
Mohamed VI y Pedro Sánchez, en el primer encuentro que mantuvieron en Rabat, en noviembre de 2018.
¿Por qué Sánchez decidió apoyar a Mohamed VI en el Sáhara? Incluso en el PSOE lo desconocen tres años después
Muchos socialistas, como la presidenta del Congreso, Armengol, acogen a niños saharauis, pero por "disciplina de voto" siguen la directriz de Moncloa.
La carta del presidente, fechada el 14 de marzo, la dio a conocer el rey de Marruecos cuatro días después entre el estupor de las bases del PSOE.
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Este viernes, 14 de marzo, se cumplieron tres años de la carta que el presidente Pedro Sánchez envió al rey Mohamed VI "para evitar futuras crisis entre nuestros países". Estas palabras se conocieron en realidad cuatro días después, cuando el monarca marroquí las reveló a la opinión pública.
En su misiva, el presidente español ratificó que la propuesta marroquí de autonomía presentada en 2007 es "la base más seria, creíble y realista para la resolución de este diferendo".
La propia redacción de la carta levantó sospechas por el léxico y la sintaxis empleados, más propios de una mala traducción que de un escrito originalmente en español.
Con su iniciativa, Sánchez cerraba la crisis abierta con Rabat en 2021 tras acoger en un hospital de Logroño al secretario general del Frente Polisario, Brahim Ghali, enfermo de covid. Entre otras consecuencias, aquella crisis precipitó la salida de la ministra de Exteriores, Arancha González Laya.
La entrega del Sáhara a Marruecos tiene en contra al Congreso de los Diputados, incluso a parte de las bases del PSOE que siguen desconociendo a día de hoy la razón de este giro en política internacional.
"Es grave, porque si se toma una decisión, por muy controvertida que sea y al menos de puertas hacia dentro te la explican... pues bueno, puedes acatarla, puedes escucharla; pero es que no ha habido ni explicación", señala Aman Hamoudi, trabajador social saharaui y vicesecretario general de Juventudes Socialistas de Madrid.
Las palabras que hizo públicas Mohamed VI el 18 de marzo de 2022, le sirvieron a Sánchez para ser recibido el 7 de abril de ese año en Rabat. Allí firmaron la "hoja de ruta" que actualmente sigue sin concretarse en asuntos como la apertura de las fronteras terrestres con Ceuta y Melilla.
El saharaui socialista Aman Hamoudi conoció la noticia durante una reunión que mantenía Juventudes Socialistas de España con jóvenes saharauis en Ferraz con la intención de coordinarse y sacar adelante iniciativas.
"Fue un jarro de agua fría, más que nada porque el PSOE siempre había tenido una posición de al menos respeto de los postulados de Naciones Unidas. Entonces, de repente, eso hizo que saltara todo por los aires", recuerda en conversación con EL ESPAÑOL.
También los ministros de Podemos en el Gobierno de coalición se enteraron por la prensa del cambio histórico de la posición sobre el Sáhara Occidental.
Hamoudi subraya que aunque el PSOE, oficialmente, tiene hoy "una postura distinta a la que ha mantenido durante años" en relación al Sáhara Occidental, "en la militancia seguimos pensando y opinando lo mismo".
También recuerda que muchos socialistas han acogido a niños saharauis o conocen a familias que lo han hecho "por justicia social". "Un militante no puede dar la espalda al invadido y apoyar al invasor", mantiene.
El giro inexplicado
Las razones que llevaron a Sánchez a cambiar de posición con el Sáhara siguen siendo un arcano. Todos los políticos y militantes consultados por este periódico coinciden en no saber a qué se debe ese giro.
Entre las especulaciones, se habló de un presunto chantaje por la participación de los servicios secretos marroquíes en el programa de espionaje Pegasus, un virus de tecnología israelí que fue introducido en teléfonos de dirigentes políticos de todo el mundo, desde Emmanuel Macron a Pedro Sánchez y varios de sus ministros.
El cambio de posición abrió además un conflicto con Argelia que aún colea.
"Desde que sucedió lo de la carta nadie entiende nada, nadie sabe el porqué, nadie se explica esta deriva. Si te digo la verdad, creo que nadie sabe la razón, y he preguntado y hablado con militantes y con cargos políticos", lamenta Hamoudi.
Lo cierto es que tras la publicación de la carta y antes de la reunión de Rabat entre Sánchez y Mohamed VI, el Congreso de los Diputados votó mayoritariamente a favor de una propuesta presentada por Unidas Podemos, ERC y Bildu, aliados parlamentarios del Gobierno, que solicitaba ratificar el apoyo de España a la ONU para alcanzar una solución dialogada entre las partes en el conflicto del Sáhara Occidental.
"Es la culminación de la traición, la cesión a las presiones y el papel que juega Marruecos y los apoyos externos que tiene. Estados Unidos también intervendría en el giro definitivo de España en esta materia. En esa carta de un folio se ven reflejados todos los miedos, las cesiones", afirma Odón Elorza, exdiputado socialista, a EL ESPAÑOL. La posición de Sánchez respecto al Sáhara fue una de las razones que le llevó a renunciar a su escaño hace dos años.
El 27 de febrero de 2023, militantes y simpatizantes del PSOE se unieron en la iniciativa "Socialistas por el Sáhara" para intentar que la dirección del partido rectificase su apoyo al plan de autonomía de Marruecos.
Una corriente en contra
Apelaban y apelan al Derecho internacional, al respeto a los derechos humanos en el Sáhara Occidental y a no olvidar que España es la potencia administradora de iure de ese territorio mientras no concluya el proceso que decida sobre a quién corresponde la soberanía.
Hace dos semanas, Sumar presentó una iniciativa para conceder la nacionalidad española a los saharauis nacidos antes de 1976, bajo la Administración española. El PSOE votó en contra, igual que ya hizo en 2023 cuando dejó en el congelador una propuesta similar de Podemos.
La diputada saharaui de Sumar Tesh Sidi publicó en las redes que había recibido mensajes de compañeros parlamentarios socialistas avergonzados por la posición del PSOE en la Cámara. Incluso, la presidenta del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, se abstuvo de votar ya que tiene acogidos a dos niños saharauis.
"Creo que lo que ocurrió el otro día al final es una consecuencia de lo que lleva pasando tres años, desde aquella carta que nos pilló a todos por sorpresa. Hay muchos diputados dentro del PSOE con la misma postura que Francina. Pero aquí hay una decisión que se toma desde el Ministerio de Exteriores, que se pasa al Grupo Parlamentario, que fija la posición... y están las disciplinas de partido", dice Hamoudi.
Desde Socialistas por el Sáhara consideran que el PSOE incumple las resoluciones de su último Congreso y su programa electoral. Por ello han solicitado al Gobierno y al presidente, como secretario general del PSOE, que "rectifique" esta postura y "adopte las medidas necesarias para la conclusión del proceso de descolonización del Sáhara Occidental y la restitución de los derechos de los saharauis a los que España abandonó en 1975".