Así es el Águila Divina, el nuevo dron espía chino diseñado para detectar a los bombarderos y cazas furtivos de EEUU

China está recogiendo los frutos aeronáuticos de las últimas dos décadas de inversión en esta rama militar en la que tradicionalmente dependía de Rusia. Uno de los segmentos en los que más está avanzando es el de los drones y, especialmente, con las grandes plataformas de alta persistencia, autonomía y capacidades, terrenos en los que España todavía depende de terceros.

Este impulso reciente se traduce en una mayor capacidad táctica en el mar de China Meridional, que también baña las costas de Taiwán y Filipinas, aliados importantes de Estados Unidos en la región. Este delicado equilibrio de fuerzas tiene ahora un nuevo integrante denominado WZ-9 Águila Divina, que ha sido captado por los satélites, según recoge The War Zone.

La aeronave fue fotografiada en la base aérea del noreste de Foluo, muy cerca de otras ubicaciones militares navales como Yulin, desde donde operan algunos submarinos nucleares de misiles balísticos. El WZ-9 se encuadra dentro de la categoría HALE (High Altitude, Long Endurance), que le permite mantenerse a gran altitud durante mucho tiempo al mismo tiempo que emplea sus sensores a bordo. Estos son capaces de detectar y monitorizar objetivos con gran precisión, tanto en la superficie como los que vuelan a una altitud menor.

Águila Divina

Como suele ser habitual, el desarrollo de la aeronave se ha llevado con el máximo de los secretismos por parte de Pekín. Lo único que se conoce es que los ingenieros comenzaron a trabajar en la plataforma a principios de la década de 2010, mientras que su primer vuelo se fecha en 2015.

Desde entonces, las apariciones públicas del vehículo han sido muy contadas en el cielo sobre algunas regiones de China. Uno de los vídeos más recientes se publicó el pasado diciembre, cuando la particular silueta del dron llamó la atención de la población y acabó apareciendo en redes sociales.

Según el ex instructor del Ejército Popular de Liberación Song Zhongping, el conjunto de radares del dron desafía seriamente la capacidad furtiva con la que cuentan las aeronaves estadounidenses y en la que se apoyan los mandos del Pentágono para realizar distintos tipos de misiones sin ser detectados.

"Su diseño de fuselaje doble incorpora cúpulas en las secciones frontales, que permiten la integración de una gama de sistemas de radar avanzados", continúa Song, tal y como recoge SCMP. Estos sistemas están especialmente diseñados para "rastrear aviones furtivos, buques de guerra y submarinos a grandes distancias".

Las aeronaves a las que se refiere el experto son las clásicas furtivas que tiene operativas en la actualidad Estados Unidos, como los cazas F-35 y F-22 y el futuro bombardero B-21, que se encuentra en sus últimas fases de desarrollo.

"A diferencia de los drones convencionales, el WZ-9 integra funciones de recopilación de inteligencia y lucha contra el sigilo" de las otras aeronaves. Uno de los pilares de la plataforma es precisamente el sistema de alerta temprana diseñado para identificar amenazas aéreas a baja cota de vuelo.

Diseño por ordenador del WZ-9

Entre estas amenazas, más allá de los mencionados aviones, también se incluyen otras como misiles de crucero y diferentes modelos de drones. La altitud en este tipo de misiones de alerta temprana es un factor clave para poder obtener una información de calidad y en un paraguas amplio.

Si bien la información es muy escasa, los analistas apuntan a que cada una de las partes del doble fuselaje del dron WZ-9 cuenta con un radar lateral. Estos sensores pueden tener capacidades de desginador de objetivos móviles terrestres y aéreos, gracias a los cuales el resto de unidades desplegadas pueden identificarlos de forma conveniente y neutralizarlos.

Defence Blog

Feroz, el dron de Ucrania para operaciones dentro de Rusia: ataques con 75 kg de explosivos a 2.000 kilómetros de distancia

Esta capacidad, explica Song, desempeña un papel clave en la estrategia de China como parte de su sistema antiacceso y denegación de área, lo que se denomina en la jerga militar como A2/AD. "Destinada a contrarrestar la actividad militar de Estados Unidos y sus aliados", en un momento en el que Washington D.C. mira más hacia el Pacífico que a la guerra de Ucrania.

Otra de las características del dron es su capacidad de crear una "densa red de sistemas interconectados para coordinarse con otros vehículos aéreos no tripulados como el WZ-7". En los escenarios de guerra moderna, donde el espectro radioeléctrico se ve interferido e interrumpido por potentes sistemas de guerra electrónica, contar con repetidores aéreos independientes es un gran activo.

Imagen satelital del WZ-9

La envergadura de este nuevo dron se sitúa en los 45 metros, debido a los dos fuselajes, con una longitud total de 15 metros. Datos clave como el alcance máximo o la autonomía en vuelo permanecen en secreto, aunque el papel de aeronave de alerta temprana requiere largos periodos de sostenimiento.

"Estas capacidades de comunicación amplían aún más el valor estratégico del WZ-7, integrándose perfectamente con los sistemas tripulados y no tripulados" de la Fuerza Aérea de China. Con ello se "garantiza la redundancia operativa y la flexibilidad, haciendo más difícil para los adversarios interrumpir toda la red". El WZ-7, en servicio desde 2018, tiene un planteamiento operativo similar al del WZ-9, aunque se presupone algo más limitado en cuanto a capacidad de recolección de datos.

Avión de alerta temprana

A escasos 4 días de finalizar 2024, aparecieron en redes sociales unas imágenes de un avión de alerta temprana en China. Estas aeronaves tienen un aspecto muy característico, con una especie de estructura en forma de platillo integrado en la parte superior del fuselaje, que las diferencian rápidamente de cualquier otro avión militar.

Dentro de esa estructura se encuentra el radar con el que detectar e identificar amenazas aéreas a distintos niveles. A bordo del avión, un equipo de técnicos monitorizan todos los sistemas y se encargan de enviar la información al resto de componentes de la misión.

Avión de alerta temprana similar al KJ-3000

En cuanto a la aeronave china, la Fuerza Aérea ha empleado como base un avión de transporte Y-20B, un modelo actualizado en 2020 con nuevos motores más eficientes, potentes y de fabricación nacional. En su versión estándar, la aeronave es uno de los desarrollos más avanzados en la rama de la logística militar de China y lleva operativo desde el 2023.

El propósito de la Fuerza Aérea de China es integrar el WZ-9 con el Y-20B de alerta temprana, denominado militarmente KJ-3000, y el resto de efectivos de similares características. En cuanto a especificaciones, la versión de transporte cuenta con una capacidad de carga de 66 toneladas, un peso máximo al despegue de 220 toneladas y una autonomía de unos 7.000 km.

Sin embargo, el impacto aerodinámico del radar situado en la parte superior del fuselaje hace que las capacidades sean menores. Al igual que ocurre con el WZ-9, se desconoce si China cuenta con unidades en servicio de este modelo de aeronave.