El voto del exterior puede decidir tres gobiernos el 28-M: Asturias, Canarias y Cantabria

Estas dos condiciones se dan en las comunidades autónomas de Canarias, Cantabria y, aunque el resultado será más dispar entre los dos bloques, también afectará al recuento de escaños en Asturias. En cambio, en las municipales el efecto será nulo, ya que los españoles que residen en el extranjero no pueden votarán a los ayuntamientos, al no estar empadronados.

Hay un millón de españoles residiendo en el extranjero con derecho a votar en las 12 autonomías que celebran elecciones, además de en Ceuta y Melilla, según los últimos datos del INE. En los últimos años, este sector había mostrado poca participación en los comicios, pero este 2023 ya no va a ser así. Tras la eliminación del tedioso trámite del voto rogado, el pasado mes de octubre, los partidos y los expertos prevén este año una elevada participación.

Podría llegar a superar el 30%. Un porcentaje similar al registrado en las elecciones anteriores a 2011, año en el que se implantó el voto rogado. Aunque algunos expertos apuntan que podría ser mayor, incluso, porque la digitalización y el acceso a los mensajes políticos han crecido mucho desde hace más de una década.

En la comunidad autónoma de Canarias esta nueva casuística, sin duda, influirá en el resultado. Según las encuestas, el PSOE del presidente Ángel Víctor Torres sigue a la cabeza. Sin embargo, los sondeos muestran que el apoyo a sus socios del llamado pacto de las flores [Nueva Canarias, Podemos y la Agrupación Socialista Gomera] cae notablemente.

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Si a ello se suma que el PP crece de manera considerable, en gran parte por la desaparición de Ciudadanos, y que Vox entrará en el Parlamento autonómico por primera vez, se dibuja un escenario en el que el color del Gobierno de Canarias dependerá de un puñado de votos.

Ahí entran en juego los 161.465 canarios que residen en el extranjero, principalmente en Cuba, Venezuela y Estados Unidos. Representan el 10% de todos los canarios con derecho a voto, por lo que una elevada participación de esta comunidad en el extranjero puede acabar haciendo que baile algún escaño del parlamento autonómico. Todo ello condicionará el Ejecutivo que salga de las urnas.

Los partidos no tienen estimaciones de cómo se puede comportar ese voto. Algo especialmente llamativo, teniendo en cuenta que las formaciones políticas analizan al detalle los estudios demoscópicos durante los periodos electorales. Los precedentes de las últimas elecciones sin voto rogado, las de 2008, quedan muy lejanos y hacer encuestas para saber cómo se comportará un voto un disperso por el mundo sale demasiado caro.

Algo similar puede ocurrir en Cantabria. Su población residente fuera del país representa al 8,8% del censo total, 40.911 personas. Los cántabros están repartidos, principalmente, por México, Argentina y Cuba.

Las últimas encuestas dan una victoria al PP con sólo un escaño más que el PRC del actual presidente, Miguel Ángel Revilla. Es decir, 14 frente a 13. Sin embargo, Revilla podría gobernar con el apoyo del PSOE, al que los sondeos otorgan 6 escaños, mientras que los populares sólo contarían en su haber con dos de Vox.

PRC y PSOE sumarían 19 escaños, uno más de los necesarios para la mayoría absoluta, por lo que el resultado definitivo es muy volátil: de nuevo, una alta participación de los españoles fuera de España resultaría decisiva.

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En Asturias hay que abordar este fenómeno con cierta cautela. Las encuestas dan al actual presidente, el socialista Adrián Barbón, como claro ganador con 19 escaños. A pesar de que el PP sacaría 15 diputados y Vox 4, el resto de partidos a la izquierda de los socialistas podrían dar la victoria a Barbón.

Pero Asturias es el territorio en el que el voto de los españoles residentes en el extranjero puede notarse más y hacer que baile algún escaño. En el Principado hay 122.757 votantes fuera de España, la mayoría en Argentina. No se trata de una cifra muy elevada en términos absolutos, pero sí en relativos: representan un 14,7% del censo, un porcentaje muy influyente.

¿Y las generales?

Ese elevado porcentaje de asturianos que viven fuera de España también puede tener un eco en las elecciones generales previstas para el mes de diciembre. Asturias, como autonomía uniprovincial, aporta un total de siete escaños a la Cámara Baja.

Una elevada participación de los asturianos residentes en el extranjero influirá en qué diputados acaban en el Parlamento nacional. Pero no es la única comunidad autónoma en la que esto sucede. Asturias es la segunda autonomía con más población residente en el extranjero después de Galicia.

En Orense, un 40,68% de su censo reside en el extranjero. Es casi la mitad. En Lugo, lo hace el 25,62%; en La Coruña es el 17,68% y en Pontevedra el 17,72%. Es la comunidad autónoma con más gente fuera de España, siempre lo ha sido y por eso en Latinoamérica a los españoles se les llama gallegos. Y las cuatro provincias gallegas aportan 23 diputados al Congreso.

La mayoría de los gallegos que están fuera de España, al igual que los asturianos, residen en Argentina. Por ello, no es casual que el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, haya viajado al país latino en diversas ocasiones como presidente de la Xunta de Galicia y que sea una visita habitual dentro del PP gallego. Este tipo de viajes demuestran la importancia del voto en dichas comunidades, especialmente si la participación es alta.

Contando con las cuatro provincias gallegas y la asturiana, hay 10 provincias cuyo porcentaje de electores en el exterior representa más del 10% del censo. Entre todas, aportan al Congreso nada menos que 50 diputados. Es prácticamente el grupo parlamentario de Vox al completo, lo que demuestra el peso que pueden llegar a tener en caso de una alta participación.