La pasión por el vino, especialmente en nuestro país, se refleja en las cifras: España contaba con 941.086 hectáreas de viñedo en 2021 (aprox. el 13% del total mundial). Es el primer viñedo del mundo, según la Federación Española del Vino.
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De ahí que cada una de las noticias relacionadas se convierta en un fenómeno. Nuevas botellas, sistemas de conversación, actividades... destacamos tres que encandilarán a las amantes del "néctar de los dioses".
Las vinotecas de AEG
El vino se puede alterar con mucha facilidad si no se almacena en perfectas condiciones. La estabilidad de la temperatura es un principio fundamental para su almacenamiento, para correcta la conservación del buqué y para garantizar una maduración estable.
Es precisamente para controlarlo que AEG, la gran marca alemana de electrodomésticos de gama premium, presenta dos nuevos y excepcionales modelos de vinotecas de envejecimiento: Single-Zone Pro y Dual-Zone Pro.
Están diseñadas para garantizar el adecuado almacenamiento (permiten que puedas almacenar el 95% del tipo de botellas que encontrarás en el mercado, incluso las del tipo bordelés lo que las distingue especialmente) y conservación del vino en condiciones que imitan las de las mejores bodegas naturales.
Las nuevas vinotecas Single-Zone Pro mantienen una temperatura estable, ajustable entre 5 y 20°C, rango de temperaturas adecuado para servir el vino, o entre 12 y 14°C, la temperatura ideal para guardarlos hasta que queramos degustarlos.
Incorporan un Sistema de Reciclaje Automático de la humedad que garantiza el mantenimiento de sus niveles adecuados (50% o más). Protegen el vino de la luz directa exterior que causa su oxidación y que puede desembocar en un cambio de color de cada caldo. Cuentan con paneles interiores oscuros y luces LED atenuadas, lo que en su conjunto impide el envejecimiento prematuro del vino.
Incluyen también ventiladores internos y externos que garantizan un flujo de aire reticulado lento en todo el interior, evitando la aparición del moho que genera malos olores y supone el riesgo de deteriorar el corcho. Los modelos de mayor tamaño también incorporan un filtro de carbón activo que absorbe cualquier olor que penetre en el interior de la vinoteca.
ART&WINE MADRID TOUR
Recorrer Madrid a través de su arte y su gastronomía es ahora posible gracias a una experiencia única creada de forma conjunta por el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza y el Mercado de San Miguel.
Bajo el nombre de ART&WINE MADRID TOUR, se han creado dos rutas que arrancan visitando el Museo Nacional Thyssen Bornemisza y finalizan con una cata de vino en el Mercado de San Miguel, ya que el vino será el hilo conductor de estos recorridos.
Las opciones son dos: una experiencia que consiste en un recorrido con audioguía por el museo, parándose en una selección de obras de arte “La cultura del vino”, que muestra la evolución del vino en representaciones artísticas a lo largo de la historia y cómo lo veían los pintoresque lo plasman en sus obras.
Después, las personas que adquieran esta experiencia podrán visitar el Mercado de San Miguel en un plazo máximo de 7 días naturales desde la fecha de visita al museo. Presentando su entrada en El 19 de San Miguel, uno de los puestos del mercado, podrán hacer una audio cata de 3 vinos que estarán vinculados con la ruta previamente realizada.
A través de un QR los visitantes podrán acceder a información sobre los vinos que se les han servido, su historia, notas de cata, así como una recomendación sobre maridaje para los mismos, que les podrá ayudar a seleccionar qué productos del mercado serán los más idóneos para acompañar su cata. Esta experiencia podrá reservarse a través de la web del museo Thyssen.
La segunda experiencia es personalizada. También se podrá adquirir a través de Museo Nacional Thyssen-Bornemisza, pero en este caso será necesario contactar con su departamento de Promoción & Marketing quienes gestionan las experiencias a través del correo electrónico turismo@museothyssen.org, para organizarlas de forma individual, ya que la propuesta requiere una planificación mayor.
Se trata de una ruta que arranca también en el museo, pero en este caso con la oportunidad única de recorrerlo a puerta cerrada, de 9 a 10 de la mañana, antes de que abra sus puertas al público, de la mano de una guía especializada, que hará una visita completa a la colección.
A continuación, se propone un paseo hasta el Mercado de San Miguel, donde tendrá su cita la gastronomía. Será recibido por un sumiller que hará para ellos una cata de 5 vinos de 5 Denominaciones de Origen españolas diferentes, que permitirán hacer un recorrido por nuestro territorio a través de sus características. Será un modo de conocer nuestro país a través de nuestros vinos. Esta cata tendrá lugar en un espacio delimitado para los asistentes en la parte central del Mercado de San Miguel y, en este caso, será una cata maridada con platos de varios de los puestos del mercado.
Se pueden realizar desde el pasado 30 de enero.
Los vinos de La Finca Emperatriz
Tras más de quince meses de crianza y otros tantos en el botellero, la cosecha 2018 de Finca la Emperatriz Blanco y Tinto está lista para salir al mercado. Una tercera añada de las dos elaboraciones que conforman la gama alta de la bodega.
Alta y buena parte de su excepcionalidad se debe a las parcelas de las que proceden: viñedos en vaso de entre 50 y 65 años de edad, plantados en suelos de canto rodado y a 570 metros de altitud.
Los Hermanos Hernáiz, Eduardo y Víctor, al frente de Finca la Emperatriz -su proyecto más reconocido-, presentaban estos dos Reservas de Rioja Alta como un nuevo concepto vinícola, pero con la vista puesta en el pasado y en lo que un día fueron los aclamados vinos finos riojanos: con capacidad de guarda gracias a una acentuada acidez que con el paso del tiempo se convierte en frescura y un paso elegante.
Finca la Emperatriz Tinto es una combinación de tempranillo, con un 20% de garnacha y un pequeño porcentaje de viura, seleccionados de las viñas más viejas de la finca. Tres variedades que realizan conjuntamente y en depósito de hormigón la fermentación y maceración en frío. Posteriormente el vino pasa a barricas donde hace la maloláctica y una crianza de 18 meses, el 60% en roble nuevo francés y el 40% del vino en barricas americanas de segundo uso.
En cuanto a Finca la Emperatriz Blanco, se trata de un monovarietal de viura con intensidad aromática, gran frescura inicial (en pro de ese desarrollo en botella) y un paso largo y persistente. En lo que respecta a su elaboración, la mitad del vino fermenta en depósito de hormigón y la otra parte en barricas de roble francés de 225 litros. Tiene una crianza de 9 meses en esa madera francesa y 8 más en depósito hormigón.
La 2018 fue una añada mucho más fresca que su antecesora, alcanzando un equilibrio perfecto entre acidez, fruta y madurez, y dando como resultado vinos frescos, elegantes y de final muy largo -tremendamente representativos de la región dónde su ubica el viñedo-.