¿Qué le pasa a la reina Letizia? Su problema médico explicado por un experto

La discreción de Casa Real sobre el estado de salud de sus miembros es un hecho. Aún así, ciertas dolencias y enfermedades de la familia salen de forma puntual a la luz. Es el caso del neuroma de Morton, una afección ubicada en la planta del pie que a la reina Letizia le diagnosticaron el pasado mes de junio.

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No se trata del único problema localizado de la monarca. Desde hace años Letizia sufre una metatarsalgia crónica. Ambos padecimientos provocan un dolor intenso que se puede agravar con el uso de tacones. Un hecho sorprendente teniendo en cuenta que se trata del calzado predilecto de la reina.

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Este 12 de octubre, Día de la Hispanidad, los Reyes presidieron el tradicional desfile militar y la ceremonia del Día de la Hispanidad. Letizia apostó por un par de stilettos beige de la casa Prada, que no se quitó en ningún momento, generando sorpresa y dudas.

¿Qué es el neuroma de Morton?

Un experto traumatólogo despeja todas las dudas sobre esta dolencia, sus consecuencias y los posibles tratamientos que se pueden seguir para paliar sus síntomas:

“No es más que una dilatación o ensanchamiento de un nervio del pie”, explica el doctor Hector José Figueiredo, traumatólogo especialista de pie en HM Torrelodones. “Se forma por la confluencia de dos nervios terminales, el plantar medial y el plantar lateral. Estos nervios confluyen en el tercer espacio interdigital del pie [entre el tercer y el cuarto dedo], y cuando hay pinzamiento y produce dicha dilatación”.

El principal síntoma es “un dolor un poco inexplicable, como de quemazón” entre el tercer y el cuarto dedo (en la minoría de los casos se produce entre el segundo y el tercero), que hace que quien lo padece note molestias incluso en la planta del pie y tenga que sentarse para aliviarlo.

El doctor Figueiredo comenta que entre las principales causas para que aparezca el neuroma de Morton se encuentran “los calzados muy estrechos, que producen una fuerte presión en las cabezas de los metatarsianos”, haciendo que el nervio sufra y acabe apareciendo ese extraño y molesto dolor.

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El traumatólogo expone que se desarrolla un síntoma muy común entre las personas que padecen el neuroma de Morton y es que, “tras deambular durante un periodo de tiempo, necesitan quitarse los zapatos para aliviar el dolor y disminuir la presión que les produce el calzado en la zona afectada”.

Para tratar esta dolencia, lo más habitual son las infiltraciones en la zona adolecida, las plantillas de descarga metatarsal, que alivian los síntomas más inmediatos, o el tratamiento con corticoides, que tienen un potente efecto antiinflamatorio, y que también pueden hacer que las molestias remitan.

Sin embargo, con el paso del tiempo este problema puede agravarse, y en los casos más extremos la única solución es la “recesión quirúrgica del neuroma”, es decir, operarse. Tal y como explica el doctor Figueiredo, la cirugía que trata el neuroma de Morton consiste en “abrir un espacio en la cabeza del ligamento intermetatarsal y exponiendo la estructura nerviosa de la planta del pie”.

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Una vez descubierto el nervio, se sigue todo el trayecto hasta los dedos, se corta y se deseca. El experto advierte de que, en muchas ocasiones, este procedimiento puede ocasionar que el paciente pierda un poco de sensibilidad en la cara interna de los dedos del pie más afectados, el tercero y el cuarto.