La puesta en marcha del PERTE del coche eléctrico y conectado ha tenido, en pocas horas, su primera gran consecuencia. Tras meses de especulaciones, el grupo Volkswagen ha confirmado que pretende poner en marcha la tercera de sus seis fábricas de baterías en España. Una instalación que será el eje para que el país se convierta en el centro de su estrategia para el desarrollo de vehículos eléctricos urbanos.
La compañía ha aprovechado la celebración de su New Auto Strategy Day, en el que la compañía ha expuesto su hoja de ruta hasta 2030, para anunciar que está dispuesta a cooperar con el Gobierno español para "transformar el país en un hub líder de movilidad eléctrica y, por ello, solicitarán participar en el PERTE del vehículo eléctrico y conectado".
Según ha confirmado Seat en un comunicado posterior, como parte del proyecto Future Fast Forward (F3), el Grupo Volkswagen "construiría una fábrica de baterías en España. Después de Suecia y Alemania, España podría convertirse en la tercera ubicación de una de las seis gigafábricas de Europa. Además, la ya planificada familia Small BEV podría producirse en España. La familia Small BEV desempeñará un papel clave en la democratización de la movilidad eléctrica en Europa, ya que contribuirá a que la movilidad eléctrica neutra para el clima sea accesible para más clientes".
El anuncio llega en un momento clave para la estrategia de la compañía. Se espera que, como tarde, el próximo mes de noviembre el comité estratégico del grupo alemán anuncie la asignación de los modelos del segmento urbano de la nueva generación eléctrica a sus diferentes plantas. Contar con una planta de baterías en España supondrá un apoyo clave para que sus plantas de Martorell, en Cataluña, y Landaben, en Navarra, cuenten con las máximas posibilidades para hacerse con esta valiosa carga de trabajo.
En este sentido, Herbert Diess, CEO del grupo Volkswagen ha explicado que "España podría convertirse en un pilar estratégico de nuestra estrategia eléctrica. Estamos dispuestos a establecer toda la cadena de valor de la movilidad eléctrica en el país, incluida la producción de vehículos eléctricos, así como sus componentes, y una nueva fábrica de baterías del grupo".
Apoyo del sector público
Una decisión a la que le queda un fleco ya que, como indica el mandatario alemán dependerá "del contexto general y del apoyo por parte del sector público". Si se cumple esa condición "a partir de 2025 la familia Small BEV podría fabricarse en España.” Una petición que parece estar muy alineada con los planes del Gobierno de contar con una participación minoritaria en la fábrica de baterías.
Por su parte, Thomas Schmall, responsable de Tecnología del Comité Ejecutivo del Grupo Volkswagen, CEO de Volkswagen Group Components y presidente del Consejo de Administración de SEAT ha señalado que desde la compañía están "impulsando aún más nuestra estrategia de baterías y tenemos la intención de construir la gigafábrica número tres en España. Esta localización permitiría un suministro altamente seguro para la producción de vehículos eléctricos prevista en España. Al igual que en nuestras dos primeras fábricas previstas en Salzgitter y Skellefteå, planteamos construir la potencial gigafábrica junto con un socio estratégico. En su fase final, a finales de la década, la planta podría tener una capacidad anual de 40 gigavatios hora.”
Por último, Wayne Griffiths, CEO de Seat y Cupra también ha explicado que solicitarán participar en el PERTE anunciado por el Gobierno español. "Hacer realidad el potencial de Future: Fast Forward exige tanto apoyo del sector público como inversión. Nuestro objetivo es cooperar con el Gobierno para transformar el país en un hub europeo de movilidad eléctrica y la planta de producción de SEAT de Martorell, en una fábrica de vehículos 100% eléctricos. La Península Ibérica es clave para conseguir una movilidad climáticamente neutra en Europa en 2050. Estamos preparados para transformar la industria automovilística española y contribuir de forma significativa a la descarbonización del suroeste de Europa".
Ubicación y socio industrial
Una vez puesta sobre la mesa la voluntad del gigante alemán de apostar por España, llegará el turno de despejar dos de las últimas incógnitas. La primera de ellas es en qué territorio se ubicará la tan deseada factoría de baterías. Una carrera que podrán disputar un puñado de comunidades autónomas debido a la importancia del componente logístico.
El segundo gran anuncio que queda es quién será el socio tecnológico de esta instalación. Otra competición en la que los contactos ya están muy avanzados y se espera que el grupo Volkswagen siga una estrategia similar a la de sus plantas de Suecia y Alemania.
Así las cosas, el anuncio de la puesta en marcha del PERTE del coche eléctrico y conectado ha conseguido una rápida respuesta desde el lado de la empresa privada. El grupo Volkswagen con Seat a la cabeza ha recogido el guante lanzado por el Gobierno y ha dado un paso al frente más a la hora de mostrar su compromiso por su histórica posición en España. Un anuncio que, si se cierran los últimos detalles pendientes durante las próximas semanas, ofrece una gran oportunidad a España de mantener su actual posición privilegiada en un sector tan importante para la industria como el de la automoción.
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