Además, Aguilar también ha hablado sobre la intención de Andalucía de rebajar su factura de medicamentos dispensados en las boticas. Sobre esto, el presidente de los farmacéuticos ha incidido en que "la farmacia comunitaria es el porcentaje más pequeño dentro de todo el gasto sanitario".

¿Qué balance hace de estos últimos años al frente del Consejo General de Farmacéuticos y qué proyectos tiene para este nuevo mandato?

Nos ha tocado vivir una pandemia y una postpandemia. En estos tres próximos años tenemos que ser capaces de poder consolidar legislativamente las iniciativas que creo que son importantes para el país y para la farmacia española.

En estos casi nueve años al frente del Consejo General de Farmacéuticos he conocido nueve ministros. Esto hace complicado hacer cosas de futuro. Y la sanidad y la farmacia son el futuro y el presente.

[Sanidad da los primeros pasos para que las farmacias puedan dispensar cannabis medicinal]

Tenemos que pensar qué es lo que queremos hacer, qué queremos ser de mayores, cómo queremos consolidar esa farmacia asistencial y social y digital que marcamos en su momento y cuál es la línea que además han marcado los propios ciudadanos. La sociedad pide una mayor integración y trabajo conjunto con el resto de los profesionales sanitarios.

Y esa oportunidad la tenemos con la Ley de Garantías, que esperamos que el Gobierno sea capaz de sacar adelante este año para marcar esa hoja de progresión de los próximos años.

¿Qué tal con la ministra Mónica García? ¿Qué esperan de ella al frente de Sanidad?

Ya nos hemos reunido con ella, con el Secretario de Estado y con la comisionada de Salud Mental. La relación es buena y han visto el potencial que tiene el farmacéutico y las oficinas de farmacia, con 22.220 establecimientos en todo el país.

Han visto cómo hemos estado trabajando en muchos proyectos, que ahora la propia ministra ha traído en su cartera, como la salud mental o los determinantes de la salud. Hay relación de colaboración absoluta de la profesión para llevar a cabo los objetivos de país.

Los desabastecimientos de medicamentos son una preocupación para la profesión farmacéutica.

Nosotros, a través de la herramienta Cismed, analizamos los medicamentos que están desabastecidos y, además, la problemática que supone no tener cantidades suficientes de medicamentos para atender las necesidades de los ciudadanos.

Hay una tendencia a la baja de los desabastecimientos, pero no significa que haya menos desde el punto de vista de la falta de moléculas. No es tan importante el número de moléculas desabastecidas -que también-, sino el número de pacientes que están afectados por esas faltas.

Dedicamos más de un día a la semana a buscar los fármacos que necesitan los pacientes.

A nosotros nos preocupan estas faltas, por eso pusimos en marcha Cismed. Alrededor de 10.000 farmacias emiten cada noche un informe de los medicamentos con problemas de suministro. Además, pusimos en funcionamiento FarmaHelp, que permite encontrar las pocas unidades que pueda haber en otras farmacias y así derivar al paciente. Es un sistema propuesto por los propios colegiados.

No solucionamos el problema del desabastecimiento, pero sí podemos paliar de alguna manera esa dificultad del ciudadano de encontrar un medicamento. Dedicamos más de un día a la semana a buscar los fármacos que necesitan los pacientes.

En Andalucía están buscando fórmulas para rebajar el gasto farmacéutico. ¿Qué opina de esta búsqueda para bajar su factura en medicamentos?

Las autoridades sanitarias siempre tienen la obligación de estar pendientes de sus cuentas y de intentar hacer el mejor reparto posible de las situaciones económicas de su comunidad. Ahora, la farmacia comunitaria es el porcentaje más pequeño dentro de todo el gasto sanitario.

Yo creo que evidentemente hay mucho por hacer dentro del Sistema Nacional de Salud para que sea eficiente y su eficiencia nos lleve a ahorros económicos. Entre otras cosas, podríamos conseguir ahorros muy importantes si se contase más con los farmacéuticos dentro de las estructuras sanitarias y se le diese un mayor papel desde el punto de vista de la adherencia o desde el punto de vista del seguimiento.

Jesús Aguilar en la sede del Consejo General de Farmacéuticos.

Presentábamos hace unos años un estudio en el que se decía que si los farmacéuticos llevasen a cabo el seguimiento farmacoterapéutico de los ciudadanos que lo necesitan, el sistema ahorraría 2.200 millones de euros. Eso es mucho más que la nómina de todos los farmacéuticos españoles. Hay sistemas mucho más rentables que otras medidas que ponen las comunidades autónomas.

Además, no podemos tener distintos tipos de prestaciones dependiendo del código postal. No puede ser que haya 17 modelos sanitarios. Bajo nuestro punto de vista, la sanidad está muy bien cuando hablamos de instalaciones, pero hay que consolidar que todos los ciudadanos tengan las mismas prestaciones dentro del territorio nacional.

¿Teme que esta iniciativa se tome en más comunidades e, incluso, a nivel nacional?

Cada comunidad tiene sus particularidades y sus diferencias. Yo creo que es mucho pensar que lo que vale para una comunidad vale para todos. En cada sitio las circunstancias son diferentes.

El Ministerio de Sanidad ha dado los primeros pasos para que las farmacias puedan dispensar cannabis medicinal. ¿Qué opina de esta medida?

Nos llamaron a para formar parte primero en la Comisión de Reconstrucción y segundo para la Subcomisión del Cannabis. Ahí planteamos qué sistemas creíamos que se podían llevar a cabo en España. Otra cosa es que cuando se mezclan los temas políticos con los sanitarios, pues hay un revuelo.

Nosotros lo que defendemos es que ante la preparación o la posibilidad de que pueda haber una fórmula magistral se tiene que llevar a cabo en las farmacias hospitalarias y comunitarias. Los farmacéuticos están perfectamente capacitados y preparados para preparar estas fórmulas magistrales, que siempre indicarían los médicos bajo los controles correspondientes de la propia administración.

Otro de los pasos que está dando el Ministerio de Sanidad es el Plan Antitabaco. ¿Qué papel puede tener aquí la farmacia?

Yo creo que es fundamental. El papel de la farmacia está por explotar desde el punto de vista de la administración. Más de dos millones de personas entran todos los días a las farmacias. En los centros de salud son 730.000 personas. Multiplicamos casi por tres esa accesibilidad y ese contacto con los ciudadanos. Por eso, tenemos un papel en educación de salud, en prevención de la enfermedad y todos los temas que tanto nos preocupan.

Los farmacéuticos hace ya 20 años que podíamos haber dejado de cortar el precinto.

¿El Ministerio de Sanidad se ha puesto en contacto con el Consejo para este plan antitabaco?

Estamos en contacto permanente para todos los planes. Vamos a ir viendo que cuáles son los pasos que se van dando. Ahora el Ministerio ha dado tiempo a las comunidades autónomas para hacer sus aportaciones a este plan. A partir de ahí, veremos la manera de poder trabajar con el Ministerio de Sanidad.

¿Dejarán pronto los farmacéuticos de recortar el cupón precinto de los medicamentos?

Los farmacéuticos hace ya 20 años que podíamos haber dejado de cortar el precinto porque en España tenemos un sistema que se llama receta electrónica que permite que todos los medicamentos que se dispensan queden perfectamente marcados y la administración tiene toda la información.

El cupón precinto hoy se corta por una necesidad que tiene la propia Administración a la hora de querer tener un soporte físico. Pero no haría falta. Sería suficiente que dieran por válida la información que se recoge a través del sistema de receta electrónica.