Talento para un futuro mejor: de chips para comunicaciones ópticas a baterías de 'ion-litio' y bioimpresión de alimentos

La sociedad actual, cada día más digital y tecnológica, tiene ante sí grandes retos que será difícil afrontar sin las aportaciones más disruptoras de un talento innovador que avanza a paso firme en nuestro país y donde jóvenes compañías están construyendo un nuevo tiempo muy esperanzador.

La emergencia climática, el crecimiento continuado de la población mundial, el aumento de las desigualdades que empeora la situación de los más vulnerables, etc, son temáticas que será imposible encarar sin la tecnología como aliada.

La segunda edición del reto Innovate4Tomorrow, impulsado por Ayming para captar este nuevo talento, ya tiene ganador en nuestro país este 2024. Se trata de KDPOF (Knowledge Development for POF), empresa que desarrolla y comercializa soluciones integradas para comunicaciones ópticas de alta velocidad en entornos adversos.

Junto a ella, Floatech, centrada en la fabricación de ánodos de nano silicio para baterías de ion-Litio, y Cocuus, con el foco puesto en la biosíntesis alimentaria de alternativos cárnicos y la construcción de líneas de impresión 3D industriales, han sido las otras dos startups distinguidas en los premios de esta edición.

DISRUPTORES - EL ESPAÑOL ha conversado con los tres proyectos para pulsar cuáles son los desarrollos tecnológicos que están primando estos emprendedores y que, sin lugar a dudas, contribuirán a construir un futuro mejor de la mano de la tecnología y la innovación.

KDPOF nació en 2010 en Madrid de la mano de Carlos Pardo y Rubén Pérez, dos ingenieros apasionados por las comunicaciones avanzadas y su implementación microelectrónica. "Aportamos nuestra experiencia en la industria de las comunicaciones sobre power-line, redes de acceso, así como en televisión digital", afirman a esta redacción. 

Su propuesta ganadora se centra en una tecnología propia que permite la transición de las comunicaciones internas de los vehículos de cables de cobre a fibra óptica. Este galardón de Ayming le ha reportado 6.000 euros y un año de servicios de financiación de la innovación, estrategia de negocio y tech-transfer por parte de la consultora tecnológica.

Exposición del proyecto de KDPOF durante la final del reto de Ayming.

La startup aspira a satisfacer la necesidad creciente de soluciones de transmisión de datos de alta velocidad en el mercado automotriz, especialmente en el contexto de los vehículos eléctricos y autónomos.

En concreto, su propuesta tecnológica se basa en el uso de fibras ópticas para comunicaciones internas en el automóvil, lo cual ofrece varias ventajas sobre las soluciones tradicionales de cobre; mayor velocidad y capacidad de transmisión de datos, transmisiones de datos a distancias mayores, vehículos más económicos y menor complejidad, y mayor fiabilidad, explican desde la compañía.

Comunicaciones ópticas en automóviles

"El principal hito y orgullo es tener nuestro producto instalado en coches de última generación que se compran en la actualidad y ruedan por nuestras carreteras", precisan desde KDPOF.

Otro hito destacado es el desarrollo y liderazgo de la compañía en la creación del estándar IEEE 802.3cz para comunicaciones ópticas en automóviles. "Este logro nos posiciona como referentes en el sector y nos ha permitido formar alianzas estratégicas con importantes actores de la industria", añaden las mismas fuentes.

Pero es, sin lugar a dudas, su plantilla uno de sus principales activos. KDPOF está compuesta por un equipo multidisciplinario de aproximadamente 50 personas.

"Estamos orgullosos de contar con un equipo altamente capacitado y comprometido, que trabaja incansablemente para llevarnos al siguiente nivel y consolidar nuestra posición como líderes en tecnología de comunicación óptica para el sector automotriz y más allá", concluyen desde la empresa.

Floatech, durante la presentación de su propuesta en el reto 'Innovate4Tomorrow'.

Otras dos propuestas punteras han recibido la distinción de Innovate4Tomorrow. Se trata de Floatech y Cocuus, primer y segundo accésit respectivamente.

La gestación de Floatech es una historia de pasión, innovación y colaboración intercultural. Todo comenzó mucho antes de su fundación oficial en septiembre de 2021 como una spin-off de IMDEA Materiales. La chispa inicial prendió con Juan José Vilatela, un brillante científico mejicano que comenzó su carrera en nanomateriales en Estados Unidos.

Richard Schäufele y Fernando Celaya fueron dos figuras clave para que este proyecto consolidara finalmente en la prometedora startup que se ha convertido en la actualidad.

