El barómetro del mes de marzo no sólo llega con intención de voto. Al CIS de José Félix Tezanos ya le ha dado tiempo a preguntar a los españoles por la valoración de 1 a 10 a los líderes de distintos países implicados en la respuesta a la guerra y sus consecuencias. Y Pedro Sánchez es el mandatario de la Unión Europea que peor parado sale. El presidente español sólo alcanza el aprobado raspado, con un 5,39.
Se cumplen tres semanas desde que Vladímir Putin ordenó la invasión de Ucrania y es el momento del primer balance de la opinión pública sobre la gestión que están haciendo los líderes políticos de la crisis.
El instituto público, dirigido por el antiguo miembro de la Ejecutiva del PSOE pide a los españoles la opinión sobre la gestión de "la guerra ruso-ucraniana". Y a pesar de la manera equidistante en que presenta el acontecimiento, el líder al que mejor ven los consultados es el presidente ucraniano Volodímir Zelenski, con 7,37 puntos de valoración.
Sánchez queda por detrás de otro dirigente español. Josep Borrell, Alto Representante de la UE para la Política Exterior, recibe una nota de 6,41. Ligeramente por delante del ministro de Exteriores europeo aparece la presidenta de la Comisión, la alemana Ursula von der Leyen, con un 6,74 de valoración. Ella es la mejor valorada, con una centésima de ventaja sobre el presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron (6,73).
Se puede concluir que los españoles se sienten mejor representados y defendidos de los efectos de la guerra por las instituciones europeas que por las nacionales. Así se deduce de que el canciller alemán también queda por detrás de su compatriota al frente del gobierno europeo. Olaf Scholz es puntuado con un 6,32.
Cabe recordar que el Ejecutivo alemán, en las primeras jornadas, apareció ante la opinión pública como el más reticente de los europeos a aplicar sanciones firmes y contundentes al régimen de Putin, dada su dependencia del gas ruso.
Sin embargo, pasados tres días, dio el ok a la expulsión de los principales bancos rusos del sistema internacional de pagos SWIFT. Y a la semana de la invasión, reunió a su Parlamento de urgencia un domingo y anunció un giro radical en su política exterior y de defensa, duplicando el presupuesto militar.
"Arrastrando los pies"
Esas decisiones, y las presiones de la OTAN y de sus homólogos europeos, motivaron la rectificación del presidente español en dos aspectos clave: la entrega bilateral de armas ofensivas a Kiev y el compromiso de alcanzar el 2% del PIB en gasto militar.
La oposición acusó a Sánchez de "ir con los pies a rastras" en el apoyo a Ucrania; ahora le señalan por retardar las medidas para paliar los efectos económicos: Sánchez ha anunciado que hasta el Consejo de Ministros del 29 de marzo no tomará ninguna decisión para bajar los precios de la electricidad, los combustibles y el gas.
Sorprende que la sociedad española, con un gran peso de los sectores tradicionalmente antiamericanistas, valore también a Joe Biden por encima del gobernante español. Si bien por muy poca diferencia, el presidente de Estados Unidos aventaja al español y recibe 5,42 puntos.
En todo caso, no sorprende que el peor puntuado sea el presidente ruso. En una escala de 1 a 10, Putin es reprochado unánimemente y recibe sólo 1,35 puntos entre los encuestados. Su aliado natural, en quien la comunidad occidental pone ahora las esperanzas para lograr la pacificación de la contienda y la retirada de las tropas rusas de Ucrania, el presidente chino Xi Jinping, suspende con un 3,44.