Yoima Valdés, actriz: “Retrasamos ser madres por un engranaje socio-económico perjudicial”
Cada vez son más las mujeres de más de 45 años que deciden ser madres. Hablamos con Yoima Valdés, actriz y madre tardía y con la doctora Gloria Gálvez.
30 junio, 2023 15:50Mujeres nacionales como Sofía Mazagatos, Anne Igartiburi o Ana Rosa Quintana, e internacionales como Naomi Campbell, Halle Berry o Hilary Swank han decidido ser madres más allá de los 45 años.
[Naomi Campbell reabre el debate de la maternidad a partir de los 50 años]
La popularidad y una alta exposición mediática, hacen que estos casos salten a las portadas de revistas y periódicos, pero lo cierto es que es una tendencia social cada vez más habitual. Sólo hay que ver la proliferación de centros de reproducción asistida en nuestro país en los últimos años.
Por lo tanto, cada vez causa menos sorpresa socialmente, pero esta decisión tiene sus pros y sus contras desde el punto de vista médico y psicológico.
Los expertos aseguran que los ciclos de reproducción asistida en mujeres de más de 45 años han registrado un crecimiento exponencial de más del 40% en los últimos 5 años.
En magasIN hablamos con la doctora Gloria Gálvez, ginecóloga y Obstetricia Gine4 HM Hospitales. "No es normal tener hijos a partir de 45 años, es que actualmente con las técnicas de reproducción asistida es posible. Y es cierto que la edad media de las madres gestantes ha aumentado, pero por encima de 43 años es excepcional, pero como es posible pues hay casos. Desde mi punto de vista, con los cambios que se han producido en la sociedad, es lógico que ocurra. Desde el punto de vista médico, mi recomendación tiene que ser que cuanto más joven se tengan los hijos mejor, porque hay menos riesgo de complicaciones", asegura la especialista.
¿Cuáles son los riesgos para la madre?
Puede haber más complicaciones durante el embarazo, como son los hipertensivos del embarazo, más riesgo de diabetes gestacional y también más riesgo de que el parto acabe en cesárea.
¿Y los riesgos para el bebé?
Depende de si el embarazo es espontáneo de la paciente, que hay más riesgo de alteraciones cromosómicas o si es un embarazo conseguido por donación de óvulos, que es lo habitual, que entonces los riesgos genéticos del bebé son los de la donante.
¿Tiene alguna ventaja ser madre a partir de los 45?
Respeto mucho a las mujeres que no han podido ser madres por problemas de pareja o porque son madres solas. Si tenemos científicamente la posibilidad de hacerlo, ¿por qué no? Pero si una mujer tiene ya otros hijos y me viene a pedir opinión a partir de los 45 años, mi recomendación es que no lo tenga por tener más riesgos, pero depende mucho de la situación personal, que es lo primero que hay que tener en cuenta.
En magasIN también hemos querido conocer la experiencia de Yoima Valdés, actriz y madre en edad avanzada. “Estoy preparando un guión para un largometraje sobre el tema, y me sorprende porque ahora se está hablando mucho sobre ello, que ya era hora. En mi caso, en el largo contaré las consecuencias del retraso de la maternidad y la dificultad a ciertas edades para lograr tener un hijo”, asegura la actriz.
Fuiste madre en edad adulta, ¿qué edad tenías?
Tenía 42 años. Fue por cesárea porque me subió la tensión muchísimo y venía de nalgas. Pero el embarazo fue muy normal como el de cualquier mujer. El problema está en la crianza posterior.
¿Te faltaba energía?
La naturaleza es muy sabia y todo el proceso y nuestro organismo está creado para ser madres jóvenes, diseñado para que paramos pronto. Estamos retrasando la maternidad por un engranaje socio-económico, que lo cuento en mi película, que nos está perjudicando muchísimo. Si fuera un tema de hombres ya estaría resuelto.
La mujer retrasa la maternidad y se encuentra con dificultades, primero para quedarse embarazada y luego en caso de que se quede embarazada, para tener un segundo hijo, que en la mayor parte de las ocasiones es totalmente imposible, porque ya la edad no te llega.
Y cuando por fin te puedes quedar embarazada, ¿qué ocurre?
Y cuando es posible ese embarazo tienes que gastar mucho dinero y meterte en el cuerpo todo tipo de química para poder conseguirlo. Muchas parejas que no lo consiguen, se quedan en bancarrota y encima se separan, y esto es un verdadero drama.
Además, de la necesidad de cuidados de la madre y la poca conciliación laboral que hay.
Lo cierto es que antes se decía que quienes eran madres tardías llegaban con una estabilidad económica y emocional, y no como una niña de 20 años, pero hoy llegamos igual.
¿Cuál es la ventaja?
La única ventaja que yo diría que tiene es la madurez como persona, ya que has vivido más y puedes encarar la maternidad con otra sabiduría y quizás más paciencia.
Pero el resto son inconvenientes porque tienes que criar y estás más cansada, porque no tienes energía, porque tus amigos ya no tienen hijos de la misma edad que el tuyo, y esto es algo importante y tienes que crear nuevas amistades.
Lo justo sería parir joven y que el sistema funcionase para tener ayudas y conciliación laboral y que cada uno pueda tener la familia que quiera tener.
No podemos tener la familia que queremos
Nosotras no podemos tener la familia que queremos, sino la que podemos pagar. Esto es muy injusto, el que tiene dinero y economía tiene 3 y 4 hijos, pero el resto uno. La mujer paga estos platos, no es el hombre
¿Los hijos unen a las parejas?
Depende de la pareja, pero es verdad que cuando se llega a cierta edad sin hijos, el hombre no lo necesita normalmente. Y la mujer ya está a contrarreloj, y en vez de una necesidad se convierte en un sentido de vida. Y de ahí vienen depresiones y otras consecuencias si no lo consiguen, y tendrán que cargar con ese peso toda su vida. Tengo muchas amigas que no lo han conseguido. Esto se convierte en un conflicto con el que hay que lidiar para el resto de tu vida.
En tu caso, ¿tuviste que recurrir a reproducción asistida?
Sí, muy caro y con varios tratamientos. Sobre todo el precio más caro está en lo emocional y lo psicológico, porque es una tortura, un infierno pasar por una fecundación in vitro, uno tras otro los tratamientos. El primero es al que más ilusión le pones pero cuando te das cuenta de la realidad y de que es una lotería, la cosa cambia.
Cada vez que mueves el bombo de la lotería son 6.000 €. Pones muchas expectativas y no sale la bola ganadora. No sale, te jodiste y tienes que volver a empezar y es agotador.