en el que daba consejos legales. Captura de pantalla

"No me he pegado un verano con ellos desde los seis años. En Navidades se iban y me dejaban a mí sola desde los 14. Llegar el 8 de enero y decir que he pasado las Navidades en casa de mi amigo Álex, evidentemente, es raro. Sobre todo, te lleva a mentir porque tú quieres tener lo que normativamente existe", declaraba en Sin Filtros, el formato de entrevistas que el creador y periodista David Andújar dirige desde su cuenta de Instagram.

Además, la 'influencer' reconocía no haber ido a la guardería ni a preescolar, y lamentaba que, entre los seis y los ocho años, sus padres la cambiaron hasta en cuatro ocasiones de colegio: "El capitalismo les llevaba a disfrutar del ocio en conjunto. Veían a una niña más o menos solvente y decían 'mira, llega al microondas, pues que se caliente la leche'", lamentaba con mordacidad.

También en este clima de confianza, Hernand relató un episodio que la marcó profundamente, y que sucedió cuando la directora de su instituto les comunicó a sus padres, a su juicio "de forma hostil", que su hija había realizado una felación.

En ese momento ellos reaccionaron castigándola y dejándola a su vez de hablar. La única figura familiar que acompañó a Hernand durante toda su infancia fue su abuela Rosita, de quien ha dicho que sacó su sentido del humor pues era, como la propia Inés se considera a sí misma, "una risotas".

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Sobre las relaciones familiares reflexionaba así Inés con María Casado: "Las relaciones familiares pueden ser tóxicas, y naturalizarlo es positivo y ayuda a construir una sociedad sana. Siempre estoy a favor de mediar, convivir y buscar conciliación en los entornos familiares, pero en ocasiones se imposibilita. Todas las personas que en nuestro imaginario colectivo consideramos capullas pueden ser nuestros hermanos, hermanas, primos, hijas… Si forman parte de tu familia y no las quieres próximas, no pasa nada".

Por todo ello, Hernand ha dejado claro que no quiere tener nada que ver con sus padres, ni ahora ni más adelante, y que teme el momento en el que envejezcan porque tendrán que volver a tratarse, a la vez que espera que el abordaje de esta situación sea lo más liviano posible.

Para superar las heridas que esta situación le ha provocado, acude con regularidad a terapia, algo que considera un privilegio: "Hablamos de un promedio de 100 o 150 euros al mes, no todo el mundo se lo puede permitir".

El salto a la tele

Su tirón en las redes respondiendo a las más diversas consultas legales fue lo que provocó su salto mediático. En 2020 a Inés le ofrecen presentar junto a Darío Eme Hache el programa Gen Playz en la plataforma juvenil Playz de Radio Televisión Española, cuya última emisión tuvo lugar en agosto del pasado año.

Hernand junto al cómico Ignatius Farray (centro).

Hernand junto al cómico Ignatius Farray (centro). Instagram

En el programa, ambos colaboradores hacían un repaso cómico a la actualidad y recibían a invitados de toda índole -desde especialistas en cada tema a celebrities como Samantha Hudson, Yenesi, Alba Moreno o Elizabeth Duval- para debatir sobre asuntos como el acceso temprano a la pornografía, la importancia de acudir al psicólogo o los hábitos saludables.

Siempre, eso sí, dirigiéndose a la Generación Z y hablando su idioma, algo que ha caracterizado en todo momento a la comunicadora y de lo que hace gala en sus trabajos televisivos y en sus redes sociales. Tanto que le ha valido el apodo de "la voz de la Generación Z".

Este periódico se ha puesto en contacto con Darío Eme Hache para preguntarle su opinión profesional sobre la que fuera su compañera, pero al cierre de este reportaje no ha obtenido respuesta. Tampoco la han dado Andrea Compton, Nerea Pérez de las Heras o Ignatius Farray, con quienes la comunicadora también ha formado dupla en otros proyectos, ni el resto de amigos personales -mediáticos y no mediáticos- consultados.

Polémicas

Fue precisamente en Gen Playz donde se produjo una de las polémicas más sonadas en las que Hernand se ha visto envuelta. Tuvo lugar durante un programa dedicado al Orgullo Gay, que se emitía justo antes de las elecciones generales del pasado julio.

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En él la presentadora se manifestaba así desde el micrófono del ente público: "Yo tengo que decir que los buenos siempre ganan y, aunque la violencia sea estructural, no tengo ninguna duda de la victoria de un Gobierno progresista en las próximas Elecciones Generales".

La cadena decidió retirar el programa y definió entonces sus palabras como "una afirmación no contemplada en el guion de la productora, que podría afectar a su compromiso de neutralidad pese a tratarse de un programa de entretenimiento".

Pero Inés no se estrenaba entonces en eso de estar en el ojo del huracán por un pronunciamiento político: también había mostrado anteriormente su apoyo a Yolanda Díaz y su deseo de que la política gallega se convirtiera en presidenta, lo cual le valió severas críticas.

