La ministra de Igualdad, Irene Montero, este lunes en una entrevista en TVE.

La ministra de Igualdad, Irene Montero, este lunes en una entrevista en TVE.

Política

Irene Montero dice que el PSOE rompe el acuerdo y enmendará la Ley Trans: no se aprobará este año

La ministra de Igualdad asegura que en ningún momento pensó en dejar la política tras el ataque de la diputada de extrema derecha Carla Toscano. 

28 noviembre, 2022 09:40

La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha anunciado este lunes que el PSOE rompe el acuerdo y enmendará la Ley Trans, por lo que no se aprobará este año como se pretendía, ya que Podemos no aceptará "nigún tipo de recorte" en esta norma. 

Ferraz mantendrá sus enmiendas parciales a la Ley Trans ya que considera que es necesario mejorar y pulir un texto que salió del Consejo de Ministros el pasado  octubre y que fue consensuado tanto por socialistas como por Podemos. "El PSOE nos acaba de comunicar que no quiere acuerdo", ha lamentado Montero este lunes en una entrevista en TVE.

De esta forma, el PSOE "seguirá con sus enmiendas" para que los menores de 16 años y mayores de 12 necesiten autorización de un juez para cambiar de sexo en el registro y "habrá dos propuestas de la Ley Trans". "La propuesta de este Gobierno es la que ley que está ahora en tramitación. El PSOE ha decidido presentar enmiendas y no buscará el acuerdo", ha añadido.

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Ante esto, Irene Montero ha reconocido estar "muy preocupada por el recorte de derechos", aunque espera que "en las próximas horas podamos negociar esto". "Creo que aún estamos a tiempo de intentarlo y así trataré que ocurra. Voy a dejarme la piel", ha afirmado.

Así, el PSOE irá con sus enmiendas vivas a la ponencia sobre el proyecto de Ley para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI que se producirá esta semana, algo que retrasará la aprobación de esta norma a 2023, en contra de los deseos del Ministerio de Igualdad que apuesta por su aprobación antes de que acabe el año. "Es posible que unan sus votos al PP para intentar un recorte de derechos", ha alertado Irene Montero sobre la decisión del PSOE de no llegar a un acuerdo. 

Sobre la presión política y los ataques de Vox por la ley del sólo sí es sí Irene Montero ha dejado muy claro que descarta dimitir. "Cuando hay momentos difíciles, tenemos la obligación de dar la cara y demostrar que somos más", ha explicado.

Ha reconocido que no ha pensado en irse y ha añadido que, al margen de los ataques personales, el movimiento feminista tiene "la responsabilidad colectiva de demostrar que no hay violencia política capaz de frenar la fuerza del feminismo".

Las emiendas del PSOE

Fue el pasado 31 de octubre cuando el Grupo Parlamentario Socialista registró sus enmiendas parciales a la Ley Trans. De las 15 que presentaron, tres de ellas son las más polémicas y las que chocan de manera frontal Podemos, que ha advertido este lunes en rueda de prensa que no aceptarán "ningún tipo de recorte" en esta norma. 

Una de esas enmiendas es la que pretende que los menores de 12 a 16 años necesiten el aval judicial para poder cambiar el nombre y el sexo en el Registro Civil, una exigencia que el texto actual contempla únicamente para los menores de 12 a 14 años.

De esta forma, el PSOE busca limitar la autodeterminación de género en los menores de 16 años con el objetivo de "reforzar las garantías" para ese tramo de edad, de acuerdo con "el interés superior del menor".

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Por otro lado, el PSOE también intenta cambiar el artículo 65 de la Ley Trans, en el que se equipara la violencia de género a otro tipo de violencias, como la intrafamiliar. La norma elaborada por Unidas Podemos exigía que en caso de que las personas LGTBI sufran violencia en el ámbito familiar o de la pareja, esta se tratará como un caso de violencia machista. 

El PSOE rechaza tal posibilidad, aunque sí acepta algunas medidas especiales para las personas LGTBI que hayan sufrido este tipo de violencia, como "la reordenación de su tiempo de trabajo, la movilidad geográfica y el cambio de centro de trabajo a sus empleadores, que deberán atender la solicitud en la medida de sus posibilidades organizativas".

Otro de los puntos clave que el partido intenta enmendar es el de la reversibilidad. Actualmente, el proyecto de Ley contempla que esta reversibilidad se pueda solicitar a partir de los seis meses a través del mismo procedimiento regulado para el cambio registral, que no requiere autorización judicial en mayores de 14 años.

Aquí el PSOE quiere poner coto a la norma. En la enmienda que planea presentar, se solicitaría el cambio registral "obteniendo aprobación judicial". Lo que buscan con esto es que no se convierta en una situación que genere idas y venidas arbitrarias. 

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La presentación de estas enmiendas llegó después de que los socialistas pidieran, ante el asombro de Podemos, una semana más de plazo para presentar enmiendas parciales, pese a la presión de sus socios, que exigían y siguen exigiendo que se desbloquee la tramitación de esta ley. 

Muy difícil aprobarla este año

El objetivo de Igualdad era que la Ley Trans se aprobara antes de que finalizara el año, pero las enmiendas del PSOE y la presentación por parte del PP de una avocación harán que esta norma no sea aprobada en 2023. 

Si bien Irene Montero exigió al PSOE un calendario para que esta ley se aprobara antes de 2023 con la fecha límite en el 18 de noviembre, los socialistas se saltaron este plazo. Tal y como publicó EL ESPAÑOL, fuentes socialistas creen que el trámite en el Congreso de los Diputados para que la Ley Trans sea aprobada podría incluso alargarse hasta el próximo mes de febrero. Y en ello tienen mucho que ver las enmiendas del PSOE, que hoy mismo han anunciado que no retirarán.

En estre retraso de la Ley Trans tiene también mucho que ver el PP, que ha presentado una avocación. Se trata de una estratagema para que la norma no sea aprobada por la Comisión de Igualdad directamente, sino que vuelva al Pleno del Congreso para que voten todos los diputados. Los populares buscan con esto que todos los parlamentarios, especialmente los del PSOE, se retraten en público sobre su postura.

Aunque es prácticamente imposible que prospere esta maniobra, porque obligar a sus diputados a retratarse dista mucho de los planes del PSOE, supondrá una demora adicional en la tramitación.

A partir de ahí, ya situados a principios de diciembre, la norma seguirá en la Comisión de Igualdad y se debatirán las enmiendas de los grupos parlamentarios. Además, una parte importante del PSOE quiere que se dé cita a expertos para que se pronuncien en la materia, con el fin de que el texto definitivo salga con todas las garantías jurídicas necesarias para que no sea tumbado más adelante por el Tribunal Constitucional. La exvicepresidenta del Gobierno Carmen Calvo está a favor de ello.

El caledario se fijará en la Mesa de la Comisión de Igualdad, donde el PSOE tiene mayoría y aboga por ir sin prisas y escuchar a todos los grupos. Así, esto se haría durante la primera mitad de diciembre pero las vacaciones de Navidad y que en enero no hay actividad en el Congreso, obligarán a que el debate no se retome hasta febrero.