La activista climática Greta Thunberg, impulsora de los Fridays for future y una de las voces más críticas y disonantes con las instituciones a causa del cambio climático y la falta de acción de los gobiernos, ha declarado a un medio alemán que desconectar las plantas nucleares en el país sería "un grave error".
"Si ya están funcionando, creo que sería un error cerrarlas y recurrir al carbón", ha declarado en una entrevista con ARD (conglomerado mediático público en Alemania). "Es una mala idea depender del carbón mientras lo otro siga existiendo", añadió Thunberg.
Sus declaraciones hacen referencia a la decisión del gobierno alemán de mantener dos de las tres centrales nucleares en reserva hasta "mediados de abril de 2023", pese a que debían ser retiradas a finales de este año. La crisis energética y la dependencia del gas a causa de la guerra en Ucrania han llevado a Alemania a tomar una decisión "de necesidad", tal y como explicó el pasado septiembre el ministro de Economía, Robert Habeck.
La decisión "ligada a muchas emociones", se produce para evitar una crisis de electricidad que, pese a las amenazas del duro invierno que se avecina en materia energética, Habeck considera "extremadamente improbable".
Preguntada por si se deberían cerrar las centrales nucleares una vez finalice la actual fase de crisis, Thunberg respondió que "depende de lo que ocurra". Además, considera que existen otras alternativas al carbón. "Creo que hay otras formas de avanzar. Con las renovables".
Más consumo de gas
A la crisis energética ya vigente se le suma un nuevo factor: un invierno más frío, más seco y menos ventoso de lo normal. Así lo ha advertido el Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas a Medio Plazo (ECMWF).
Un escenario así tendría consecuencias desastrosas para la economía alemana. Pese a que el país ya ha llenado hasta el 90% sus almacenes de gas, los institutos IFO de Múnich, DIW de Berlín, IfW de Kiel, IWH de Halle y RWI de Essen ya advirtieron en septiembre de quesi el invierno fuera frío, la economía del país se iba a hundir un 7,9%.
No en vano, Alemania podría llegar a nacionalizar la principal compañía de gas del país, Uniper. Con sede en Düsseldorf, la entidad necesita más ayuda del estado después de haber aprovechado un paquete de apoyo que podría tener un valor de hasta 20.000 millones de euros.
El aumento en los precios del gas natural y los cortes en el suministro de Rusia han provocado pérdidas diarias millonarias, lo que llevó al gobierno a intervenir con un paquete de rescate en julio que incluía una participación del 30%.