Este próximo 5 de mayo de 2024, como cada primer domingo de mayo, se celebra el Día de la Madre en toda España. Aunque ya todos demostramos ese amor hacia nuestras madres a lo largo de todo el año, este día, por lo general, se busca hacer especial hincapié para homenajear a la mujer que nos dio la vida.
Hay veces que lo tenemos muy claro, porque nos lo ha dejado caer o simplemente la conocemos muy bien; sin embargo, otras muchas se vuelve un proceso tedioso en el que pensamos qué no le hemos regalado ya o qué le puede hacer especial ilusión.
Y a pesar de que haya detalles que son excelentes, en especial aquellos por los que ellas han expresado sus sentimientos, si hay algo que marca la diferencia es regalar nuestro tiempo. Porque no hay nada que le haga más ilusión a una madre que pasar el rato con sus hijos o pareja, sobre todo, si pensamos en planes como talleres creativos.
Taller de pintura y vino
Los talleres creativos se han vuelto muy populares en los últimos meses, de hecho, cada vez más personas valoran el pasar tiempo con sus seres queridos y por ello, buscan planes más elaborados y diferentes, con el fin de no caer en la monotonía y también, conocer nuevos ámbitos en los que desarrollar su creatividad.
Conocido como Art&Wine, consiste en una experiencia única en la cual podemos sumergirnos en la creación de cuadro con pintura flúor a la vez que degustamos vino u otras bebidas de nuestra preferencia.
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A lo largo de dos horas y media, tenemos la oportunidad de liberar nuestra creatividad y dar vida a una obra de arte desde cero. Incluso si no somos las personas más creativas del mundo o el dibujo nunca se nos ha dado mal, no hay nadie que vaya a juzgarnos.
El taller de pintura, además de ser divertido y poder establecer un plan de risas con nuestra madre, nos ayuda a relajarnos. Diferentes estudios han demostrado cómo este hobby puede reducir el estrés, renovar la energía e incluso, soltar miedos y conectarnos con nuestra intuición.
Todas las comunidades españolas cuentan con estudios dedicados a ello, en los que un profesor nos acompaña en el proceso, contamos con todas las herramientas necesarias (pinceles y colores), opciones de vino y agua para disfrutar y un ambiente único y muy especial.
Sin embargo, lo cierto es que este taller también se puede disfrutar desde casa, con un presupuesto muy bajito. Lo único que necesitamos son tantos lienzos como seamos (dos o más), pinturas y pinceles que podemos conseguir en cualquier bazar y un vino de nuestra preferencia (incluso puede ser el más barato, que también están deliciosos).
Taller de cerámica
Este mismo taller también se desarrolla desde otra disciplina, la cerámica. A pesar de que sea un hobby que implica un poco más de práctica, también podemos encontrar en todas las ciudades de España estudios que se dedican a ello, algunos de ellos también con vino incluido.
En este taller, nos sumergimos en un proceso creativo donde podemos dar forma a la arcilla según nuestra imaginación, creando piezas únicas y personalizadas. Desde tazas y platos hasta esculturas. Al igual que el cuadro, una vez terminado, nos lo podemos llevar a casa.
La cerámica, al igual que la pintura, también una terapia relajante. Sumergir tus manos en la arcilla, moldearla y darle forma es una experiencia que nos permite desconectar del estrés diario.
Trabajar con las manos en la cerámica tiene un efecto calmante en el sistema nervioso. El acto de amasar, modelar y dar forma a la arcilla libera tensiones acumuladas y reduce el estrés. Además, la concentración requerida nos ayuda a encontrar la paz interior.
No solo podemos regalar una experiencia única y diferente, sino que lo que construyamos también puede ser el detalle que, después, nuestra madre puede conservar por mucho tiempo.
Así como en la pintura, es un taller que nos podemos llevar a casa. Muchos bazares y supermercados venden cerámica a muy bajo precio, además, podemos colorearla y decorarla como nosotros vemos. Para que dure, lo único que tenemos que hacer es, una vez terminado, meterlo al horno.