Los Goya

El punto álgido de la polémica en torno a su profesionalidad se ha alcanzado esta semana tras la retransmisión que la comunicadora hizo de la gala de los Premios Goya para RTVE Play. Sus comentarios durante la misma han encendido a la opinión pública, y no sólo.

Junto a Ada Colau (centro).

Junto a Ada Colau (centro). Instagram

El Consejo de Informativos de RTVE emitió un comunicado censurando su trabajo: "Al margen de otras intervenciones más que discutibles durante toda la emisión (eructo, quejas, palabras malsonantes sin contexto…), nos parece que el tono adulador hacia un presidente del Gobierno, sea del signo que sea, no tiene cabida en la radio televisión pública, que es de todos". El presidente del Gobierno, por su parte, publicaba horas más tarde un tuit en apoyo de Hernand.

La actuación de la presentadora ha estado desde entonces en boca de todos al viralizarse un vídeo corto con algunos fragmentos de su trabajo durante la gala. Pero en el vídeo completo se pueden ver otros detalles.

Así, lo primero que llama la atención es que se trata de una retransmisión sin cortes. De este modo, y al contrario del especial emitido por Televisión Española antes del comienzo de la gala (con presentadores como Carlos del Amor o Elena S. Sánchez), Inés Hernand está permanentemente en plano, tanto cuando entrevista a los invitados como durante los tiempos de espera.

Y es durante estos en los que pronuncia frases como "estoy pasando por mucho, vamos a ver cómo vamos oliendo", mientras chequea el olor de su axila o cuando recrimina a su compañero Agustín que no pare a los invitados por ella: "Agustín, tú has venido a cubrir el expediente o qué. Agus, es que tienes que pararlos tú, es que es muy fuerte".

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Hernand muestra un alto nivel de estrés ante una situación de trasiego constante de entrevistados, algo que transmite a su equipo como si estuviera sólo con ellos (salvo que, claro, la retransmisión era pública).

Ante el ritmo al que transcurre su trabajo, reconoce que por momentos "no sabía ni qué decir". También le pregunta en otra ocasión a su peluquero si su peinado sigue bien y bromea con uno de sus compañeros de detrás de las cámaras a cuenta de lo mismo: "Tú no (opines), que eres heterosexual y no te estás enterando de la movida". Y, fijándose en los zapatos de charol de Miguel Ángel Muñoz, advierte de que le "duelen los pies".

Hernand empieza a calificar de "icono" a todos los entrevistados (algo que también le dice a su compañero Galder Varas desde el comienzo mismo del directo) y, hacia el final de la retransmisión, llega el momento cumbre: el séquito del Gobierno aparece e Inés pregunta quiénes están.

"¿Óscar Puente? Bueno, Óscar Puente me da igual, ¿no?", dice refiriéndose al ministro de Transportes. Después aborda a Pedro Sánchez y sucede el momento por todos conocido: le llama icono y le espeta un "te queremos, presi".

Inés Hernand con su exnovio el músico Adrià Salas.

Inés Hernand con su exnovio el músico Adrià Salas. Instagram

Es el final del directo e Inés se muestra eufórica y cansada al mismo tiempo: "Huelo fatal", dice volviendo a aspirar el olor de su axila, "venga, esto ha sido increíble, ¡por el culo!". Esta última expresión es muy común entre la Generación Z para referirse a algo muy positivo e Inés se hace eco de ella mientras muestra su emoción ante la cámara.

"Cabeza de turco"

EL ESPAÑOL ha tratado de ponerse en contacto con Inés Hernand, pero no ha respondido. En otros medios sí se ha pronunciado afirmando sentirse "una cabeza de turco" en Televisión Española, pues, según ella, hay personas que no quieren que visibilice su discurso a favor de la justicia social.

También ha lamentado enterarse del comunicado de RTVE a través de la red social X, pero ha remarcado que ella hace entretenimiento y no información, por lo que no cree que su actuación deba ser juzgada por el Consejo de Informativos. También ha expresado que, a su modo de ver, a otros compañeros hombres no se les da el mismo trato y no se les señala de la misma manera.

Hernand también ha sido acusada de trabajar bajo los efectos de los estupefacientes durante la gala, y quizá por eso en el podcast Saldremos mejores, que presenta junto a su amiga Nerea Pérez de las Heras, se apresuraba a contestar así cuando su compañera le preguntaba por la resaca que le habían dejado los Goya: "Sería una buena resaca si hubiese consumido algún tipo de sustancia en el mercado legal, lástima que mi sustancia fue la dopamina del trabajo. Tengo resaca del cortisol".

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Las de los Goya no son las únicas críticas que la comunicadora enfrenta habitualmente. Una de las últimas le achacaba ser de izquierdas y tener un iPhone, a lo que ha respondido diciendo que, independientemente de su postura política, vive en el capitalismo.

De igual modo, y sobre su posible viaje a Eurovisión teniendo en cuenta su apoyo al régimen palestino y la censura pública que ha hecho de la gestión israelí, ha afirmado que ella no es Netanyahu, y que lo que quiere es trabajar, por lo que seguirá haciéndolo en los proyectos que lleguen hasta sus manos.