Ferrovial, la compañía presidida por Rafael del Pino y con sede en Países Bajos, ha vendido el 25% de las acciones que tenía del aeropuerto de Heathrow (Londres). Según ha comunicado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el montante de la operación es de unos 2.736 millones de euros (2.368 millones de libras). Los compradores son los fondos Ardian y The Public Investment Fund.
Han sido 17 los años en los que firma fundada en España ha estado en el aeropuerto londinense. “Hemos conseguido grandes logros”, ha explicado Luke Bugeja, consejero delegado de Ferrovial Aeropuertos en un comunicado. “Entre ellos, la supervisión de una inversión de 12.000 millones de libras, la ampliación de su capacidad con la construcción de la Terminal 2 y la mejora de su rendimiento operativo. Estamos muy satisfechos de haber convertido a Heathrow en uno de los aeropuertos más conectados del mundo y con el de mayor tráfico de Europa”.
Pero ¿por qué ha vendido Ferrovial su participación en una de las consideradas como ‘joyas de la corona’ de la compañía junto a la autopista canadiense 407 ETR? ¿Por qué se desprende la compañía dirigida por Ignacio Madridejos de su principal activo aeroportuario?
Falta de dividendo
Varios son los factores que han inclinado finalmente la balanza a favor de la venta de Heathrow por parte de Ferrovial. Uno de ellos tiene que ver con la falta de dividendo. es que, conviene recordar, no reparte dividendos desde el segundo trimestre de 2020.
Fue en el primer trimestre de dicho año cuando Ferrovial percibió 29 millones de euros por este concepto. Desde entonces, y debido a la pandemia, que desinfló el número de pasajeros de manera brutal, no ha habido reparto.
[Ferrovial descuenta el dividendo tratando de aferrarse a la media móvil de 200 sesiones]
Recordemos los datos: en 2019, 80,8 millones de pasajeros; en 2020, 22,1 millones; en 2021; 19,4 millones; y, en 2022, 60,31 millones. En 2023 (hasta octubre), son 65,81 millones de pasajeros los que han pasado por la terminal londinense.
Si, en enero de 2020, ese número fue de 6,09 millones de pasajeros (a partir de entonces su número menguó rápidamente por la pandemia), en 2023 ha habido varios meses en los que se ha superado esa cifra. En concreto, viene sucediendo desde marzo, llegando a superar los 7 millones en los meses de junio, julio, agosto y septiembre.
Sin embargo, el dividendo no ha retornado. Y no lo hará en 2023 y, quien sabe, si en 2024. De esta manera, Ferrovial no será capaz de cumplir uno de los puntos de su Plan Horizon 2020-2024. Dicho plan estimaba unos ingresos de 720 millones de euros procedentes de aeropuertos y otros servicios. De momento, se han quedado en los 29 millones ya reseñados.
Si se echa la vista atrás, los dividendos de Ferrovial procedentes de aeropuertos entre 2019 y 2021 fueron de 191 millones de euros. Si se compara con autopistas (1.283 millones de euros), la cifra es seis veces inferior. Fue en 2014 cuando Ferrovial cosechó los mayores de su historia en sus aeropuertos: 314 millones. Al año siguiente fueron 132 millones, y en 2016, 134 millones. Un salto cualitativo llegó en 2017, con 137 millones, para volver a bajar en 2018 y 20919, cuando llegaron a 191 millones en ambos. En 2020 fueron los 29 millones antes citados, y en 2021, no hubo.
Mal ‘rollo’ con las autoridades inglesas
Cierto que el aeropuerto de Heathrow recuperó el beneficio neto en 2022 (129 millones de euros). Pero las pérdidas ocasionadas por la pandemia han sido de 4.720 millones de euros. Un mal dato al que hay que añadir otro: la mala relación entre el aeropuerto y la Autoridad de Aviación Civil (CAA).
Heathrow anhelaba que las tarifas por pasajero estuvieran entre las 32 y las libras. Sin embargo, la CAA anunció que la tarifa de 30 libras no subirá, sino que bajará en 2026 a 26 libras. Es más, atacó al aeropuerto diciendo que, durante la pandemia, “los accionistas de Heathrow no aportaron financiación en contraste de lo que ocurrió en otros negocios”. Accionistas que, entre 2012 y 2020, se habían repartido 4.000 millones de euros en dividendos.
“Si bien estamos en desacuerdo con una serie de conclusiones a las que llegó la CAA, ahora nos estamos esforzando en garantizar que podamos ofrecer los resultados correctos para los pasajeros a través de nuestro propio plan H7", contraatacaron desde el aeropuerto. Y añadieron que la CAA ha cometido “errores claros que socavarán la inversión necesaria para brindar el servicio aeroportuario y la resiliencia que desean los consumidores”.
Ignacio Castejón, director financiero de Ferrovial, durante la presentación de los resultados del tercer trimestre de 2021, en pleno tira y afloja entre las dos partes, afirmó: “Soy muy escéptico sobre el apetito de aportar más capital a Heathrow”. Y añadió: “Los resultados no han sido muy positivos desde el punto de vista de rentabilidad de las acciones. Yo diría, de hecho, que son negativos”.
La respuesta de la CAA fue que los inversores sólo ponían dinero encima de la encima si obtenían “un retorno razonable a su dinero”. De momento, y según las previsiones, dicho retorno no será hasta 2026. Con todo este cóctel, a Ferrovial no le ha quedado otra que ‘salir volando’ de Heathrow.