La embajadora de Marruecos en España, Karima Benyaich, ha regresado este domingo a Madrid tras su retirada del país a mediados del mes de mayo de 2021 después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, haya cambiado su postura sobre el Sáhara Occidental. De esta forma, Marruecos ha dado por cerrada la crisis diplomática con España.
El Gobierno marroquí llamó a consultas el año pasado a su embajadora en Madrid tras la crisis diplomática abierta por la acogida en España del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, que se vio agravada por la entrada de miles de migrantes en Ceuta procedentes de Marruecos.
No obstante, la embajadora marroquí no ha regresado a España hasta este momento, después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, haya cambiado su postura sobre el Sáhara Occidental al avalar como una "base seria y creíble" el plan de Rabat para la excolonia española.
El rey Mohamed VI recibió una misiva esta semana en la que el presidente Pedro Sánchez anunciaba el abandono de la postura histórica española sobre el Sáhara y se posicionaba a favor de la propuesta de autonomía de este país para la región, una decisión anhelada por Marruecos.
Durante la conversación que tuvo con EL ESPAÑOL, Benyaich ya se mostró satisfecha porque EEUU hubiera reconocido la soberanía marroquí sobre el Sáhara Occidental: "Este reconocimiento es algo natural y marca un gran momento histórico en nuestras relaciones", señaló entonces.
En el lado opuesto, Argelia ha denunciado un "repentino retroceso" en las relaciones diplomáticas y ha tachado de "vergonzoso" el proceder del ministro de Exteriores, José Manuel Albares, además de llamar a consultas a su embajador en Madrid, Said Musi.
El Gobierno de España, en cambio, se ha mostrado "sorprendido", y ha asegurado este sábado que informó "previamente" a Argelia sobre la posición en relación al Sáhara Occidental.
La decisión también ha despertado duras críticas en el seno del PSOE, así como por parte de los socios de Gobierno de Unidas Podemos, y del Partido Popular, que la han calificado de "temeridad" y de "chapuza política".