Carlos García Juliá es uno de los ultraderechistas condenados por la Matanza de los abogados de Atocha de 1977. Sentenciado a 193 años de prisión, de los que sólo cumplió 14, aprovechó una libertad condicional para fugarse. Prófugo de la Justicia durante 24 años, fue extraditado por Brasil en febrero del 2020 y volvió a ingresar en prisión, si bien salió unos meses después. Ahora se presenta como cabeza de lista de FE de las Jons al Ayuntamiento de Bilbao de cara a las próximas elecciones municipales del 28-M.
Aunque se le augura un apoyo casi nulo, su mera presencia tensa el ambiente, pues no es la primera vez que los falangistas tratan de utilizar Bilbao como plataforma electoral. De hecho, su cabeza de lista por Bilbao en los anteriores comicios municipales fue Jesús Fernando Fernández Gil, uno de los condenados por el asalto al centro cultural de Blanquerna de Madrid.
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García Juliá abandonó España en 1991, tras cumplir 14 años de condena y acceder a la libertad condicional. Había obtenido un permiso para trasladarse a trabajar a Paraguay, pero en 1996 fue declarado "prófugo de la Justicia" cuando incumplió la obligación de comparecer todos los meses ante la Embajada española.
En diciembre del 2018, tras permanecer casi dos décadas desaparecido y pasar un periodo en la cárcel en Bolivia por un delito relacionado con el narcotráfico, Brasil lo extraditó a España.
Ingresó en la prisión de Soto del Real, pero en 2020 la Audiencia de Ciudad Real atendió la petición de su abogado para liquidar la condena: en noviembre de ese año salió en libertad.
Carlos García Juliá estuvo vinculado en el pasado a Fuerza Nueva y al franquista Blas Piñar. Los hechos por los que fue condenado a 193 años de cárcel constituyen uno de los episodios más negros de la Transición.
Carlos García Juliá y la Matanza de Atocha de 1977 que hizo temblar la Transición
Aquella noche del 24 de enero de 1977, García Juliá contaba sólo 24 años. Junto a otros dos pistoleros de extrema derecha, accedió al despacho de abogados laboralistas de la calle Atocha 55, vinculado al Partido Comunista y al sindicato Comisiones Obreras (CCOO), y asesinó a tres abogados laboralistas, un estudiante de Derecho y un administrativo: Luis Javier Benavides, Serafín Holgado, Ángel Rodríguez, Javier Sahuquillo y Enrique Valdevira. En el atentado, Alejandro Ruiz-Huerta, Lola González Ruiz, Luis Ramos y Miguel Sarabia resultaron gravemente heridos.
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Los pistoleros buscaban al dirigente del Sindicato de Transportes de CCOO, Joaquín Navarro, pero éste se había marchado y los ultras dispararon a bocajarro contra quienes se encontraban en el despacho. Según la sentencia, Carlos García Juliá y José Fernández Cerra fueron los que apretaron el gatillo. Un tercer implicado, Fernando Lerdo de Tejada, que llevaba también pistola, no llegó a entrar en el despacho. Los tres entraron en prisión con destinos distintos.
Un acontecimiento que representa la convulsión propia de la Transición Española y el intento fallido de retroceder en la lucha por las libertades. Esta Semana Trágica fue un momento especialmente delicado en el proceso hacia la democracia: violencia subversiva, días sangrientos y cruciales en los que la ultraderecha mostró su peor rostro a través del terrorismo.
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La respuesta de la sociedad, la Abogacía, CCOO y el Partido Comunista fue, sin embargo, contundentemente pacífica. La mayor condena para los nostálgicos del odio fue que España se consolidara como un Estado democrático y de Derecho, con el apoyo mayoritario de una sociedad que anhelaba recuperar la convivencia, sus derechos y libertades.
Las Falanges de España
La Falange Española de las JONS (FE de la JONS) se reivindica como la Falange originaria, mientras que la Falange Española Tradicionalista y de las JONS (FET) era el partido único del Régimen y el Movimiento Nacional (MN) fue su continuador. Pocas son las diferencias ideológicas entre estas facciones: todas ellas se declaran herederas del fundador de la Falange, José Antonio Primo de Rivera, según el artículo científico de la revista Ayer, Los estudios sobre las Falanges FE de las JONS, FET y de las JONS: revisión historiográfica y perspectivas.
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El origen de la FE de la JONS se remonta a la fusión, en 1934, de las Juntas de Ofensiva Nacional-Sindicalista de Ramiro Ledesma, clave en la articulación intelectual del fascismo español, y la Falange Española fundada por José Antonio Primo de Rivera.
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En las elecciones europeas del 2019, la FE de las JONS se presentó en coalición con otros grupúsculos como Democracia Nacional, Alternativa Española y La Falange, bajo el nombre de ADÑ Identidad Española: la candidatura obtuvo un resultado irrisorio.
La sangrienta guerra entre las Falanges y Vox por los votos ultra
Una guerra cruenta, pero no tan conocida, se libra entre el partido de Santiago Abascal, Vox, y la FE de las JONS, cuyo "jefe nacional" es actualmente Norberto Pico. En no pocas ocasiones se han producido choques entre ambas facciones de la extrema derecha.
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La FE de la JONS ha acusado numerosas veces a Vox de plagiarle el discurso político, mientras en el seno de Vox se produce una pugna interna entre el bando más falangista (que encarnan figuras como Jorge Buxadé) y el sector neoliberal (representado por dirigentes como Iván Espinosa de los Monteros).