El interés por la IA generativa se dispara de la mano de "soluciones sólidas" para pymes y grandes compañías

A pesar de las numerosas conversaciones que se han generado en los últimos meses en torno a la inteligencia artificial (IA), lo cierto es que vivimos en un momento de incertidumbre en el que todavía se están explorando sus posibles aplicaciones e implicaciones éticas.

Hace ya un año, las innovaciones en este terreno aún se situaban en la primera etapa de la curva del hype de Gartner, la de lanzamiento, y a las puertas de un pico de expectativas sobredimensionadas, en la que estamos hoy. “Debemos prestar especial atención a las innovaciones cuya adopción prevemos que va a generalizarse en un plazo de dos a cinco años”, afirmaba entonces el analista de esta consultora, Afraz Jaffri. 

Doce meses después, la inteligencia artificial generativa acapara la atención de empresas y ciudadanos, motivado por la popularidad de una de sus aplicaciones: ChatGPT. Algo que queda en evidencia al comprobar lo que más están buscando los usuarios en Google durante 2023. En España, el interés por entender “qué es la IA” ha experimentado un aumento del 290% con respecto al año anterior y un 500% en comparación con hace cinco.

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En concreto, las búsquedas sobre “para qué se utiliza la IA” y “cómo se usa la IA en la vida cotidiana” crecieron en más de un 5.000% desde 2022. Los españoles también quieren saber “cómo funciona la inteligencia artificial”, con un incremento del 450%. 

Detrás de ese interés está la capacidad de estos sistemas para replicar las expresiones humanas y producir contenidos que, si no se analizan a fondo, parecen creados por una persona.

IA a dos velocidades

Los analistas de Gartner consideran que no será hasta por lo menos dentro de una década cuando la inteligencia artificial general esté plenamente integrada en procesos y soluciones, pero no ocurre lo mismo con la generativa, que parece ir a una velocidad más rápida.

De hecho, como recoge el informe El comercio en la era de la IA generativa elaborado por Mastercard, ya hay compañías que están evaluando su implantación, apoyadas, principalmente, en cuatro desarrollos tecnológicos: los nuevos grandes modelos lingüísticos (LLM, por sus siglas en inglés), que comprenden y generan texto de manera similar a la humana; estándares abiertos, que permiten ya integrar a la IA en diferentes soluciones; las grandes cantidades de datos de las que disponen de las empresas; y, por último, las interacciones entre distintas herramientas de inteligencia artificial.

El 'hype cycle' de Gartner para la inteligencia artificial.

“A diferencia de otras tecnologías que han vivido ciclos de gran expansión, la IA generativa ha conseguido la creación de soluciones sólidas que se está desarrollando muy rápidamente, por lo que seguirán apareciendo nuevas oportunidades y nuevos usos. Esta tecnología está preparada para transformar casi todos los sectores”, dice Ken Moore, Chief Innovation Officer (CIO) de Mastercard.

Por su parte, Matt Brittin, presidente de Google para Europa, Oriente Medio y África, manifiesta que “es un tipo de tecnología que puede aprender de su entorno, experiencias y personas; y puede comprender patrones y hacer proyecciones mejor que cualquier tecnología anterior”. Y recuerda que los modelos que emplea los preparan y crean personas, “ingenieros humanos”. 

Usos por sectores 

Lo experimentado en los últimos meses está allanando el camino para que en los próximos años la IA generativa impulse nuevas aplicaciones empresariales y de consumo. Aunque cabe recordar que la inteligencia artificial no es nueva y ya se emplea en sistemas de freno antibloqueo de vehículos, en los de piloto automático de los aviones, o en algo tan habitual como encontrar la mejor ruta en Google Maps. 

El cambio ahora vendrá dado por el desarrollo de modelos para sectores específicos, en los que el uso de los datos y la seguridad son cuestiones fundamentales, como ocurre en el ámbito jurídico, sanitario o financiero.

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Así, en el caso de grandes corporaciones, algunos usos incluirían el empleo de bots que ofrezcan información instantánea durante reuniones estratégicas, así como gestión de recursos, presupuestos y operaciones eficientes para agilizar procesos. La IA generativa también será un apoyo para las pymes que no cuentan con muchos recursos ni personal, convirtiéndose en una herramienta que les ayude en su gestión o en aumentar sus conocimientos de marketing.

Si lo aterrizamos por sectores, en el financiero, donde se requiere de la interacción entre diferentes agentes, instituciones, empresas u órganos legisladores, la IA generativa podrá simplificar y agilizar procesos internos y, de cara al cliente, facilitar la integración de cuentas bancarias, carteras de inversión, creación de planes de ahorro personalizados, e incluso ser un gestor del patrimonio personal.

En el ámbito del retail, por su parte, donde los mensajes personalizados son parte de la estrategia de captación de clientes, la inteligencia artificial ya es capaz de ofrecer el suficiente conocimiento del consumidor para mostrarle opciones más ajustadas a sus preferencias y ayudarle a encontrar exactamente el producto que busca. 

Esa automatización también mejorará la planificación de los viajes. En el lado de las empresas turísticas, integrando servicios por voz, entre otros; y en el de los usuarios, creando itinerarios acordes a sus predilecciones, así como facilitando las reservas en alojamientos, transporte, restaurante y ofertas de ocio.