Movimiento Sumar, el partido de Yolanda Díaz, nada en el precario equilibrio entre condenar los crímenes de guerra del Estado de Israel y no justificar el terrorismo de Hamás, la organización salafista que el pasado sábado lanzó un ataque sin precedentes contra ellos. Así lo ha nivelado este lunes el portavoz de la formación, Ernest Urtasun, quien ha denunciado "la hipocresía" de los que denuncian los ataques palestinos "pero callan" contra la ocupación israelí.
"No es justa esa doble vara de medir, y es especialmente sangrante cuando se produce en las instituciones europeas y especialmente en boca de Ursula von der Leyen", ha señalado el eurodiputado. En su diatriba, el portavoz ha criticado el ataque de Hamás contra civiles pero, eso sí, recordando "el contexto de ocupación ilegal y apartheid por parte de Israel, que es sobre quien recae la gran parte de la culpa" del conflicto.
Urtasun, en representación de Yolanda Díaz, aboga por una "resolución pacífica del conflicto" y "la creación de dos Estados, uno de ellos Palestino, que sea viable". En las últimas horas Brasil, que ejerce la Presidencia del Consejo de Seguridad de la ONU, ha convocado una "reunión de emergencia" con esa misma solución de dos estados.
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El portavoz matiza así la polémica alrededor de Sumar y el conflicto palestino-israelí, cuando la diputada Tesh Sidi justificó el ataque el pasado sábado. En uno de sus tuits, la número 3 por Madrid argumentaba estar "con los pueblos y su derecho a la libre determinación. Hoy y siempre con Palestina. Habrá mucha manipulación mediática, tuits de 24 h, pero muchas sabemos que las y los palestinos son asesinados día y noche y nadie condena eso".
"Pedimos el ese inmediato de los bombardeos y del castigo colectivo sobre Gaza, que es un crimen de guerra. Cualquier acto cometido contra civiles debe ser condenado, lo cometa quien lo cometa. El principal responsable de este conflicto secular es el país ocupante [Israel] y su régimen de apartheid", ha equilibrado Urtasun. "Todo el mundo calla contra sus crímenes".
Como hicieran Egipto y Siria hace 50 años en Yom Kippur, la resistencia en Gaza ha elegido la festividad hebrea de Simjat Torá para perpetrar un ataque que ha pillado desprevenida a la inteligencia israelí, considerada la mejor del mundo. Los daños han sido importantes: 22 muertos, más de 545 heridos, la mitad sur del país encerrada en refugios y los agresores deambulan por las calles de siete ciudades que ya controla Hamás.
En represalia, el Gobierno israelí ha ordenado desconectar la Franja de Gaza de la red eléctrica. Israel ocupó durante cuarenta años la totalidad de Gaza y Cisjordania tras invadir al Estado Palestino; Hamás, por su parte, recuperó la franja en 2007. Desde entonces, la autoridad israelí ha asesinado a cerca de 7.000 palestinos.
"Estamos en guerra. No en una operación, ni una escalada: es una guerra, y la vamos a ganar", ha proclamado el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y advierte: "El enemigo pagará el precio más alto que jamás haya imaginado".