La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero y el portavoz del PNV, Aitor Esteban,
El PSOE cede ante el PNV para salvar el impuesto a la banca pero sus socios tumban el de las energéticas
- Finalmente, la figura que afecta a las entidades financieras tendrá carácter temporal y se mantendrá hasta el ejercicio 2026.
- Más información: El Gobierno se abre a rebajar el 'impuestazo' para atraer a Junts y PNV pero Podemos, Bildu y ERC presionan a la contra
Finalmente, sólo se mantendrá el impuesto a la banca, y de manera temporal. El PNV ha llegado a un acuerdo con el Gobierno para dar luz verde a la nueva figura tributaria, pero a cambio de que los territorios forales puedan bonificarla a voluntad. En cambio, los vascos aseguran que "el gravamen a energéticas decaerá por factores ajenos" al partido. Es decir, por la falta de apoyos de los socios de la investidura, concretamente Junts.
El Gobierno no ha logrado convencer a los independentistas catalanes, que ya se habían manifestado en contra de conservar este impuesto en el futuro. El Ejecutivo, en unas negociaciones que se han desarrollado hasta la tarde de este miércoles, no ha logrado impedir el veto de Junts.
Cabe recordar que este miércoles termina el plazo para presentar enmiendas al proyecto de ley que garantizaría una tributación mínima por parte de las multinacionales. Se trata del caballo de Troya normativo con el que la coalición de PSOE y Sumar quería hacer permanentes los impuestos a la banca y a las empresas energéticas.
Sin embargo, únicamente se ha logrado la mitad del objetivo. Según lo expresado por el PNV, sólo se ha llegado a un acuerdo para incluir una enmienda que haga permanente el impuesto a la banca. Y a cambio de que se pueda concertar en los territorios forales, generando una suerte de dumping fiscal autonómico en el sector financiero.
Finalmente, no se ha incluido una enmienda en el de las energéticas por la falta de acuerdo en las negociaciones con los socios del Gobierno, concretamente con Junts, como ya se ha comentado.
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Con todo, esto no significa que el impuesto permanente a la banca se apruebe con seguridad. Todavía tiene que superar la votación de la Comisión de Hacienda y la del pleno del Congreso de los Diputados.
¿En qué consistirá el nuevo impuesto bancario? En primer lugar, el impuesto sobre el margen de intereses y comisiones de determinadas entidades financieras entra en vigor "para los periodos impositivos que se inicien desde el 1 de enero de 2024". Sin embargo, también se indica "será aplicable en los tres primeros periodos impositivos" desde esa fecha. Cabe recordar que para este año todavía está vigente el gravamen temporal.
Mientras que ese anterior gravamen establecía una cuota del 4,8% para todas las entidades, el tipo del nuevo impuesto tendrá un carácter progresivo, del 1% al 6% en función de la base liquidable. Además, se permitirá la deducción del 25% de la cuota del Impuesto de Sociedades, más una deducción extraordinaria en el caso de que sufran una caída sostenida de su rentabilidad.
Asimismo, aunque el propio nombre del impuesto señala a "determinadas entidades", lo cierto es que en el texto de la enmienda no se encuentra explicación alguna sobre cómo se determinará a qué bancos se aplica. En el caso del gravamen temporal, el baremo era que la suma de ingresos por intereses y comisiones superase los 800 millones de euros.
