Hace unos años vimos como la tendencia de maquillaje del contouring conquistaba España y a muchos de sus maquilladores expertos. Una tendencia a la que se unieron multitud de celebrities, famosas e influencers en redes sociales y que también conquistó gran parte de los tutoriales de TikTok.
Pero ahora un nuevo truco y tendencia de maquillaje parece haberse apoderado del mundo del maquillaje en las redes sociales. Una técnica también basada en esculpir el rostro y conseguir un efecto lifting inmediato pero mucho más natural y con un único producto de un solo tono: el corrector.
En concreto, en los últimos meses un nuevo truco viral ha conquistado la red social de TikTok con multitud de tutoriales. Un sencillo truco de maquillaje conocido como el truco de los cuatro triángulos y con el que conseguirás rejuvenecer el rostro en menos de un minuto. Te contamos cómo.
El truco de los cuatro triángulos para rejuvenecer el rostro
No es la primera vez que la forma de los triángulos es utilizada como truco para aportar más luz y elevar el rostro en determinadas zonas. Aún así el resto de trucos de maquillaje nada tienen que envidiar del nuevo truco que se ha viralizado en redes sociales y que es mucho más sutil y efectivo que los que hemos visto hasta el momento.
Un truco que no ha dejado de viralizarse en la red social de TikTok y que incluso ha conquistado a los expertos y expertas de maquillaje. Para aplicarlo necesitarás prestar especial atención a su producto clave: el corrector.
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Y es que, además de asegurarte de elegir el tono adecuado de corrector para tu piel, es esencial que elijas uno que sea cremoso y ligero, de esta manera evitarás que sobrecargue la piel y conseguirás un efecto mucho más natural.
Pero ¿en qué consiste realmente este truco de maquillaje viral? Para aplicarlo simplemente tendrás que trazar los triángulos con toda la precisión que puedas y en las zonas indicadas: dos en la parte inferior del ojo, uno justo en la parte final e inferior de la nariz y otro partiendo de la comisura de la boca en trazo ascendente.
¿Cuál es la función de cada triángulo de maquillaje?
Este tipo de maquillaje se basa en cuatro zonas del rostro estratégicas en las que con estos simples triángulos es posible conseguir una sensación de rostro estirado y elevado mucho más rejuvenecedora. Pero cada uno de estos triángulos con corrector cuenta con una función determinada, te la explicamos:
- Triángulos bajo los ojos: Dos de estos cuatro triángulos se trazan justo bajo los ojos, uno parte del lagrimal y toma una parte del lateral de la nariz y el segundo triángulo se localiza justo al ras del final de la línea de las pestañas inferiores pero sin llegar a tocarlas. Dos puntos claves para realzar la mirada, iluminar la zona y cubrir la ojera.
- Triángulo bajo la aleta de la nariz: Si con los dos anteriores triángulos conseguíamos abrir y levantar la mirada, con el siguiente harás lo mismo pero con la zona de los pómulos y las mejillas. Un triángulo que tendrás que dibujar en dirección ascendente y desde el final de la nariz justo en la zona de las fosas nasales (desde la esquina) y hacia la mitad de la mejilla. ¿El resultado? Una sensación de pómulos más altos y un rostro con efecto lifting.
- Triángulo junto a la comisura de la boca: El cuarto triángulo parte desde la comisura de la boca y casi en paralelo al triángulo de la zona de la nariz, también en trazo ascendente. Con este triángulo, además de reforzar el efecto lifting de la mejilla, también consigue un efecto mucho más armónico y estirado en el rostro, rejuveneciéndolo en conjunto.
¿Cómo elegir el color de corrector adecuado?
Encontrar el tono preciso de la base de maquillaje puede resultar complicado, al igual que sucede con acertar con el color adecuado del corrector, tanto si quieres ocultar imperfecciones como iluminar o equilibrar el tono de la piel.
Por ejemplo, para camuflar ojeras es fundamental elegir un tono de corrector más claro que el de la base. Este tono más claro no solo ilumina la mirada, logrando un efecto descansado y radiante, sino que también corrige la ojera. Si las ojeras son azules o violáceas, se recomienda un tono ligeramente rosado; en cambio, si son marrones, optar por un tono ligeramente amarillo.
Para corregir granitos, la clave está en aplicar un corrector del mismo tono que la piel, sin ir más claro ni más oscuro. Lo más recomendable es que el corrector sea ligeramente apagado, evitando tonos muy luminosos que tiendan al beige.
Pero ¿qué hacer si el objetivo es cubrir manchas? En este caso, se aconseja utilizar primero un corrector anaranjado y luego aplicar uno del tono de la piel o ligeramente más claro una vez que la primera capa haya secado.
Por el contrario, para elevar el rostro se recurre a un corrector amarillo, ideal también para cubrir tonalidades moradas como ojeras moradas, puntos negros, capilares o varices o a un corrector ligeramente más claro que tu tono de piel. Dos tonos muy apreciados por profesionales del maquillaje, ya que no solo proporcionan una cobertura natural y profesional, sino que también ilumina el rostro, elevándolo como en el tutorial de TikTok y aportando un suave brillo a las pieles rosadas.