El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha prometido este sábado invertir 40.000 millones de euros en infraestructuras hídricas a lo largo de los próximos seis años, si es presidente del Gobierno, para garantizar el suministro de agua al campo, a todos los sectores productivos y al abastecimiento de la población.
Feijóo ha protagonizado un acto sectorial del PP sobre el sector agroalimentario y el mundo rural en el municipio de Gimenells (Lérida). Y allí ha apelado a sus orígenes, como gallego nacido en una pequeña aldea, para lanzar un mensaje a los votantes catalanes.
"Vengo de la periferia", ha dicho el líder del PP, "soy un político bilingüe, que ama una de las lenguas de su tierra. Entiendo lo que siente un catalán cuando le dicen que hay que hacer políticas centralistas. No lo haré, que no cuenten conmigo para aceptar imposiciones de nadie".
Pero también ha advertido sobre las políticas separatistas: "Los que quieren comer solos es que quieren comer más. Que no cuenten conmigo para romper la unidad del Estado, porque aunque pueda ser bueno para algunos políticos, creo que no es bueno para los ciudadanos de Cataluña".
El PP ha abordado la situación del medio rural con representantes de los principales sectores implicados, como el del cereal, el cárnico, el hortofrutícola, el vinícola y la distribución.
Frente al triunfalismo que Pedro Sánchez exhibe sobre las cifras macroeconómicas, Feijóo ha alegado que la economía española va, en todo caso, "como una moto estropeada, sin ruedas, sin freno y sin gasolina". Pues, según ha recordado, España es aún el primer país europeo en tasa de paro, en primero en paro juvenil, el país que ha incrementado su deuda pública y su déficit, y el último en recuperar su PIB previo a la pandemia.
El líder del PP ha planteado las principales propuestas de su partido para el campo, con medidas fiscales para fomentar la repoblación en el medio rural y una prioridad: garantizar el suministro de agua en toda España.
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Para ello ha reiterado su voluntad de alcanzar un "pacto nacional del agua" entre todas las comunidades autónomas y los sectores afectados. También se propone crear una red estratégica del agua, con un plan de modernización de infraestructuras como presas y canales.
Con ello se propone garantizar una reserva de agua embalsada, porque es la mejor "despensa ante las dificultades que puedan surgir en cualquier momento", como la sequía. Y aunque ha prometido 40.000 millones de inversión en infraestructuras hídricas, ha evitado mencionar los trasvases, consciente de que esta cuestión crea tensiones entre distintas comunidades autónomas.
España pierde cada día "millones de hectómetros cúbicos, entre un 20% y 25% de su caudal, porque no depuramos las aguas que podrían ser reutilizadas o porque están rotas las redes de saneamiento", ha señalado. La inversión anunciada también serviría para resolver este problema.
"Si depuramos y reutilizamos", ha dicho al respecto, "en España hay agua suficiente para todos, para la agricultura, la ganadería, el abastecimiento y la industria".
La fruta de Marruecos
Feijóo también ha prometido rebajas fiscales para las empresas que se instalen en el medio rural y para los particulares que quieran adquirir una vivienda en las zonas despobladas.
Así, ha anunciado, "empezaremos a crear un ecosistema para recuperar los pueblos con la industria y el trabajo. Con servicios públicos de educación y sanidad, volveremos a revitalizar buena parte de los pueblos de España".
Pero también ha prometido que batallará en Bruselas para que los productores españoles puedan competir en igualdad de condiciones: "Otros países están metiendo [en la UE] toneladas de alimentos sin cumplir los reglamentos comunitarios. Vamos a decir a las autoridades europeas que queremos cumplir, pero ellos también tienen que hacerlo".
Se trataba de una mención apenas velada a las importaciones de productor hortofrutícolas que están inundando el mercado europeo, procedentes de países como Marruecos, aunque en ningún momento ha mencionado a dicha nación.
"La política del tuit"
Alberto Núñez Feijóo ha recordado que, gracias al sector agroalimentario y la cadena de distribución, durante la pandemia "no ha faltado ni un alimento en un solo pueblo de España".
Y sin embargo, ha añadido, este sector ha sido especialmente maltratado por el Gobierno de Pedro Sánchez y ha perdido un 28,5% de su renta durante los últimos cinco años. Algo que ha atribuido a la falta de conocimiento del Ejecutivo sobre el sector y a que "la frivolidad se ha apoderado de la política, lo importante hoy es sacar un tuit, hacer una foto e irse a casa".
Durante toda su intervención, Feijóo no ha hecho ni una sola mención a la polémica por el pacto que María Guardiola anunció el viernes para convertirse en presidenta de la Junta de Extremadura, a cambio de entregar a Vox un senador de designación autonómica y la Consejería de Gestión Forestal y Medio Rural.