En 2025 los fabricantes tendrán que reducir las emisiones hasta los 93,6 gramos de CO2.

En 2025 los fabricantes tendrán que reducir las emisiones hasta los 93,6 gramos de CO2.

Motor

Los fabricantes de coches no cumplirán con las emisiones que obliga Bruselas en 2025 y piden suavizar la norma

Mientras que la asociación de constructores quiere un retraso de dos años, grupos como Stellantis solicitan que las reglas no se cambien.

17 septiembre, 2024 02:23

Tensión entre los fabricantes de coches en Europa a la hora de cumplir con la reducción de emisiones de CO2. Europa ha demostrado, de nuevo, que está profundamente dividida ante un objetivo tan claro como la disminución de la contaminación.

En este caso la división se ha producido entre el principal organismo de representación de los fabricantes (ACEA) y el Grupo Stellantis, fabricante de marcas como Peugeot, Citroën, Fiat y Jeep. Mientras que ACEA ha pedido un retraso en el cumplimiento de la reducción de emisiones, Stellantis ha señalado que no quiere esta disminución de los objetivos.

Vayamos por partes para entender lo que está ocurriendo. Y en este sentido, cabe señalar que, si bien en España el automóvil está unido… en Europa no ocurre lo mismo. En nuestro país, los fabricantes de coches están dentro de una organización que se llama Anfac, Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles. Y en Europa, este organismo mencionado que se llama ACEA.

Sin embargo, mientras que en España sí pertenecen todos los fabricantes a Anfac, en Europa no todos los constructores están dentro de ACEA. De hecho, uno de los grandes grupos que se salió de ACEA fue el Grupo Stellantis. Asimismo, también Volvo anunció su salida de ACEA. Y esto se debe a que tanto Stellantis como Volvo no están de acuerdo con la postura de ACEA en la reducción de emisiones.

Reducción de emisiones en 2025

Pues bien, ahora este desencuentro vuelve a tomar formar por la reducción de emisiones de 2025, que ahora tratamos de explicar.

Hasta este año 2024, los fabricantes tienen que cumplir con una media de emisiones de 115,1 gramos de CO2 según la normativa WLTP.

Es decir, la media de todos sus coches (turismos) que se hayan vendido en Europa tiene que tener como máximo 115,1 gramos de CO2 por kilómetro recorrido. Sin embargo, a partir del año que viene (2025) esta normativa se endurece todavía más. En concreto, los fabricantes tienen que bajar hasta los 93,6 gramos de CO2. De lo contrario, tendrán multas.

Esta cifra de emisiones, además, se mantiene entre los años 2025 y 2029. Y será a partir de 2030 cuando será muy difícil vender coches de combustión, ya que los fabricantes tienen que bajar hasta los 49,5 gramos de CO2. Y estas cifras solo se pueden conseguir con una venta mayoritaria de vehículos con enchufe. Ni siquiera los híbridos admiten ya niveles tan bajos de CO2. Por no hablar que ya en 2035 las emisiones tienen que ser de cero gramos.

Y aquí es donde vienen los problemas. Como todo se vuelve más complicado, hay fabricantes que han pedido a Europa que se rebajen estos objetivos de CO2. Y lo han hecho por medio del órgano representativo que les une, que es ACEA.

Dos millones de coches menos

En una petición dirigida a Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, los fabricantes han señalado que les obligan a cumplir con la normativa de los 93,6 gramos desde 2025 tendrán que detener la producción de unos dos millones de vehículos.

Esto para entender lo que supone, significa que los fabricantes dejarán de producir un 15% del total de sus coches, pasando de unas ventas actuales de casi 13 millones a cerca de 11 millones.

De lo contrario, de seguir vendiendo estos coches que aumentan los niveles de contaminación los fabricantes se exponen a multas que podrían alcanzar los 13.000 millones de euros. Y esto es algo a lo que no quieren llegar especialmente en estos últimos meses donde los resultados de las compañías no son tan buenos.

Por todo ello, los fabricantes, a través de ACEA, han pedido que se retrase de 2025 a 2027 la normativa que obliga a bajar a los 93,6 gramos de CO2. Una petición que se ha realizado por medio de Luca de Meo, presidente de ACEA y del Grupo Renault.

La razón de esta petición se debe a que, para cumplir con los 93,6 gramos, habría que vender entre el 20% y el 22% de vehículos 100% eléctricos en Europa. Y actualmente la cuota está en 2024 en alrededor del 12%. Por tanto, de seguir siendo igual de dura la norma, los fabricantes tendrán que aumentar un 8% la cuota de eléctricos en los próximos meses, algo difícil de lograr.

Stellantis, en contra

No obstante, esta petición de ACEA de retrasar la norma ha sido rápidamente contestada por el CEO de Stellantis, Carlos Tavares. En concreto, este directivo se ha mostrado en contra,

"Sería surrealista cambiar las reglas ahora", declaró a la Agence France Presse el director general Carlos Tavares. "Todo el mundo conoce las reglas desde hace mucho tiempo y ha tenido tiempo para prepararse, así que ahora es el momento de hacer una carrera", señalaba Tavares en esta entrevista.

Quién tiene más y menos emisiones

En cuanto a la carrera por las emisiones, según datos recogidos por la Agencia Europea del Medioambiente, hay fabricantes que han hecho mejor los deberes frente a otros.

En este sentido, y siempre según datos de 2022 de este organismo, el consorcio que mejores cifras de emisiones tiene registradas es el que agrupa a marcas como Tesla, Honda y Jaguar-Land Rover. En concreto, estos tres fabricantes tienen una media de emisiones en 2022 fue de 49,9 gramos.

La segunda posición es para Kia, con 99,8 gramos, seguido de Hyundai con 101,3 gramos y Stellantis con 103,1 gramos.

Siguiendo con otros fabricantes como Renault-Nissan-Mitsubishi, lograrían los 104,7 gramos, para después llegar a BMW con 104,9 gramos.

Hasta aquí, estos serían los principales fabricantes que tendrían más fácil llegar a los 93,6 gramos, ya que como máximo tendrían que bajar entre 6 y algo más de 10 gramos.

Sin embargo, existe otro grupo de constructores que no lo tiene tan fácil. Hablamos de Mercedes-Benz, con 111,9 gramos de media; Ford, con 113,2 gramos; Mazda, Subaru, Suzuki y Toyota, con 114,2 gramos y Volkswagen con 118,5 gramos de CO2. Estos últimos, por tanto, son los que tendrían que vender más coches eléctricos o reducir las ventas de los coches con más emisiones para cumplir con la normativa.