Lanzacohetes de madera: así engaña Ucrania a Rusia para que gaste sus misiles en señuelos
Los drones rusos son incapaces de distinguir los sistemas HIMARS falsos de los auténticos y eso implica un gasto extra de la ya escasa munición.
1 septiembre, 2022 16:55Hay un dicho muy famoso en España que se está viendo reflejado en la guerra entre Ucrania y Rusia y es el siguiente: "en la guerra todo vale". Hemos podido presenciar todo tipo de sucesos rocambolescos en torno a este conflicto; drones falsos, armas firmadas con rotulador por compradores ajenos, blindajes de madera... Y ahora, Ucrania ha ideado un nuevo tipo de arma contra Rusia: un lanzacohetes falso.
[El rifle Kalashnikov ruso que se ha convertido en el trofeo de los soldados de la milicia ucraniana]
Puede parecer una broma, pero no lo es. El Washington Post ha recogido cómo Ucrania se está dedicando a crear un sistema lanzamisiles completamente hecho de madera, una réplica barata de su sistema HIMARS o Sistema de Cohetes de Artillería de Alta Movilidad (High Mobility Artillery Rocket System) para despistar a los rusos en sus ataques.
Y es que entre el armamento de Rusia se encuentran drones que hacen objetivo a los lanzamisiles, transmitiendo coordenadas a unidades marítimas rusas para que estos lancen misiles de crucero a dichos lanzamisiles. Dado que los drones no pueden verificar si estos son verdaderos o falsos, los ucranianos están desplegando estos HIMARS falsos para gastar recursos de Rusia.
Lanzamisiles de madera
Pero, ¿por qué los HIMARS? Estos dispositivos son algunos de los más importantes en la guerra de artillería ucraniana. Los sistemas de armamento móvil tienen la capacidad de ser transportables, reubicarse fácilmente y debido a su efectividad, Rusia habría dado orden de atacar estos aparatos de forma prioritaria. Ucrania sabe esto, y por eso está desplegando los HIMARS falsos.
Según el Washington Post, el primer HIMARS señuelo se utilizó para provocar que Rusia disparara al menos 10 misiles de crucero sin éxito. Lógicamente, el gobierno y ejército ucranianos, ante la situación, ordenaron crear más señuelos, confundiendo enormemente a las unidades rusas.
Ucrania, además, juega a su favor la baza del apoyo internacional. En los últimos meses, tanto Estados Unidos como la OTAN han enviado ingentes cantidades de armamento y equipamiento militar a Ucrania, incluyendo vehículos, radares, armamento variado, misiles y un largo etcétera. Rusia, por su parte, habría sufrido al menos 70.000 bajas según el Pentágono de los Estados Unidos, así como desperfectos serios en sus unidades militares pesadas.
Por el momento, no se sabe si Rusia se ha percatado de esto o no. Existe la posibilidad de que Rusia considere que esos HIMARS están operados por soldados ucranianos, por lo que asumen que disparar esos misiles puede ser beneficioso tanto si son HIMARS auténticos como si no. Por supuesto, estas noticias no pasarán desapercibidas para el ejército de Putin, que probablemente cambie su estrategia de ahora en adelante.