En la escuela primaria Kindermanngasse de Viena, la cuarta más antigua de la capital austríaca, el ajetreo de los juegos infantiles en su patio de recreo ha sido reemplazado por el ruido de obras y la emoción de los investigadores. Durante unas importantes reformas destinadas a ampliar el número de aulas de la escuela y el comedor de los alumnos, un equipo de arqueólogos urbanos del Ayuntamiento ha localizado una gran construcción que data del siglo II d.C., época en la que el águila de las legiones romanas vigilaba atentamente las aguas del río Danubio.
Bajo el suelo del patio de recreo han aparecido toda una serie de zanjas, agujeros para postes, fosas y hornos junto a varias evidencias de otras estructuras romanas, medievales y modernas que aún siguen siendo estudiadas. Una de estas franjas contaba con un pozo lleno de ladrillos que, según los arqueólogos, son restos de pilae, una construcción romana destinada a la creación de un hypocaustum, el sistema de calefacción de la Antigua Roma muy utilizado en los edificios de termas y documentado en ricas domus.
Al realizar un estudio más detallado descubrieron que estos ladrillos estaban estampados con el nombre de la Legio XIII Gemina, lo que proporciona una prueba concluyente de que esta unidad, una de las más conocidas del ejército romano, fue responsable de la construcción de los campamentos militares en la antigua Vindobona (Viena), uno de los muchos puntos defensivos del limes, alrededor del año 97 d.C.
La Legio XIII Gemina fue una de las decenas de unidades que vigilaron la gélida frontera danubiana al norte de la provincia de Panonia. Reclutada por Julio César en el año 57 a.C., se estrenó en la feroz conquista de la Galia y se mantuvo fiel a su general cuando, en el año 49 a.C. marcharon hacia Roma y cruzaron el río Rubicón en las guerras civiles que sacudieron los últimos años de la turbulenta República romana.
Bajo el mando de César recorrieron media Europa persiguiendo a Pompeyo y a los optimates en Hispania y el mar Egeo. Cuando el dictador fue asesinado cinco años después en los idus de marzo del año 44 a.C., Octavio Augusto, su hijo adoptivo que se convertiría en el primer emperador de Roma, tomó el mando de la citada legión, que también derrotó a Marco Antonio y Cleopatra en la legendaria batalla naval de Accio.
[La última legión del Imperio romano: fue fundada por Augusto y desapareció en el desierto]
Desplegada durante siglos en los puntos calientes de todo el imperio, la Notitia Dignatarum, un detallado documento administrativo del en el siglo IV d.C., les localiza en la fortaleza Babilonia, situada en la orilla oriental del río Nilo, cerca de la ciudad egipcia de Heliopolis. Poco después se pierde el rastro de la unidad entre el caos de la caída de Roma.