El fantasma del veto a los dividendos y las recompras de acciones de la banca vuelve a asomar tras el estallido del conflicto bélico en Ucrania. Sin embargo, no parece que el Banco Central Europeo (BCE) vaya a imponer la misma recomendación que lanzó tras el shock inicial de la pandemia. Así lo creen los analistas de JP Morgan, que anticipan que, en caso de que existan restricciones, el supervisor las valorará "banco a banco".
Al llegar la pandemia, el BCE decidió tomar una drástica decisión al recomendar a las entidades bajo su paraguas supervisor evitar el pago de dividendos y las recompras de acciones, un "consejo" -un veto a efectos prácticos- que no fue retirado del todo hasta año y medio después.
Los bancos españoles -que durante este periodo perdieron 262.000 accionistas, aunque se revalorizaron un 46% en bolsa- al principio acogieron de buen grado, debido al entorno de incertidumbre, el consejo de guardar el capital para más adelante por si venían mal dadas, pero pasadas algunas semanas no tardaron en pedir libertad para decidir individualmente si estaban en posición de pagar dividendo.
El lamento principal fue que no era necesario, ni justo, imponer la misma restricción a todos los bancos al mismo tiempo debido a que cada uno se encontraba en una posición de solvencia diferente. "No nos gusta el café para todos", criticaban desde la patronal AEB.
Se quejaban, además, de que esta restricción les ponía en desventaja respecto a las empresas de otros sectores, que tenían la posibilidad de atraer accionistas con el gancho del pago del dividendo. En cuanto fue posible, todos se lanzaron a anunciar retribuciones.
"Improbable"
De cara a las consecuencias que la guerra en Ucrania puede dejar en el sector financiero, vuelve a plantearse la posibilidad de que el BCE tome esta medida, si bien desde JP Morgan no lo ven probable.
"No esperamos que el BCE introduzca unas restricciones generales al payout [porcentaje de beneficio que se reparte a través del dividendo] como vimos durante la pandemia. Creemos que es improbable que el BCE pida a todos los bancos europeos que se abstengan de pagar dividendos o realizar recompras de acciones", apuntan los analistas de la entidad estadounidense en un reciente informe.
Estos expertos creen que no hay "ninguna indicación" por parte del BCE que sugiera que esta opción esté sobre la mesa. "El BCE reconoce que el veto general al payout, introducido como respuesta a la pandemia, ha tenido algunos efectos negativos no intencionados sobre los bancos europeos, algo que el BCE querría evitar en el futuro", añaden.
Es por eso que, en el caso de que el supervisor bancario decidiera imponer alguna restricción, los expertos de JP Morgan creen que lo haría "banco a banco" y no de forma general.
Las recompras, en riesgo
En todo caso, para la casa estadounidense lo que corre más riesgo no es tanto el pago de dividendos como las recompras de acciones, que están últimamente muy de moda entre los bancos españoles.
Lógicamente, están en mayor peligro las impulsadas por bancos con una significativa exposición a Rusia o Ucrania -entre los que no se encuentran los españoles-, pero desde JP Morgan también ven riesgo en las recompras que ya se han anunciado y están a la espera de aprobación de los supervisores, así como las que ya se están desarrollando.
En todo caso, al margen de las decisiones que pueda tomar el BCE, los propios bancos con exposición a Rusia o Ucrania están tomando las suyas. Raiffeisen ha suspendido el dividendo como precaución para salvar capital, mientras que UniCredit ha puesto "en espera" su recompra de acciones por 2.580 millones.