La dieta mediterránea con la que contamos en España es sin duda una de las más completas, equilibradas y saludables que existen. Una dieta saludable con múltiples beneficios, pero a la que es posible añadir algunos superalimentos idóneos para apoyar los efectos saludables de esa alimentación.
La linaza es uno de los cultivos más antiguos, ya que se cultiva desde el comienzo de la civilización. El nombre latino de la linaza es Linum usitatissimum, que significa "muy útil". En las últimas dos décadas, ha sido objeto de un mayor interés en el campo de la nutrición y de las enfermedadespor sus posibles beneficios para la salud asociados a sus componentes biológicamente activos.
Su creciente popularidad se debe a los beneficios para la salud en la reducción de las enfermedades cardiovasculares, la disminución del riesgo de cáncer, particularmente de la glándula mamaria y de la próstata, la actividad antiinflamatoria, el efecto laxante y el alivio de los síntomas de la menopausia y la osteoporosis.
Ya hemos hablado de las propiedades del chocolate negro, del aguacate, pero también de las propiedades beneficiosas de algunas semillas como las de ajwain y, esta vez, se trata de conocer las propiedades de las semillas de lino o linaza.
¿Qué son las semillas de linaza?
Del consumo de las semillas de lino es posible obtener grandes beneficios. Un tipo de semillas que se pueden encontrar en el pan, en harinas o en aceite. Dependiendo de cuáles sean los gustos de cada uno se pueden introducir en la alimentación de una forma u otra para disfrutar de sus beneficios para la salud.
Beneficios entre los que destacan su alto contenido en Omega 3, un ácido graso esencial que nuestro cuerpo no puede producir por sí mismo y que cuenta con potentes propiedades antiinflamatorias, lo que las convierte en uno de esos antiinflamatorios naturales que no deberían faltar en nuestra dieta.
También cuenta con ácidos grasos Omega 6, son ricas en antioxidantes, cuentan con vitaminas del grupo B, E y minerales como el magnesio, el potasio o el hierro.
¿Cómo ayudan a adelgazar?
Las semillas de linaza también cuentan con una gran cantidad de fibra, esto hace que nuestra sensación de saciedad sea mayor y por lo tanto, ayuda a controlar el apetito evitando el clásico picoteo entre horas.
Esto es precisamente lo que las convierte en unas excelentes aliadas para aquellas personas que necesiten bajar unos kilos para conseguir llegar a un peso equilibrado y saludable.
Esta capacidad saciante puede ayudarnos a consumir menos calorías, gracias a esa menor sensación de apetito. Además favorecen la digestión, evitan el estreñimiento ayudándonos a eliminar toxinas, evita la retención de líquidos y regula los niveles de colesterol, así como los niveles de azúcar en sangre.
Todo ello unido a que estas semillas también son una gran fuente de proteínas vegetales, así que su consumo ayudará también a recuperar la salud de nuestra piel, cabello y uñas, haciendo que estos se vean mucho más bonitos y, en el caso del cabello y las uñas, más resistentes a la rotura.
¿Cómo se toman las semillas de lino?
Las semillas de lino podrás tomarlas enteras, espolvoreadas en yogures o ensaladas… Sin embargo, en cualquiera de estas versiones no estarás aprovechando al máximo sus beneficios.
La razón de ello es que las semillas cuentan con una cubierta externa especialmente complicada de romper y en muchas ocasiones salen igual que entran. Además, debido a su alto contenido en fibra, si consumimos semillas enteras en exceso lo más posible es que suframos malestar estomacal o hinchazón.
Por todo ello, la mejor opción para consumirlas y disfrutar de sus beneficios es tomarlas molidas. En forma de harina podrás añadirla igualmente a yogures, salsas, boles con cereales de desayuno, ensaladas y a todo tipo de recetas saludables.
Por otro lado, al igual que ocurre con la mayoría de alimentos ricos en fibra, te aconsejamos que consumas el lino siempre acompañado de agua abundante para que haga su efecto.
Siempre consultar a un especialista
Como siempre, no se trata de alimentos con propiedades milagrosas, aunque sí que su consumo es ideal para apoyar los efectos de una alimentación equilibrada y también se trata de un gran aliado a la hora de combatir el exceso de peso.
Pero aún a pesar de todas estas excelentes propiedades y de la ayuda que estas semillas pueden aportar para adelgazar y perder peso, es imprescindible que antes de consumir las semillas de lino con este propósito, antes se consulte a un médico especialista o a un nutricionista sobre todo si tienes diabetes o estás embarazada.
En ambos casos es imprescindible consultar al médico para evitar descompensaciones. Por otro lado, cabe recordar que su consumo debería estar siempre ligado a una dieta equilibrada y saludable, combinada con ejercicio físico y hábitos saludables.