La caza se ha convertido en un asunto de gran debate en España. Pero especialmente en Andalucía, donde se trata de un importante motor económico. Según apunta la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía azul, este sector lleva a mover hasta 3.500 millones de euros solo en el sur del país.
Las estimaciones de Ramón Fernández-Pacheco, dirigente de este departamento, aseguran que este universo ofrece trabajo para unas 45.000 personas y sirve para atraer población de manera fija hacia los territorios rurales de la región. Sin embargo, eso no evita que este deporte se encuentre siempre en el centro de la polémica por la reducción de su actividad y por los continuos enfrentamientos con el sector más animalista.
En estos momentos se cree que puede haber unos 250.000 cazadores registrados en Andalucía, lo que implica una gran caída de licencias respecto a hace unos años. Por ello, para luchar contra esta desaparición de cazadores e intentar atraer al público más joven a esta disciplina, la Junta de Andalucía está intentando poner en marcha diferentes políticas que sirvan para dinamizar el sector.
Actualmente, la edad media de las personas que practican la caza en Andalucía se sitúa entre los 42 y los 52 años. La caza es una tradición que solía pasar de padres a hijos y extenderse entre los grupos de amigos. Sin embargo, esta transmisión se encuentra ya receso. Por eso, desde la Junta de Andalucía han considerado necesario realizar el planteamiento de varias medidas para intentar incentivar de nuevo la afición por la caza.
¿Qué medidas pondrá en marcha Andalucía para incentivar la caza?
La Junta de Andalucía persigue el objetivo de revitalizar la caza y para ello está estudiando poner marcha diferentes medidas con un reto principal: acercar este deporte a los más jóvenes. Por ello, se está planteando la implantación de jornadas dedicadas a la caza, el establecimiento de zonas expresas de aprendizaje en cada coto e incluso la utilización de terrenos públicos para fomentar la iniciación.
Es precisamente esta medida la que más polémica ha generado, ya que diferentes sectores de la sociedad, identificados principalmente con una ideología de izquierdas o animalista, han manifestado su descontento con la medida de destinar terrenos públicos a la práctica cinegética. Y más especialmente a la iniciación de personas jóvenes en este universo.
Dentro de este paquete de medidas también se promoverá que personas que se están iniciando puedan llevar a cabo una formación con cazadores más veteranos o incluso el ofrecimiento de licencias temporales a precios asequibles para intentar captar nuevos aficionados.
No obstante, desde la Junta de Andalucía aseguran que no solo se está intentando acercar a los jóvenes, sino también a la población urbana, para que conozca una nueva actividad. La caza no deja de ser una forma de ocio desarrollada en el medio rural como tantas otras que existen. Con ello también se pretende mejorar la imagen nacional de la caza y proteger la reputación de aquellas personas que la practican y que habitualmente suelen ser atacadas en la sociedad por los sectores más animalistas.
Otra medida estrella será implicar a los cazadores en el control de la situación en la que se encuentran tanto el campo como las especies. La Junta va a perseguir que se mejoren los canales informativos a partir de registros voluntarios donde los propios cazadores puedan aportar información sobre la situación de las especies o dar datos sobre diferentes fenómenos que puedan influir en la actividad cinegética.
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Así se podrá recopilar información de primera mano sobe el estado, el número de individuos, procesos reproductivos o enfermedades de las diferentes especies. Información de los cazadores para los cazadores, pero bajo el control de la Junta de Andalucía a través del nuevo programa que pretende sacar adelante.
¿Qué objetivo pretende conseguir Andalucía con sus nuevas medidas?
Desde la Consejería de Medio Ambiente, se tiene el objetivo de cambiar la percepción que se tiene en las principales ciudades y en los grandes núcleos urbanos de la caza. Consideran que la caza está mediatizada por ciertos sectores de la prensa que persiguen y atacan su presente y su futuro.
La Junta de Andalucía, a través de su programa de reforma de la caza en la región, pretende perseguir también a aquellos cazadores que no respetan las normas y que añaden sombra a este deporte que ellos intentan encumbrar y proteger. Para muchas instituciones, esta práctica sigue siendo la manera más efectiva para establecer sistemas de control de las poblaciones de determinadas de especies sin invertir dinero público en ello. Se trata de un sistema de control y vigilancia masivo.
Otro de los objetivos que tiene la Junta es controlar las plagas de animales que pueden provocar enfermedades en animales domésticos e incluso en humanos. Hace relativamente poco, se apoyó la muerte de jabalíes y cerdos vietnamitas una vez se había certificado que sus poblaciones se habían descontrolado suponiendo un riesgo alto para la sociedad.
La salida del PSOE del gobierno andaluz ha supuesto un evidente apoyo para la caza en la región. Sin embargo, los cazadores quieren huir de posicionamientos políticos y que se les deje practicar una afición que consideran "necesaria" para el buen funcionamiento del medioambiente y de la naturaleza. El objetivo de la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía azul es aprobar su nuevo plantes antes de que termine el año.