Tras las elecciones andaluzas de diciembre, el PP alcanzó un pacto con Vox para permitir la investidura de Juan Manuel Moreno como presidente. Cuando Pedro Sánchez adelanto las elecciones al 26-A, el líder de los populares, Pablo Casado, pidió al partido de Santiago Abascal que se retirara de las provincias más pequeñas para no fragmentar el voto de derechas, una propuesta que éste ha rechazado. A pocos días de que empiece la campaña, Casado endurece su discurso contra Vox: tacha de "disparate" su propuesta de que todos los ciudadanos puedan llevar armas.
"La propuesta de Vox de ayer de promover la tenencia de armas por parte de los particulares nos parece un disparate. Nosotros confiamos en la Policía Nacional, en la Guardia Civil, en las policías autonómicas y locales y en las fuerzas armadas, que defienden a todos los españoles. Y yo creo que no hace falta que los españoles nos tengamos que defender nosotros mismos", ha dicho Casado a su llegada a la reunión del PP europeo previa a la cumbre de primavera.
El líder del PP ha esgrimido incluso el caso de Australia, donde según ha dicho cuando se derogó la ley para favorecer la tenencia de armas, los homicidios bajaron un 60%. "España es uno de los países con menor índice de delincuencia y menor número de homicidios por habitante. Creo que estas propuestas demagógicas de Vox son tremendamente irresponsables y no son muy respetuosas con la labor que hacen nuestras fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado", ha insistido Casado.
¿Significa este distanciamiento que el PP renuncia a llegar a acuerdos con Vox en el futuro? Casado no descarta nada. Con el partido de Abascal, ha dicho, comparte el documento del pacto en Andalucía, en el que el PP "no renunció absolutamente a nada de lo que está en nuestro programa y nuestro ideario". "Pero por otro lado estamos en contra de otras muchas propuestas como la supresión del Estado de las autonomías, como la política que tienen de inmigración o la política que pretendían tener sobre la lucha contra la violencia de género", ha apuntado.
El líder del PP se queja de que sus pactos con Vox susciten más críticas que los de Sánchez con Podemos o con los independentistas. "Lo que me parece muy curioso es que se vea como muy tolerante y muy sensato que el PSOE pacte con un partido tan radical, tan comunista y tan fuera de toda lógica como Podemos y con los independentistas de Torra que piden la vía eslovena, es decir, la guerra civil en España", ha protestado.
El objetivo de Casado es que el PP lidere la alternativa al Gobierno de Sánchez tras las elecciones. Después, está dispuesto a llegar a pactos preferentemente con Ciudadanos, pero también a "acuerdos puntuales" con Vox. Al mismo tiempo, mantiene su oferta a Abascal para que se retire de las provincias pequeñas.
"Deberíamos reflexionar si en España ahora lo que hace falta es concentrar el voto, aunar esfuerzos, unir a todos los electores del centro derecha para conseguir que Sánchez deje el Gobierno, o si quieren seguir haciendo campaña sin propuestas y con alternativas como la de llevar armas por la calle que me parece un disparate", ha concluido.
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