Pero ¿en qué consiste su tecnología? Imaginen un viaje de Madrid a París en un vehículo eléctrico conectado, con una única carga de batería de diez minutos. Gracias a la tecnología de ánodos de nanosilicio para las baterías de ion-litio es posible duplicar el rango de autonomía y cargar la batería en solo diez minutos, "utilizando una décima parte del material que requiere el grafito actual", explican desde Floatech.

Duplicar la autonomía de las baterías

La startup ha patentado un proceso revolucionario que permite fabricar toneladas de nanomaterial de silicio (Si⋮Coil TM) de manera sostenible -abatiendo dos toneladas de CO2 por vehículo- y en grandes cantidades.

Este proceso es fácilmente integrable en los métodos de fabricación actuales, lo que facilita la democratización del vehículo eléctrico. "Con estas innovaciones, los coches eléctricos no solo igualan, sino que superan las condiciones de uso de los vehículos de combustible fósil, promoviendo así la movilidad eléctrica y ofreciendo una alternativa más eficiente y ecológica para la movilidad en ciudades y viajes de largo recorrido", insisten desde la startup.

El pasado enero Floatech cerró su primera ronda de financiación de 1,34 millones de euros, unos fondos que se destinarán a la instalación de una planta piloto con un reactor de preproducción en Tecnogetafe, que comenzará a operar en septiembre de 2024 y será capaz de fabricar 10 MWh al año.

"Esta capacidad es suficiente para la homologación del producto Si⋮Coil™ con clientes y para obtener información crucial para el diseño del reactor de producción. Nuestro objetivo es suministrar globalmente nuestro ánodo de nano silicio con fábricas en Europa, América y Asia", puntualizan desde Floatech.

La alimentación sostenible que llega: Cocuus

Cierra este trío de talento innovador español la startup Cocuus, una compañía de base tecnológica y vocación industrial, perteneciente al sector de la mecatrónica.

Su andadura comenzó en 2017 como resultado de una intensa actividad previa de I+D+i de sus promotores en los campos relacionados con la hostelería y la pasión por la tecnología y la innovación.

Un momento de la presentación del proyecto disruptores de Cocuus en el reto de Ayming de principios de julio.

Sus dos socios promotores Patxi Larumbe y Daniel Rico decidieron dar el salto al emprendimiento tras una larga trayectoria en el campo del diseño de maquinaria industrial, tecnología láser y robótica.

Su propuesta nacía con la meta de abordar el sector de la gastronomía y la alimentación a través de soluciones innovadoras con vocación internacional, basadas en tecnologías habilitadoras mecatrónicas y TIC.

El modelo de biosíntesis alimentaria de Cocuus consiste en entender cómo se producen los productos en la naturaleza para, posteriormente, reproducirlos desde un punto de vista de la ingeniería. "Este proceso, que es el alma de la fabricación de los chuletones, o de las costillas y el beicon, está en una solución propia de Cocuus que llamamos Food-to-Data, Data-to-Food", indican desde la startup.

"Las tecnologías desarrolladas por Cocuus van a revolucionar la manera de alimentarnos en el futuro. Se está incentivando que para 2050 en España no haya chuletas de origen animal, siendo una tendencia que puede convertirse en ley. En ese sentido, la carne sintética es una alternativa para reducir la ganadería intensiva y sus problemas medioambientales", argumentan.

Siete patentes en 44 países

"Además, puede ser un modo de alimentar a una población que no deja de crecer. No hay vacas para 10.000 millones de personas".

La compañía, con un equipo de 21 personas, cuenta con siete patentes, "algunas de ellas en 44 países" de todo el mundo. Además, tiene en su haber 1.450 secretos industriales y está participada por las compañías alimentarias más importantes del mundo.

La distinción de Ayming se suma a una larga lista de premios y galardones de todo tipo de instituciones público-privadas que han puesto en valor su tecnología disruptiva para conformar una nueva alimentación en el futuro.

El próximo 17 de octubre, en el marco de la presentación del VI Barómetro Internacional de la Innovación de Ayming, la consultora llevará a cabo la entrega del premio al proyecto ganador del reto Innovate4Tomorrow.

VI Barómetro Internacional de Innovación 2025

La sexta edición de este barómetro ofrecerá una visión general de las tendencias de innovación más importantes en todo el mundo y dará a conocer los primeros datos en cuanto a estrategia e inversión en I+D de cara al 2025.

El evento debatirá sobre la actualidad y la evolución de la innovación y brindará una oportunidad para estar al tanto de las visiones de auténticos dinamizadores de la innovación, entre los que ya figuran por méritos propios los españoles KDPOF, Floatech y Cocuus.