El Ministerio de Defensa quiera aprovechar todo el potencial que ofrece la tecnología 5G para el desarrollo de la actividad de las Fuerzas Armadas. Un ejemplo de ello es el contrato que acaba de adjudicar a Telefónica para el suministro de una red 5G privada 'ad-hoc' de alta capacidad para misiones tácticas del Ejército de Tierra y una nube distribuida.
El contrato, cuya adjudicación acaba de ser publicado en la Plataforma de Contratación del Sector Público, contempla que Telefónica percibirá por este proyecto, que tiene un plazo de ejecución de 35 meses, un total de 5.676.815,48 euros (4.691.583,04 euros, impuestos no incluidos).
El proyecto será financiado con los fondos Next Generation, ya se encuentra enmarcado dentro de la inversión 6 (despliegue del 5G: redes, cambio tecnológico e innovación) del Componente 15 (conectividad digital, impulso a la ciberseguridad y despliegue del 5G) del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR).
Superioridad de información
El pliego de condiciones técnicas de licitación, a la que solo la operadora de telecomunicaciones ha presentado oferta, explica que para lograr la superioridad de la información en el entorno táctico es "fundamental" poder compartir la información que sea necesaria entre los diferentes nodos que despliegue el Ejército de Tierra.
"Esto implica disponer de la capacidad de almacenar y acceder a grandes volúmenes de datos procedentes de diversas fuentes que pueden estar almacenados en diferentes plataformas y procesarlos para extraer su significado aplicando técnicas de big data e inteligencia artificial (IA).
En este contexto, apunta que las comunicaciones empleadas en la actualidad por las unidades tácticas del Ejército de Tierra están actualmente soportadas por radios tácticas en las bandas de HF, VHF y UHF, que proporcionan capacidades de transmisión muy bajas, del orden de Kbps.
Asimismo, el Ministerio de Defensa añade que el Ejército de Tierra también dispone de algunos equipos de comunicaciones satélite (con posibilidades reales de acceso muy limitadas) y radioenlaces desplegables obsoletos, que ya han dejado de emplearse.
Fachada de la sede de Telefónica en la Ronda de la Comunicación (Madrid).
Por el contrario, destaca que la tecnología 5G permite alcanzar velocidades de transferencias de datos de varios Gbps, con latencias mínimas y es capaz de gestionar "elevadas densidades" de dispositivos conectados.
A este respecto, incide en que en la actualidad la mayoría de los países de nuestro entorno están analizando la incorporación de la tecnología 5G para mejorar sus capacidades militares. "En el seno de la OTAN también se están llevando a cabo trabajos para evaluar los beneficios que podría tener el empleo de esta tecnología en operaciones de la Alianza", subraya.
Posibilidades del 5G
Por este motivo, el Ejército de Tierra ha llevado a cabo estudios acerca de la posibilidad de empleo de la tecnología 5G en despliegues tácticos, tras los cuales cree que dicha tecnología puede habilitar nuevas capacidades operativas y el empleo de otras tecnologías. "En concreto, permitiría facilitar un mando y control más eficiente", incide.
En consecuencia, la Subdirección General de Gestión Económica del Ministerio de Defensa decidió licitar un contrato para el suministro de un sistema de comunicaciones táctico, lo que se conoce como FANETC (Flying Ad-hoc NETwork & distributed mobile Tactical Cloud, en inglés).
Este sistema debe permitir el establecimiento de redes 5G terrestres y no terrestres, éstas últimas mediante la utilización de drones, para dar cobertura inalámbrica al despliegue de una unidad tipo Brigada del Ejército de Tierra.
Asimismo, también incorporará capacidad de edge computing, lo cual permitirá la ejecución de algoritmos de inteligencia artificial, disminuirá el tiempo necesario para la toma de decisiones y facilitará la creación en el futuro de una nube táctica distribuida.
Características del sistema
El proyecto adjudicado a Telefónica comprende el suministro, instalación, configuración y puesta en servicio de los componentes del sistema FANETC. En concreto, la compañía tendrá que ofrecer una red 5G privada, con todos sus recursos dedicados exclusivamente a los usuarios del Puesto de Mando al que dé servicio.
La red deberá estar basada en una arquitectura de tipo Stand Alone (SA), "sin elementos de red basados en 4G o en otras generaciones anteriores". Además, deberá dar cobertura al área de actuación de una Brigada, que puede extenderse hasta un radio de 75 kilómetros, y permitirá a los usuarios y dispositivos que estén conectados a ella acceder a los servicios que se les habilite mediante conexiones IP.
Asimismo deberá ir acompañada de un sistema del dron cautivo que permita aumentar la cobertura proporcionada, especialmente en zonas con obstáculos (edificios, vegetación, accidentes geográficos, etc.), así como de un sistema de enjambre de drones que extienda la cobertura 5G a zonas a las que no se puede dar servicio con la estación base terrestre.