¿Qué ocurrirá tras las elecciones del 4-M? Estas son todas las combinaciones posibles
La irrupción de Pablo Iglesias en la carrera por la Comunidad de Madrid y la posible desaparición de Ciudadanos alteran el escenario de los pactos poselectorales.
1. Mayoría absoluta de Isabel Díaz Ayuso
Difícil, pero no imposible. De momento, sólo el sondeo de GAD3 sitúa a Isabel Díaz Ayuso cerca de esa mayoría absoluta de 69 escaños. Los 60-62 asientos que le concede la encuestadora de Narciso Michavila son, sin embargo, todavía insuficientes para que la presidenta pueda gobernar sin depender de los votos de Vox o de Ciudadanos.
La clave puede estar en ese 1,9% de los electores que votará a Ciudadanos y cuyas papeletas (según el sondeo de GAD3) no servirán de nada al quedar muy lejos del 5% mínimo que le permitiría a los naranjas entrar en la Asamblea.
Pero la clave también puede estar en ese 7,9% de votantes de Vox. Un punto menos que los que votaron a Rocío Monasterio en 2019.
2. Mayoría de Ayuso + Vox
Una opción bastante más probable que la anterior. No es, sin embargo, la preferida por Isabel Díaz Ayuso, que preferiría un gobierno en solitario para no depender de las exigencias y los intereses coyunturales de Vox.
¿Entraría en este caso Vox en el gobierno de Madrid?
Está por ver. No es lo mismo un resultado en las urnas de 62 + 7 que uno de 45 + 24. Con el primero, Ayuso estaría en posición de exigir a Vox su apoyo sin demasiadas contraprestaciones (porque la alternativa es que Vox haga presidente a Ángel Gabilondo de la mano de Pablo Iglesias y Mónica García).
En el segundo caso, Vox se sentiría lo suficientemente fuerte como para exigir su entrada en el gobierno. El problema sería entonces para el PP, puesto que esa concesión dinamitaría el mensaje de "con Vox nada" que defiende Pablo Casado a nivel nacional.
3. Mayoría de Ayuso + Ciudadanos
Difícil, aunque sería la opción preferida por muchos madrileños de centro. No está sin embargo nada claro, ni siquiera con Edmundo Bal al frente, que Ciudadanos vaya a apoyar un gobierno de Isabel Díaz Ayuso.
El giro a la izquierda de Ciudadanos es obvio y la moción de censura en Murcia, pero sobre todo las de PSOE y Más Madrid que los naranjas tramitaron en Madrid a pesar de su flagrante irregularidad, hacen sospechar que los naranjas preferirían entregarle en ofrenda al PSOE la Comunidad antes que hacer presidenta a Ayuso.
Los acontecimientos de la última semana reafirman además la percepción de que Ciudadanos y PP han volado todos los puentes y la de que sólo su pacto en Andalucía parece ajeno al peligro de una ruptura súbita. No ayudan las artimañas de Fran Hervías, que los populares han permitido de forma un tanto precipitada.
Ciudadanos tiene, además, un as en la manga en esta combinatoria. Darle su apoyo al PP, pero sólo si Ayuso renuncia a la presidencia en favor de un presidente de consenso. Es de prever que el PP se negaría a ese chantaje, dándole así a Ciudadanos el pretexto para entregarle la Comunidad de Madrid al PSOE.
4. Mayoría de Ayuso + Vox + Ciudadanos (sin posibilidad alternativa de un gobierno de izquierdas)
Esta es la combinatoria que arroja el sondeo de EL ESPAÑOL.
Pero si la opción número 3 parece difícil, esta todavía lo parece más. Porque si el giro a la izquierda de Ciudadanos parece dificultar cualquier acuerdo con el PP, aún más lo dificulta que ese acuerdo incluya a Vox.
Si Ciudadanos rechaza investir a Ayuso con la excusa de la presencia de Vox en el acuerdo (un caso simétrico, en cualquier caso, al del actual gobierno autonómico andaluz) el bloqueo sería inevitable y Madrid se encaminaría a unas segundas elecciones, de acuerdo con el artículo 183.10 del Reglamento de la Asamblea de Madrid.
5. Mayoría de Ángel Gabilondo + Más Madrid
Casi imposible, sobre todo tras la irrupción de Pablo Iglesias en la carrera electoral. En este caso, la presidencia sería sin duda para Gabilondo, con una posible vicepresidencia para Mónica García.
