Entre ellas, según ha podido saber EL ESPAÑOL-Invertia, el Ejecutivo abre la puerta a rebajar la factura de la luz a los supermercados que planteen rebajas de precios o cestas de la compra a precios accesibles. O, al menos, a un coste no tan elevado por la inflación. 

Se trata de una de las reclamaciones que la patronal de la gran distribución ha trasladado al Gobierno. La Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (Asedas) hace meses que viene demandando medidas que permitan reducir el coste de la energía en sus establecimientos, que se ha disparado para la conservación o incluso preparación de alimentos.

[El Gobierno estudia reducir el IVA de los alimentos y llegar a otros acuerdos con las grandes cadenas de supermercados]

Concretamente, y como ya contó este periódico, reclaman acceder a subastas de generación -a las que actualmente acuden empresas eléctricas- y que se suspendan o limiten temporalmente los impuestos ligados a emisiones.

También reclaman apoyos financieros específicos para impulsar la implantación de plantas de generación de energías renovables en sus instalaciones logísticas o comerciales.

El Gobierno ve "razonables" algunas de estas reclamaciones, dado que el coste energético que soporta una buena parte de este sector está disparado y afecta a sus costes directos. Eso sí: ceder a ellas no será gratis. Las empresas que quisieran acceder a esta posibilidad tendrían que plantear rebajas de precios de alimentos o cestas de productos básicos a costes accesibles. 

En cambio, el Ejecutivo no se plantea tocar el IVA de los alimentos, al menos de forma generalizada. Así lo ha indicado Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno e interlocutora (junto a su equipo) con el sector de distribución y de las grandes superficies con el beneplácito de Pedro Sánchez. 

Beneficios

Durante la presentación de las primeras propuestas para subir el salario mínimo interprofesional, rechazó rebaja generalizada del IVA de los alimentos, argumentando que sólo serviría para "ensanchar" los beneficios de las grandes distribuidoras y no ayudaría a las familias con la cesta de la compra.

En cambio, sí que apoyó disminuir el IVA de determinados productos alimenticios, por ejemplo el pescado. Tampoco está el Ejecutivo por la labor de retrasar la entrada en vigor del nuevo impuesto al plástico, que amenaza con subir todavía más los precios. 

Poco a poco, el Ejecutivo está revelando parte de cómo será el escudo social en 2023, año en el que la inflación seguirá en cifras elevadas. Pese a ello, la bonificación de la gasolina y el gasóleo pasará a mejor vida. Al menos, su aplicación de forma generalizada.

Así lo han indicado tanto Nadia Calviño, vicepresidenta primera del Gobierno y responsable de Asuntos Económico, como su equipo. En estos momentos, se está estudiando en qué colectivos mantener el descuento de los combustibles.

Sectores

Se da por hecho que en el sector del transporte se mantendrá, igual que en el de los usuarios del gasóleo profesional.  Sin embargo, podrían quedar bajo el cobijo de esta bonificación más sectores. El asunto no está cerrado. 

También se espera que durante 2023 se mantengan las rebajas del tipo del IVA en electricidad y del Impuesto Especial sobre la Electricidad y la supresión del Impuesto sobre el Valor de la Energía Eléctrica. Es decir, todas las medidas tributarias en vigor para rebajar la factura de la luz.  

Se espera que también se mantenga la rebaja del IVA del gas, así como otras medidas relacionadas con el gas en las comunidades de vecinos. 

Por lo pronto, solo está confirmado que en 2023 se mantendrán la gratuidad de los trenes de cercanías y media distancia de Renfe y Rodalíes, el incremento del 15% de las pensiones no contributivas (y, por tanto, del ingreso mínimo vital) y el tope del 2% para las subidas del alquiler de vivienda.