El CO2 expulsado por los coches de combustión no es la única contaminación que provoca el tráfico terrestre, las nanopartículas que se generan con el roce del asfalto y los neumáticos ya han llegado hasta el hielo polar. Evitar ese rozamiento no es posible, por eso las principales soluciones que se presentan, también con proyectos hechos en España, buscan que el propio vehículo limpie el aire de los residuos que genera mientras está circulando.
Los microplásticos que desprenden las ruedas de los coches al circular provocan en la salud de las personas enfermedades cardiovasculares y respiratorias graves como el cáncer al respirarlas y llegan al torrente sanguíneo. Sin embargo, actualmente está más cerca de solucionarse la contaminación por el humo de la gasolina, que este otro peligro para el medioambiente.
Para equilibrar la balanza, un equipo de diseñadores coreanos ha presentado un nuevo tipo de neumático, pensado para recoger aquellas nanopartículas que va soltando al rodar por el asfalto. Pureback Nexen Tire es un concepto que persigue formar parte de flotas de coches más limpios y respetuosos con el planeta, sin dejar atrás un diseño deportivo y lujoso.
Rodar y limpiar
No es una idea completamente nueva, pero toda aportación puede ser positiva para solucionar el problema. Hace un par de años se presentaba una rueda de bicicleta que filtra las nanopartículas y los gases contaminantes del tráfico. También en 2021 un diseñador español propuso un túnel de filtros (enlace en el primer párrafo) para que el coche limpiara la contaminación del tráfico desde el techo.
En este caso, los diseñadores Cheolhee Lee, Seongjong Kang y Junhoo Lee plantean un neumático deportivo. Pureback Nexen Tire es un concepto que pretende reinventar la idea de los neumáticos y que se podría resumir como "Lo que ensucias, lo limpias". Un concepto muy similar al que se ha visto anteriormente, pero que entraña un mecanismo preciso para recoger y desechar los residuos.
Mientras circula, el giro de la rueda genera la absorción del aire a través de las llantas que cuentan con pequeños agujeros por los que dejar pasar el aire contaminado. Una vez dentro los microplásticos son impulsados al interior de una cápsula central, un tubo de acero.
En el interior de la rueda está diseñado para que las nanopartículas que entran por las llantas se acumulen con mayor fuerza en el interior. Ya que ese pequeño compartimento que sirve de estanque donde cargar el material contaminante debe almacenarlo de forma comprimida, así cabe más material y al retirarlo no sale volando de nuevo por el aire.
Para facilitar la completa eliminación de los residuos, es necesario que la cápsula central pueda vaciarse con rapidez cuando se llene. Los diseñadores sugieren que los residuos se puedan depositar en las estaciones de carga de hidrógeno al conectar el coche al sistema, lo que facilita que el usuario no se ensucie las manos, pero no muestran cómo sería ese mecanismo.
Diseño deportivo
Además del funcionamiento, sus tres creadores han cuidado el aspecto exterior de la rueda. Tanto las llantas como la banda de rodadura cuentan con iluminación LED para indicar que está limpiando el aire. Cuando el neumático está recogiendo microplásticos se ilumina en color azul, transformándose en un rojo intenso cuando la cápsula recogida se ha llenado.
No explican si las luces se pueden ver proyectadas en los bordes del coche o en el asfalto para que mientras conduce los pasajeros puedan verlas desde dentro. De lo contrario, será al bajar del coche en la siguiente estación de carga, cuando el conductor ve las luces y decide cambiar las cápsulas, pero lo más cómodo sería una notificación del propio coche para saberlo mientras se conduce, igual que se reciben avisos sobre el estado de gasolina o la fuerza de las ruedas.
Cada vez se conocen más propuestas, proyectos que se enfocan en reducir la expulsión de las nanopartículas de los neumáticos en los que se presentan un diseño llamativo. Sin embargo, falta que estos prototipos den el salto a la fabricación a gran escala y al mercado automovilístico.
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