Un detalle interesante. Así como Ayuso preferiría sin duda alguna gobernar en solitario y, en el peor de los casos, con el apoyo externo de Vox y Ciudadanos, Gabilondo optaría en circunstancias similares por integrar a Más Madrid en su gobierno.
El objetivo es obvio: que Más Madrid empiece a ser percibido como el partido dominante a la izquierda del PSOE en detrimento de Podemos. Y eso porque, a medio y largo plazo, Más Madrid será un partido más fácil de absorber para el PSOE que Podemos. La operación reemplazo (de Podemos por Más Madrid y Ciudadanos) es real y sólo es necesario que la combinatoria electoral sea la correcta para que se ponga en marcha.
6. Mayoría de Gabilondo + Podemos
Casi imposible también. Pero es una de las combinatorias más interesantes desde el punto de vista del análisis político. Todo dependería, en este caso, del peso de Podemos en esa combinación.
Si Podemos diera el sorpaso al PSOE, Iglesias exigiría el apoyo de los socialistas a su investidura. El PSOE se vería entonces entre la espada y la pared. O hace presidente a Iglesias, y resucita a Podemos a nivel nacional, o se niega a ello, y rompe el Gobierno. La consecuencia en este caso sería la convocatoria de elecciones generales.
Si Podemos queda por detrás del PSOE, algo que hoy parece la opción más probable, todo dependerá de la estrategia a largo plazo de Pablo Iglesias.
Otra obviedad. El objetivo actual del líder de Podemos no es alcanzar la presidencia de Madrid o sacar de ella al "fascismo", sino reordenar la izquierda nacional y salvar a Podemos de la desaparición. Y de ahí que en la conformación de un hipotético gobierno de izquierdas vayan a pesar más los segundos motivos que el primero.
7. Mayoría de Gabilondo + Podemos + Más Madrid
El principal escollo en este caso sería el hecho de que Iglesias no aceptaría en ningún caso un papel inferior al de Más Madrid, su principal rival en el sector demoscópico del populismo de extrema izquierda. El recuerdo de la negativa de Más Madrid a concurrir a las elecciones de la mano de Iglesias estimularía además su enrocamiento.
Está por ver, además, que el PSOE esté dispuesto a otorgarle un papel protagonista a Podemos cuando su estrategia pasa por la erradicación de los morados.
En cualquier caso, sería incomprensible para el electorado de izquierdas que una combinatoria como esta no resultara en un gobierno de Gabilondo. Las tensiones entre los socios de gobierno, y no sólo entre Podemos y Más Madrid, sino también entre Podemos y PSOE, las pagarían sin duda alguna los madrileños.
8. Mayoría de Gabilondo + Más Madrid + Ciudadanos
A falta de una mayoría absoluta, la opción ideal para el PSOE. Esa en la que Podemos no es necesario para sumar mayoría, pero Más Madrid y Ciudadanos sí.
Esta combinación le permitiría escenificar al PSOE el cambio de escenario político y su estrategia de geometría variable. Es decir, la de un Más Madrid como partido dominante a la izquierda del PSOE, en el primer caso, y la de la posibilidad de pactar tanto a derecha como a izquierda con Ciudadanos y Más Madrid, en el segundo.
Sustituir un partido correoso como Podemos por dos partidos esponjosos (y más fácilmente liquidables si las circunstancias lo requieren en un momento determinado) sería además el statu quo ideal para el PSOE.
9. Mayoría de Gabilondo + Más Madrid + Podemos + Ciudadanos
Probablemente la peor y más inestable combinación posible para los madrileños dada la maraña de intereses contrapuestos de los cuatro partidos que formarían parte de ella.
La única ventaja para el PSOE de un escenario como este, más allá de que le permitiría ocupar la presidencia, es que arrincona al PP con Vox y blanquea su poco presentable en Europa bloque de alianzas, ahora compuesto por el populismo de extrema izquierda y los nacionalistas, con la carta de un partido moderado como Ciudadanos.
10. Mayorías posibles tanto de Ayuso como de Gabilondo con Ciudadanos como juez
Una posibilidad compatible con varias de las opciones anteriores y el escenario ideal, por razones obvias, para Ciudadanos. La duda es a quién apoyaría Ciudadanos en ese caso. Aunque es una duda que sólo se plantean aquellos que creyeron a Ciudadanos cuando defendió que sería muy irresponsable presentar una moción de censura contra un socio estable de gobierno en medio de una pandemia.