El sueño de la izquierda de sumar suficientes votos entre todos los partidos para desbancar al PP de la Xunta de Galicia en las próximas elecciones autonómicas parece desvanecerse. Moncloa asume ya que Podemos no se va a presentar a los comicios con Sumar y que esa ruptura, que divide a la izquierda, les condena en la comunidad autónoma.
"Si Podemos y Sumar van juntos a las elecciones, podemos tener una posibilidad de desplazar a Alfonso Rueda", asegura una ministra del PSOE. "A ver si las partes se lo piensan, porque si no sucede así, vemos muy difícil ganar", añade.
En la otra orilla del Ejecutivo, Sumar es pesimista. "Es prácticamente imposible" ir junto a Podemos en Galicia asegura otra ministra de la formación liderada por Yolanda Díaz. Añade, eso sí, que todavía es pronto para saber qué pasará en el País Vasco y que, ahí sí, podrían concurrir con el partido morado.
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En las elecciones generales del 23-J, los partidos de izquierda (BNG, PSOE y Sumar) superaron en número de votos a PP y Vox. Si bien no todas las elecciones funcionan de la misma manera, este resultado sirvió para atisbar la posibilidad de arrebatar al PP el poder en una comunidad si la izquierda no se fragmentaba demasiado.
Pero las malas relaciones entre Sumar y Podemos estallaron hace dos semanas cuando Podemos decidió romper con Yolanda Díaz en el Congreso de los Diputados e irse al Grupo Mixto. El partido liderado por Ione Belarra asegura que no se le dejaba tener un foco propio y que la mejor decisión era separarse.
Si bien las sucursales de Podemos en las distintas autonomías cuentan con independencia política para llegar a determinados acuerdos, la ruptura en el Congreso marca la línea de lo que ocurrirá en las elecciones que se celebrarán en 2024: las gallegas, las vascas y las europeas.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ya trasladó a su núcleo duro que le "preocupa" esa ruptura, no tanto en los términos relativos a la estabilidad de la legislatura, sino al coste electoral que pueda tener el hecho de ir por separado a las urnas.
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A pesar de que la decisión sobre qué pasará en el País Vasco no está tomada, Podemos ya presentó a Irene Montero, enemiga de Yolanda Díaz, como cabeza de lista a las europeas, tal y como adelantó EL ESPAÑOL en exclusiva. A ello hay que sumar ahora la dificultad para que concurran juntos en Galicia.
Quien ya ha rechazado de pleno integrarse en Sumar ha sido Anova, la formación que recoge el capital electoral de las mareas y que está dirigida por el histórico Xosé Manuel Beiras. El pasado sábado se reunió la coordinadora del partido y decidió no unir sus fuerzas a Sumar.
¿Elecciones en febrero?
Con la separación de Anova, los nacionalistas gallegos ponen fin a una relación con Yolanda Díaz que mantenían desde 2012, antes incluso de que se formara Podemos.
Por otro lado, Esquerda Unida lanzó un comunicado el mismo sábado en el que se afirma que no hay, por ahora, acuerdo con Sumar y que se pone manos a la obra a preparar su propia candidatura para las elecciones autonómicas.
Estos movimientos muestran la dificultad de Sumar para aglutinar a los partidos de la izquierda. Ahora Yolanda Díaz tendrá que reorganizar su estrategia y decidir un candidato a las elecciones, nombre que todavía no tiene decidido.
Los rumores de un adelanto electoral en Galicia han ido intensificándose en los últimos días. Se especula incluso con que Alfonso Rueda pudiera convocar esta misma semana para que los comicios se celebrasen el 18 de febrero.
Para que así fuera, Rueda debería anunciar la convocatoria electoral este jueves, tras la reunión del Gobierno de la Xunta, para que la orden pudiera publicarse el viernes, y así cumplir el plazo de casi dos meses que deben transcurrir entre su plasmación en el Diario Oficial de Galicia y la jornada electoral.