La guerra ya es abierta. Pasados dos meses de la salida de Íñigo Errejón de Podemos, aunque sigue siendo nominalmente parte de su consejo ciudadano, la dirección de Pablo Iglesias ha servido el plato de su venganza despidiendo por carta y con 20 días por año trabajado a 11 colaboradores de su ex número dos.
Aprovechándose de la reforma laboral que el mismo exige derogar, Iglesias elimina así de la nómina de Podemos a los 11 miembros del equipo más cercano al ahora candidato de Más Madrid a las elecciones regionales, de la mano de Manuela Carmena.
La ruptura, así, es definitiva, y no hay vuelta atrás. La ahora candidata de la dirección, Isabel Serra, confirmaba el miércoles a este periódico que "hay que asumir que esa persona, que fue elegida por los inscritos, se ha ido, y qué iremos con dos candidaturas distintas".
Fuentes del equipo de Errejón alegaban que el ex número dos de Podemos sigue "abierto a llegar a acuerdos", pero sus colaboradores ya habían recibido la misiva del despido y la cuenta de su finiquito basada en la cantidad más abaratada que permite la reforma laboral del Gobierno de Mariano Rajoy.
Este periódico ha podido saber que Podemos también ha despedido al menos a dos de sus asesores en el Senado, aprovechado el fin de la legislatura, también con la indemnización mínima.
La situación, en todo caso, ya era insostenible con los errejonistas. Desde la salida de Íñigo el día en que Podemos cumplía cinco años, su equipo más cercano trabajaba para otro proyecto, el de Más Madrid, pero cobrando de Podemos. Ahora, esa situación se solventa pero Podemos aplica una norma en la que no solo no cree, sino que ha criticado públicamente por "precarizadora del mercado laboral, injusta y que vulnera los derechos sociales".
El mismo Pablo Iglesias, que reparece este sábado tras su baja de paternidad en plena tormenta en el partido, ha exigido a Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, la derogación de la norma y le ha afeado a su ministra de Economía, Nadia Calviño, ser "la derecha del Ejecutivo" y "representar los intereses de las oligarquías" dentro del equipo ministerial por negarse a la derogación "de las dos reformas, la del PP y la de Zapatero".
En el mismo día en el que se ha sabido que el errejonista Pablo Bustinduy renunciaba a liderar la lista a las europeas, Podemos saca de su nómina a 11 personas de la cuerda del examigo de Iglesias. El enfrentamiento no cierra las puertas a pactos posteriores a las elecciones, pero enrarece las relaciones mientras las encuestas no dan buenos resultados ni a Isabel Serra por el partido morado ni a Errejón, tras la aparición de una tercera candidatura a la izquierda del PSOE, la de Madrid en Pie, que reúne a IU y a los Anticapitalistas.